La Iglesia observa el proyecto de CPE

Referéndum. La Conferencia Episcopal asegura que el proyecto de Constitución ‘tiene contradicciones’ y festeja la inclusión de la nación y nacionalidad boliviana, y de las autonomías.

image

Posición. La cúpula católica de Bolivia trabajó un documento basado en observaciones hechas en marzo de 2008. Registraron los avances y retrocesos del proceso



El Deber

Pablo Ortiz

La Iglesia católica rompió el silencio sobre el proyecto de Constitución Política del Estado y salió a cuestionar 10 puntos que, en su criterio pueden poner en peligro la convivencia política y social del país. La Conferencia Episcopal Boliviana, reunida en Cochabamba, hizo conocer el documento, titulado Llamados a ejercer un voto consciente, libre y responsable, y causó la reacción del oficialismo que, a través del diputado Gustavo Torrico, acusó a la Iglesia de estar emitiendo un mensaje político y ‘tremendamente sesgado’. Pero también cosechó elogios de grupos de oposición, que lo calificaron como ‘meditado y valioso’.

En la conferencia de prensa, ofrecida por el monseñor Edmundo Abastoflor, arzobispo de La Paz y vicepresidente de la CEB; monseñor Jesús Juárez, obispo de la diócesis de El Alto y secretario general de la CEB; monseñor Tito Solari, arzobispo de Cochabamba; monseñor Óscar Aparicio, obispo auxiliar de La Paz, y monseñor Toribio Ticona, obispo de la prelatura de Corocoro, los prelados exhortaron a la población a asumir este acto electoral como una actitud festiva, democrática y como uno de los más importantes y trascendentales de la historia boliviana. Solicitaron acudir a las urnas con el debido conocimiento y discernimiento del proyecto de nueva Constitución, ‘para que su voto sea libre y consciente, evitando ser manipulados por la propaganda y discursos políticos’. 

También cuestionaron la utilización de la imagen de Jesucristo en la campaña, ‘venga de donde venga’.

Ya en sus observaciones, aclararon que como pastores tienen la responsabilidad de ‘orientar al pueblo de Dios’ desde una escucha a sus inquietudes y necesidades para ‘contribuir a una decisión libre, consciente y personal’ sobre el referéndum del 25 de enero.

“Nuestra intención, a partir de una visión ética , moral y de  principios, es resaltar los aspectos positivos y alertar sobre las contradicciones y peligros que pueda entrañar su contenido”, dice el documento.

La Iglesia valora los avances logrados en la reforma que hizo el Congreso al texto aprobado en Oruro; sin embargo, considera que la propuesta de CPE ‘carece de la necesaria coherencia global y subsisten en él temas no discutidos’.

“El proyecto ha sido un resultado más de la correlación de fuerzas políticas y sociales, que de la expresión total de las propuestas y anhelos del pueblo boliviano”, añade.

Entre los principales aspectos que resalta de los cambios realizados por la ‘mesa clandestina’ y aprobados por el Congreso en octubre del año pasado, resaltan la inclusión y reconocimiento de derechos individuales y colectivos, la incorporación del concepto de nación y nacionalidad boliviana, el reconocimiento al derecho a la libertad religiosa y al derecho de los padres a elegir el tipo de educación que brindarán a sus hijos y el mejoramiento del capítulo sobre autonomías, que aún consideran perfectible.

Entre las observaciones que señalan, destacan los temas propios de la Iglesia, como el hecho que no haya un reconocimiento espreso hacia la fe cristiana en el texto y sí a la espiritualidad indígena, el respeto al derecho a la vida, pero no especificando que debe ser desde la concepción y, lo que consideran una ambigüedad, sobre el matrimonio y la formación de ‘familias’. Para la curia, esto puede provocar la despenalización del aborto y el reconocimiento de matrimonios y familias del mismo sexo.

