A la enmienda la derrotan los electores no alineados

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De acuerdo con el estudio de Lacso, 48% la rechaza y la mayoría no se identifica con el chavismo o con líderes de la oposición.



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El Nacional

Liza López V.

El destino de la enmienda pareciera estar en manos de las personas "huérfanas" de liderazgo. En aquellos que en un momento bautizaron "ni-ni" y ahora llaman "no alineados". En las últimas consultas electorales, este grupo siempre ha tenido peso decisivo. Pero en este momento es más numeroso, pues se le suman los disidentes del chavismo (sobre todo los del último año y medio) y los decepcionados de la oposición. Resulta complicado cuantificar a este sector; sin embargo, en los estudios de clima político tiene bastante protagonismo.

En una investigación efectuada por el Laboratorio de Ciencias Sociales (Lacso) para medir el tema de la enmienda, 48% de los encuestados dice que votará en contra, 38% se muestra a favor y 14% está indeciso.

De los que rechazan la propuesta, la mitad se compone precisamente de "no alineados". El resto es opositor (47%) y chavista (4%).

La gran mayoría de los que no se identifican con el chavismo o con los líderes de la oposición, asegura que votará en contra, mientras que 10% aprobaría la enmienda.

"A la enmienda la derrotan los no alineados", concluye el director de Lacso, Roberto Briceño. Y destaca otro dato: 28% de los "no alineados" se mantiene indeciso. Por eso los encuestadores recomiendan permanecer alerta ante ese porcentaje de venezolanos que todavía no sabe cómo votará el 15 de febrero.

Sin alteraciones. La encuesta se efectuó entre el 10 y el 20 de diciembre, semanas antes de que el presidente Hugo Chávez decidiera ampliar la propuesta para la reelección de gobernantes, alcaldes, diputados y consejos municipales. No obstante, Briceño afirma que los resultados no se alteran con este nuevo escenario. "No hay cambios en cuanto a la intención de voto. Lo que puede alterarse es el nivel de participación de la gente a votar".

El sociólogo y docente de la Universidad Central de Venezuela indica que la ampliación puede revertirse contra los objetivos de Chávez: el entorno presidencial y la gestión de algunos gobiernos regionales y locales no generan simpatía en la población, por lo que quizás no haya una solidaridad automática para aprobar la enmienda para tantas reelecciones.

Además, piensa que la nueva propuesta no favorece la aspiración de poder de algunos gobernantes. "Hay gobernadores que quieren ser presidente y dirigentes políticos que aspiran a ser alcaldes o gobernadores. La enmienda puede cerrarles el camino".

El director de Datanálisis, Luis Vicente León, ha dicho que en las encuestas anteriores al anuncio también exploraron el tema de la reelección, con gobernadores y alcaldes incluidos. En los resultados, declaró, no había cambios significativos en relación con la intención de votar a favor o en contra.

El estudio de Datanálisis les demostró que 30%, cifra similar a la de Lacso, aprueba la enmienda. Estos resultados contrastan con 51% a favor de la reelección del sondeo del Grupo de Investigación Social 21 (cuyo directivo es Nelson Merentes).

Mujeres y jóvenes. La encuesta de Lacso revela que las mujeres y los jóvenes son, como los "no alineados", determinantes en el destino del próximo referéndum consultivo.

De los que se declararon en contra de la enmienda, la mayoría está constituida por mujeres (52%) y jóvenes de entre 18 y 24 años de edad (49%) y de estratos A, B, C y D.

Las mujeres, explica Briceño, son más propensas a buscar cambios, mientras que los hombres tienden a ser más conformistas. De hecho, el estudio indica que entre quienes apoyan la enmienda, la mayoría la forman hombres (41%) y personas mayores de 50 años (45%) y de estratos C, D y E.

El sociólogo amplía entonces la afirmación que hizo anteriormente: "El destino de la enmienda lo decidirán los no alineados y los jóvenes".

El equipo que dirigió la encuesta nacional a 1.000 personas, con margen de error de 2,5%, está integrado por Roberto Briceño, el politólogo de la Universidad Simón Bolívar John Magdaleno, la profesora de ciencias políticas de la UCV Olga Ávila y el estadístico Alberto Camardiel.