Brasil • Un diario informó que el objetivo era asegurar el flujo de cocaína para Sao Paulo.
La UE analiza dar ayuda para resguardar fronteras. Al año capacitarán a policías bolivianos.
La Razón
El Primer Comando de la Capital (PCC) en Brasil, una de las organizaciones criminales más grandes de ese país, loteaba la frontera de Mato Grosso con Bolivia para asegurar el flujo continuo de cocaína hacia Sao Paulo, informó el diario O Estado de Sao Paulo.
La nota señala que la Policía Federal hizo el descubrimiento durante la operación Aracne, que inició el 2007 y que la anterior semana llevó a la cárcel a 41 personas, acusadas de tráfico internacional de drogas. Según la Policía Federal, la estrategia del PCC era establecer un contacto directo con los cárteles bolivianos para eliminar intermediarios y multiplicar sus ganancias.
Los integrantes del PCC tenían propiedades en 10 ciudades del área rural, cinco estaban próximas a la frontera con Bolivia.
Las haciendas tenían pistas clandestinas para recibir aviones desde Bolivia, otras servían como almacenes o se usaron para el lavado de dinero.
El delegado, Eder Rosa de Magalhães, mentor del operativo Aracne, indicó al diario brasileño que “la Policía boliviana nos ayudó con algunas informaciones; mas se nota que su estructura de represión es limitada”.
La UE analiza dar ayuda para resguardar fronteras
COLABORACIÓN • Su representante indicó que al año capacitarán a policías bolivianos.
El embajador de Francia en Bolivia y representante de la Unión Europea (UE), Antoine Grassin, afirmó que esa instancia internacional analiza una cooperación para controlar las fronteras, en la lucha contra el narcotráfico.
“Hay fronteras enormes (…) por las cuales pasan los traficantes (de droga). Estamos al tanto de eso y vamos a ver si damos una cooperación en eso”, afirmó Grassin a tiempo de clausurar la Presidencia francesa del Consejo de la Unión Europea en Bolivia.
Explicó que la droga que se produce en países como Bolivia y Perú va directamente al mercado europeo. “En países como Inglaterra el consumo de cocaína está aumentando fuertemente, así que estamos preocupados”. Manifestó que la Unión Europea expresó su preocupación al Gobierno boliviano al respecto.
Comentó que mantienen una ayuda en la lucha antidroga y que hasta el momento está orientada al control de la producción de la hoja de coca, apoyando la política del Ejecutivo que se basó en un control a partir de una organización colectiva de las federaciones de cocaleros.
Anunció que para el 2009, se prevé brindar un curso de capacitación a los efectivos, pues Francia es uno de los países que coopera a Bolivia con capacitaciones de las fuerzas policiales. Esta gestión se dieron dos seminarios con expertos franceses.