Para Torrico, se trata de un documento claramente orientado a pedir el voto por el No en el referéndum del próximo domingo. Considera que la Iglesia debería dedicarse a temas ‘concienciales’ y espirituales de sus fieles, llamar a asistir a las urnas, pero no ponerse a discernir qué está bien y qué está mal. Además, considera que abusa de su condición institucional para emitir posiciones y la llama a asumir posturas más neutras.

Para el presidente del Senado, Óscar Ortiz, la Iglesia ha mostrado su desaprobación al proyecto constitucional y, como laico católico, comparte las observaciones de la curia. “Obviamente este proyecto es incompatible con la doctrina moral católica”, dijo.

El jefe de Unidad Nacional, Samuel Doria Medina, consideró el documento como ‘acertado y meditado’. Señala que los religiosos se han involucrado en un tema meramente político por la importancia de este evento democrático, que definirá la forma de vida de los bolivianos por los próximos 50 años.

Por ello, opina que el MAS está muy nervioso, porque ‘está viendo que no podrá aprobar su CPE como quería, ya que es tramposa y tiende a concentrar el poder, concentrar la economía en el Estado y centralizar más el Gobierno’.

No coincide con Doria Medina el viceministro de Descentralización, Fabián Yaksic, que opina que el documento de la Iglesia demuestra que está ‘mal asesorada’ y ‘mal acompañada’.

Defendieron al cardenal

“Las exhortaciones del cardenal Julio Terrazas son meditadas y reflexionadas, por lo tanto, son orientaciones que deben ser comprendidas en su real y total dimensión, sin darle ‘una interpretación sesgada’, señaló el vicepresidente de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), monseñor Edmundo Abastoflor. En tanto que el secretario general de la CEB, monseñor Jesús Juárez, pidió a las autoridades (Evo Morales) que ‘antes de hacer ciertas acusaciones deben tener la valentía de informarse apropiadamente y aducir las pruebas de la acusación que hace’.

Las declaraciones de los dos obispos fueron en respuesta a los reclamos que realizó el presidente de la República, Evo Morales al nuncio apostólico, monseñor Giambattista Diquattro, en las cuales acusó al cardenal de estar contra su Gobierno y el pueblo boliviano, y pidió desagravios. El miércoles en, Palacio Quemado, el jefe de Estado señaló: “decir que Bolivia está gobernado por el narcotráfico me duele mucho nuncio apostólico, eso recibí en los anteriores años del Departamento de Estado de los Estados Unidos, que soy narcotraficante. Ahora, que me diga el cardenal que Bolivia está gobernada por narcotraficantes es muy grave. No quiero pensar que el cardenal pueda sustituir al Departamento de Estado de Estados Unidos. Quiero pedi,r con mucho respeto, reparar esos daños que hace una persona a un pueblo y a un gobierno».

«La postura del señor cardenal es una postura seria, es una postura profunda, meditada y que ayuda a caminar y ver posibles errores que puedan ocurrir en la realidad», remarcó monseñor Abastoflor, al puntualizar que se debe tener cuidado en no darle una interpretación sesgada.

  Elogios 

1.Reafirmamos los elementos positivos como el reconocimiento de los pueblos indígenas y los sectores históricamente marginados, la participación de los grupos sociales en la vida del país, el enriquecimiento del sistema de derechos, la protección de la familia y el derecho a la salud.

2. Los   derechos   individuales   y   colectivos incorporados en el proyecto de nueva Constitución, así como las garantías representan un avance significativo en la ampliación y profundización del Estado Social de Derecho con más justicia social. (Art. 13 al 90 y 109 al 136).

3. En la configuración del nuevo Estado se han reconocido e incorporado los conceptos de nación boliviana (Art. 3) como vínculo común y de la nacionalidad boliviana (Art. 141) como expresión de identidad y pertenencia nacional, lo que no niega la existencia de la pluralidad de naciones. Al respecto habíamos señalado: «Se trata entonces de hacer de Bolivia una Nación de pueblos originarios y de ciudadanos de distintos orígenes, muchos de ellos mestizos» (Mensaje CEB marzo 2008, N°43).

