Logró acuerdos con bloques disidentes y la presión social está coordinada. La oposición pide garantías y la Policía responde que ese es un asunto del Presidente. Los opositores están en emergencia.
Senadores y diputados de Podemos se atrincheraron anoche en el Parlamento con bolsas para dormir, mantas y raciones de comida
La Razón
El Movimiento al Socialismo (MAS) tiene todo preparado para aprobar en el Congreso la ley de convocatoria al referéndum constitucional hasta antes del lunes, según revelaron a La Razón fuentes del Ejecutivo y Legislativo.
Ante este panorama, un grupo de parlamentarios de la oposición decidió anoche trasladarse al Palacio Legislativo con algunas de sus pertenencias, con el objetivo de garantizar sus votos en contra del proyecto de ley de convocatoria y evitar que hoy el cerco social les impida el ingreso, como ocurrió el 28 de febrero.
“Estamos aquí para defender la democracia, la legalidad y el estado de derecho, con una firme convicción de que el MAS no consolide un golpe a la democracia”, señaló la diputada Lourdes Millares (Podemos), mientras se instalaba en la Cámara de Diputados conjuntamente una veintena de sus colegas opositores.
Un grupo de 11 se instaló en la brigada de Santa Cruz, cinco en la bancada de Podemos y otros cinco buscaban un ambiente en la Presidencia. Los parlamentarios anticiparon que se quedarán en el lugar hasta que concluya la sesión convocada para aprobar la ley de convocatoria, que será reinstalada a las 10.00, después de un cuarto intermedio declarado el jueves.
De acuerdo a las fuentes oficialistas, los últimos dos días fueron de intensa negociación con bloques de la oposición, trabajo que concluyó anoche con el compromiso de al menos 30 legisladores que votarán a favor de la norma. El MAS necesita 25 votos para lograr los dos tercios necesarios para la aprobación de la ley, tomando en cuenta a los cuatro disidentes que anticiparon que no actuarán en la linea partidaria. Estos votos —según las fuentes— provienen de las bancadas de Podemos, UN y el MNR.
La estrategia, según conoció este medio, incluye el apoyo de parlamentarios suplentes, quienes asumirán la responsabilidad en ausencia de los titulares que en las últimas horas pidieron licencias a sus bancadas.
Ello no hará falta en casos como el de los cinco legisladores del Plan Progreso, que el jueves anunciaron su ruptura con la línea de Podemos y anticiparon su voto a favor de la convocatoria.
Ante este panorama, el jefe de Podemos, Jorge Quiroga, anticipó que controlarán de cerca la actuación de su bancada.
Paralelamente a los acuerdos para la votación, que las fuentes oficialistas admitieron que podrían fallar a último momento, está la movilización social que el lunes ingresará a La Paz desde cinco frentes, con la principal columna de marchistas provenientes de Caracollo. Los grupos llegan con la intención de cercar el Congreso hasta que apruebe la ley.
El oficialismo asegura que tiene los votos necesarios
Denuncia • Podemos señala que el MAS promueve la división con ofertas irregulares a los legisladores. La oposición está fracturada.
El MAS habría conseguido los votos necesarios para aprobar la ley de convocatoria al referéndum constitucional este fin de semana, según señalaron fuentes de este partido en el Congreso.
El subjefe de la bancada del MAS en la Cámara de Diputados, Jorge Silva, dijo que parlamentarios de la oposición le anticiparon que este sábado se viabilizará la aprobación de la ley, aunque no reveló mayores detalles.
Otras fuentes señalaron que, en negociaciones por separado, el MAS consiguió el apoyo de una treintena de parlamentarios de la oposición, de Podemos, UN y el MNR. En este grupo se encontrarían los diputados titulares José Oña, Jorge Solari y Claudia Paredes y los suplentes Franklin Lavayén y Silvia Pérez, todos del bloque del Plan Progreso, que el jueves anticiparon que votarán por la aprobación de la ley.
El ministro de Desarrollo Rural, Carlos Romero, señaló que “estamos trabajando en función de los acuerdos (del diálogo) con todo el bloque de oposición”, mientras los diputados podemistas Sandro Aguilar, Hernán Mariscal y Óscar Urenda denunciaron que los legisladores del PP asumieron una actitud oportunista, con el objetivo de salvar a su jefe, José Luis Paredes, procesado por un caso de corrupción.
Además de los disidentes de Podemos, según fuentes del MAS, apoyan la aprobación de la mayoría de los nueve parlamentarios de UN y algunos del MNR.
El jefe de UN, Samuel Doria Medina, anticipó que los radicales quedarán marginados por los acuerdos del diálogo político, que hasta ayer avanzaron en más del 50%, según informó Romero.