Cierran una válvula que abastece al occidente

El Nuevo Día. Transredes negociaba ayer con los cívicos que tomaron una estación en Samaipata. Sigue irregular el envío de gas natural a Brasil y Argentina.

Cívicos de la zona de los valles cruceños tomaron la madrugada de ayer una estación de bombeo que suministra gas al occidente, mientras que la exportación a Brasil y Argentina sigue siendo irregular.

Pasadas las tres de la madrugada de ayer una treintena de personas afines al movimiento cívico de Samaipata, ingresaron de manera pacífica a la planta y cerraron la válvula del ducto que lleva su producción a Cochabamba. El suministro al occidente disminuyó en 15 por ciento, informaron desde YPFB. Anoche una comisión de la estatal petrolera negociaba para reestablecer los envíos.



Fuentes oficiales de YPFB confirmaron la toma de otras válvulas en la fronteriza población de Pocitos (30 kilómetros de Yacuiba), desde donde se despacha el gas a la Argentina (entre 1 y 2 millones de metros cúbicos diarios). Los medios de comunicación de Yacuiba indicaron que un grupo de mujeres encabezó la toma pacífica de las instalaciones de Transredes.

Ayer también se suspendió el envío de más de la mitad del gas contratado por Brasil (unos 31 millones de metros cúbicos diarios) tras producirse en la madrugada el cierre de otra válvula del Gasoducto Yacuiba-Río Grande (Gasyrg), administrado por Transierra.

Desde Brasil, Petrobras informó que se reanudó el envío de 14 millones de mcd a las 13.00 y luego de 8 horas.

El miércoles ya se redujeron los envíos a Brasil en un 10 por ciento a causa de lo que el Gobierno consideró un “atentado” de grupos de la oposición contra el mismo gasoducto.

Hasta ayer seguía interrumpido el suministro de tres millones de mcd en la válvula dañada, ubicada en la zona de Palmar Grande a 51 kilómetros de Yacuiba. Transierra reportó que el incendio se apagó ese mismo día. Personal de la contratista Bolser se dedicó ayer a “enfriar” el ducto que nace en el campo San Alberto y conecta al Gasyrg.

Vuelta Grande, ubicada a 400 kilómetros de Santa Cruz en la provincia Luis Calvo de Chuquisaca, fue retomada por los operadores de la compañía Chaco que ya realizaban los trabajos para reactivar su producción. La planta había sido tomada el martes por unas 100 cívicos de Tarija y Villamontes. Agencias

Producción

Las cifras del gas • Bolivia produce 40 millones de metros cúbicos diarios de gas. Exporta 31 millones a Brasil, envía 1,5 millones de mcd a Argentina y el resto lo destina al mercado interno.

Multas • El ministro de Minas y Energía de Brasil recordó que el contrato contempla una multa económica si Bolivia incumple los volúmenes de envío de gas.

Bolivia jamás había fallado en los envíos a la Argentina

Alvaro Ríos, ex ministro de Hidrocarburos

¿Qué puede dejar la toma de válvulas y el cierre de plantas productoras de gas?

En todo esto hay que lamentar la pérdida de imagen de Bolivia como país exportador. Hasta ahora Bolivia había sido un proveedor serio con una reputación muy sólida, en sus 36 años de contrato con Argentina, jamás había fallado.

Esta solidez permitió realizar los contratos con Brasil, desde hace diez años enviamos gas a este país; sin embargo, primero comenzamos incumpliendo en el envío de gas a Cuiabá; los despachos a las distribuidoras de gas a San Pablo, no se está cumpliendo en su totalidad. Los contratos con Argentina también se incumplen por la falta de inversión y capacidad de producción. Esto demuestra que hoy somos poco serios. Los contratos se los firma para cumplir.

Estos últimos hechos nos coloca ante los vecinos y el mundo como proveedores poco serios, y que no tenemos la capacidad de cumplir los compromisos asumidos; se muestra además que existe un gobierno que no tiene la capacidad de solucionar los problemas internos.

Creemos que la seriedad del país se está minando. Yo no veo que venga una gran petroquímica a realizar fuertes inversiones. Las empresas son necesarias para alimentar grandes inversiones. No veo proyectos de GNL (Gas Natural Licuable) a largo plazo, no creo que se incremente los volúmenes al Brasil por que los precios de Bolivia sean más baratos.

¿Existen antecedentes sobre problemas similares?

Brasil aceptó la nacionalización y venta de las refinerías, que fue en forma casi obligatoria; aceptó también la militarización de los campos de San Alberto y San Antonio y incremento en el precio al gas. Ahora por esta interrupción parcial del suministros por otras causas, creo que los brasileños tiene sobradas razones para estar molestos, no por la disminución en los envíos de gas, más bien por todos los hechos sucedidos con anterioridad.

¿Quiénes pierden con estas acciones?

Pierde el Brasil porque debe buscar otras opciones que son más caras y que no fomentan la integración comercial; pierde el país por el dinero que no recibirá; pero por sobre todo pierde el ciudadano boliviano que no tendrá esperanza de mejores días, desde mucho tiempo atrás se vive del comercio, con los gasoductos y los países vecinos pudimos haber hecho algo mejor, los bolivianos nos mareamos con el gas.

¿Lo sucedido puede derivar en una revisión de los contratos con nuestros actuales compradores?

Los contratos, convenios y palabras de personas se deben cumplir. Brasil ha sido bastante tolerante con Bolivia por la toma del campo San Alberto y las refinerías, vamos a ver cómo reacciona con esta situación. Brasil es una potencia económica de la región, con ellos debemos tener relaciones muy fuertes, respetarlo y tener un gran trueque comercial y energético.

Brasil necesita nuestro gas, pero la seguridad del abastecimiento es más importante, y puede llegar un momento en que ese país se canse de Bolivia y dejará de usar el gas boliviano y esto no le afectará significativamente a su economía y a su desarrollo, pero sí nos afectará a nosotros, si nos quedamos sin los ingresos que genera el gas que vendemos al Brasil. Tenemos que ponernos a pensar qué pasará si esto sucede.