4. Se ha restaurado el principio democrático de la representación política de mayorías y minorías en la Asamblea Legislativa Plurinacional (Art. 146 y 148). La representación proporcional es la garantía de que las minorías tengan el derecho de hacerse escuchar en sus propuestas y en sus observaciones y de convertirse en una opción mayoritaria.

5. La recuperación del criterio de los dos tercios de votos de la Asamblea Plurinacional (Art. 411) para elegir a importantes autoridades y aprobar leyes relevantes, como la reforma constitucional, aleja la tentación de la imposición de una sola corriente en asuntos que comprometan gravemente el destino de todos. (Art. 158, inc. 4; Art. 214, 220, 227).

6. Algunas excesivas atribuciones del control social (Art. 241 y 242) han sido redimensionadas, alejando el riesgo de un uso interesado y corporativo que podría haberlo desvirtuado.

7. La Jurisdicción Indígena (Art. 190 al 192) ha sido definida en sus ámbitos personal, material y territorial. Representa un reconocimiento cultural y su aplicación debe estar sujeta al control estatal, como el del Tribunal Constitucional Plurinacional.

8. Se han dado pasos para clarificar las reglas respecto a las autonomías que reducen el riesgo observado de sobreposición y anulación recíproca (Art. 277 al 305); sin embargo, el nivel actual de reconocimiento no agota ni debe cerrar las posibilidades de reforma que las puedan mejorar y profundizar.

9. Nos parece razonable la décima disposición transitoria que establece que el requisito de hablar al menos dos idiomas oficiales para el desempeño de funciones públicas será de aplicación progresiva.

10. Valoramos el reconocimiento del derecho a la libertad religiosa (Art. 4 y 86), el respeto del derecho de padres y madres de elegir la educación que convenga a sus hijos (Art. 88), de la enseñanza de la religión en las unidades educativas; de las unidades educativas de convenio con derecho propio de administración, de las escuelas superiores de formación docente fiscales y privadas (Art. 87), entre otros derechos incorporados en el proyecto de nueva Constitución.

  Críticas  

1. Permanece nuestra observación sobre el riesgo que implicaría el carácter progresivo de los derechos esenciales a la dignidad del ser humano (Art. 13,III). En los casos en que se presenta una contradicción entre los derechos colectivos e individuales, el proyecto no establece una regla explícita que dé preeminencia a los derechos esenciales. 

2. La vigencia de los derechos civiles y políticos puede encontrarse gravemente comprometida por el amplio margen de discrecionalidad del Estado; por ejemplo, en la aplicación retroactiva de sanciones penales para algunos delitos (Art. 123), en la configuración del delito de traición a la patria (Art. 124). Por su carácter amplio y ambiguo podría dar lugar a procesos penales por hechos que no revestirían tal gravedad.

3.Los derechos preferentes para determinados grupos deben tener carácter provisorio y no definitivo, con la finalidad de reinstaurar la igualdad de oportunidades, pero no a costa de la exclusión y discriminación de los derechos de otras personas y grupos.

4. El proyecto no reconoce el derecho a la vida ‘desde la concepción’ (Art. 15, I.). Para la fe cristiana este principio es irrenunciable. Este derecho podría abrir el camino a la legalización del aborto.

5. La ambigüedad de los derechos llamados sexuales y reproductivos (Art. 66) pone en peligro la integridad de la familia en su función procreativa y debilita el derecho a la misión educativa de los padres para con sus hijos. La formulación constitucional del matrimonio entre una mujer y un hombre (Art. 63) y del reconocimiento estatal de ‘las familias’ (Art.62) abre la posibilidad de que se consideren como matrimonio y familia a aquellas relaciones de pareja entre personas del mismo sexo.

6. La libertad de prensa y de información está todavía sujeta al cumplimiento de requisitos de veracidad y responsabilidad (Art. 107). Estas condicionantes podrían ser invocadas para implantar leyes restrictivas del derecho a la información y de prensa u otras medidas de censura previa.

