Medida de excepción reveló ostensible debilidad del Estado

“Estado de Sitio sirvió (al Gobierno) para imponerse de manera autoritaria”, explica Jorge Lazarte.

El Diario

“El Estado de Sitio reveló la ostensible debilidad del Estado como autoridad jurisdiccional del país”, es la conclusión a la que arriba el analista político, Jorge Lazarte, quien atribuye el uso de ese mecanismo que la Constitución faculta al Poder Ejecutivo para la conservación del orden público, a la crisis política entre el Gobierno y las regiones, y la pérdida de autoridad estatal.



De acuerdo con el especialista, el Estado de Sitio, dispuesto por el Ejecutivo en el departamento de Pando el 15 de septiembre pasado, sólo sirvió para que el actual gobierno del presidente Evo Morales Aima, se imponga de manera autoritaria en esa región oriental.

Tras el Estado de Sitio en Pando, el Gobierno tomó el control de Pando que implicó la destitución y detención en la cárcel de La Paz del prefecto pandino, Leopoldo Fernández, a quien el Ejecutivo responsabilizó de la matanza de al menos 15 campesinos en enfrentamientos con grupos opositores a Morales, en la localidad de El Porvenir.

Al respecto Lazarte sostuvo que el Estado de Sitio, y por consiguiente, la utilización de la fuerza no es el mecanismo para solucionar ese tipo de hechos, sino que deben verse otros dispositivos.

DEBILIDAD Y CONTRARIEDAD

Para el analista político está claro que la imposición del Estado de Sitio muestra claramente el debilitamiento del Estado frente a los problemas sociales y políticos del país y que aún siguen vigentes.

“El Estado de Sitio es la declaratoria de la propia debilidad del Estado”, argumentó Lazarte. Asimismo, puntualiza que recurrir a este mecanismo constitucional también representó una contrariedad con el discurso político del Movimiento Al Socialismo (MAS), que en su época de oposición política condenó, no sólo en una sino en varias ocasiones el uso del Estado de Sitio por los Gobiernos de derecha.

En este contexto, Lazarte observó que el Gobierno podrá recurrir al Estado de Sitio en el momento que así lo requiera, porque se dio cuenta de la importancia de apoyarse en el uso de la fuerza para mantener el orden en el país, un orden que se le escapaba de las manos.

Sin embargo, el uso constante de la fuerza significa un grave peligro, advirtió el analista político, quien reiteró que la crisis política instalada en el país no se resuelve por medios como el Estado de Sitio.

ABUSO Y AMEDRENTAMIENTO

Por su lado, Roger Pinto, senador del opositor Poder Democrático Social (Podemos) por el departamento de Pando, advirtió que, pese al levantamiento del Estado de Sitio, preocupa el nivel de abuso, amedrentamiento y persecución que aún el Gobierno ejerce sobre ciudadanos pandinos.