Brad Pitt y Obama, ¿Quién es mejor padre?

Son dos de los hombres más influyentes del mundo y por sus venas corre la misma sangre, pero hay algo que les diferencia ¿Quién ejerce mejor la paternidad?

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Fue hace meses cuando los medios de comunicación de Estados Unidos comenzaron a especular sobre una posible relación familiar entre Brad Pitt y Obama. Al parecer, ambos son descendientes directos de un oficial de la policía que falleció en el año 1769 en Virginia, llamado Edwin Hickman. Es decir, que actor y presidente son parientes de novena generación.



Por sus venas corre la misma sangre, pero hay algo que les diferencia. Mientras que Brad Pitt se está convirtiendo en el padre perfecto, Obama admite sus errores en la materia.

Brad Pitt es padre de seis hijos y ninguno de ellos supera los 7 años. Con tanta criatura revoloteando por su alrededor, se ha convertido en un verdadero experto. Lo cierto es que, al principio, tuvo algún que otro problema. Su hija Shiloh, de 3 años, sufrió una terrible epidermis por los pañales. Se lo confesó a todo el mundo, pues estaba desesperado, y sus fans no tardaron en recomendarle un producto maravilloso.

Pitt es un tipo muy apañado, y cuando tiene un problema, sabe solucionarlo con rapidez. ¿Qué no puede bañar a sus hijos? Pues toallitas húmedas para salir del paso. Así se lo confesó el actor a su compañero de reparto en «Inglorious Basterds».

El pelo rizado de su hija Zahara ha sido motivo de preocupación. Para él era un infierno desenredarlo, hasta que encontró un maravilloso champú que, además, se lo dejaba con mucho brillo. En cuanto a sus pequeños Maddox y Pax ha decido dejarles escoger sus peinados, con crestas y todo tipo de colores.

La educación de su prole es fundamental para él. Siempre que puede les lleva y les recoge, y también ha buscado hueco para quedarse en clase de la pequeña Shiloh y leerle algún cuento a sus compañeros. Sin embargo, las madres estaban tan revolucionadas que finalmente tuvo que optar por sentarse al final de la clase y pasar todo lo desapercibido que pudiese.

La alimentación es otro aspecto que no descuida. Cuando su familia se mudó a Long Island, en Nueva York, sus vecinos les recibieron con un montón de dulces para los pequeños. Sin embargo, Brad Pitt agradeció el detalle, pero no les dejó comerse ni una sola galleta. Los dulces refinados están totalmente prohibidos.

Barack Obama acaba de superar a Brad Pitt como el hombre más elegante del mundo, pero en cuestiones de paternidad, tiene algo que aprender.

Humildemente, el presidente de los Estados Unidos ha reconocido que no es un buen padre. «Sé que no he sido un padre perfecto. Sé que he cometido errores y he perdido la cuenta de todas las veces que una demanda de trabajo me ha obligado a abandonar mis deberes como padre. Hubo varios días durante la campaña electoral que sentí que mi familia estaba a miles de kilómetros de mí y sabía que me estaba perdiendo momentos de la vida de mis hijas que jamás recuperaré. Es una pérdida que jamás llegaré a aceptar del todo», dijo. El padre del mandatario murió cuando él era joven, y sabe lo duro que es crecer sin la presencia de la figura paterna.

A pesar de estas declaraciones, poco hay que reprocharle en estos momentos. Miles de americanos han puesto todas sus esperanzas en él, y por eso a veces se ha sentido en la obligación de trabajar en vez de estar con sus hijas. Él está muy dolido, pero seguro que sus hijas sabrán perdonarle. (yahoo.es)