7.La elección por sufragio de las principales autoridades judiciales (Art. 182, 188, 194, 198) puede afectar a la independencia judicial.

8.De la misma manera que en el pasado criticamos con claridad un modelo económico neoliberal radical, alertamos ahora ante la tendencia marcada de una economía estatista y centralizada (Art. 309).

9. Resultan contradictorios la tensión que podría generarse en la participación de los padres y madres de familia en la gestión educativa, paralelamente con la participación social y comunitaria (Art. 83); el reconocimiento del derecho de administración de la entidades religiosas en las unidades educativas de convenio, la formación docente con el planteamiento de la formación docente en un sistema ‘único y fiscal’ (Art. 96,I).

10. El proyecto no reconoce la profunda realidad religiosa del pueblo boliviano que mayoritariamente profesa la fe cristiana. Aparece como contradictorio el postulado: «El Estado es independiente de la religión» (Art. 4), con lo establecido en el Art. 98, Inc. II: «El Estado asumirá como fortaleza la existencia de culturas indígena originario campesinas, depositarias de espiritualidades y cosmovisiones», que puede interpretarse como que el Estado asume sólo las espiritualidades indígenas.

  Críticas Sacras  

Marzo de 2006. La Iglesia lanzó el documento ‘Construyamos una Bolivia para todos – Hacia la Asamblea Constituyente’, en el que pide garantizar y reafirmar la unidad del país, respetando las autonomías y los valores de solidaridad, la verdad, libertad, justicia, transparencia, diálogo y respeto a la vida humana. Hicieron notar que las mayorías han creado un nuevo escenario político y han despertado grandes esperanzas para mejorar la administración del Estado, mediante la Asamblea Constituyente.

Marzo de 2008. La Iglesia hizo público el documento ‘Orientaciones pastorales sobre el proyecto de CPE’, en el que cuestionaba tanto el texto constitucional aprobado en Oruro, como los estatutos autonómicos de Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija. Llamaba a las partes a dialogar y hacía énfasis en 69 puntos que consideraba que podían afectar a la paz social en el país. Diez de ellos no fueron recogidos y originaron el pronunciamiento realizado ayer en Cochabamba.

   Opinión  

Esto afectará al Gobierno

Jorge Kafka / Politólogo

El de la Iglesia es un pronunciamiento que está pidiendo a la población que se informe antes de tomar una decisión importante como la aceptación o rechazo de una Constitución. En este momento del proceso, afectará al Gobierno y a la Iglesia, que creo que ha tomado en cuenta el riesgo al que se ha expuesto al entrar en un campo de observaciones políticas.

Se trata de un momento bastante crítico, en el que el debate político se ha polarizado entre el Gobierno y la Iglesia, tanto la católica como las protestantes. Ambos tratan de incidir en la opinión de los votantes a pocos días de la votación. Esto ha definido una campaña bastante peculiar, en la que se ha hecho énfasis en temas como la legalización del aborto, la fe y el matrimonio. También ha pesado en la decisión de la Iglesia el cambio de su relacionamiento con el Estado, que se daría si se aprueba la CPE, ya que deja de ser la religión oficial.

A Evo le conviene callar

Jorge Lazarte / Politólogo

Me parece que se trata de un pronunciamiento muy cuidadoso, pero suficientemente claro como para que se entienda lo que la Iglesia quiere. Las observaciones al texto constitucional y la apelación de que el voto sea a través de valores, puede entenderse como que la Iglesia católica no favorece al proyecto de Constitución.

En realidad, ya lo había dicho hace varios meses, cuando elaboró observaciones al proyecto de Carta Magna aprobado en Oruro. Creo que con esta declaración ha retomado el espíritu de ese documento y está defendiendo su lugar en la organización del país y su relación con el Estado. Pese a que el documento no es favorable para el Gobierno, no creo que se produzcan represalias hasta después del 25 de enero. Al Gobierno no le conviene distanciarse mucho más y públicamente de la Iglesia, eso electoralmente no es rentable. Lo más sensato que puede hacer es no decir nada.