Evo se rehúsa a pedir disculpas y acusa a Perú de 5 agresiones

Legislador peruano dice que Evo padece de psicopatía política. Políticos y ex cancilleres critican la pugna entre los presidentes Morales y García.

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Afirmación: el presidente Evo Morales (izq.), ayer durante su discurso pronunciado en Apolo, norte de La Paz



La Prensa

El Gobierno exige que Alan García devuelva a tres ex ministros que fueron refugiados y asilados. La ONU indicó de que “no existen elementos” para afirmar de que hubo genocidio de indígenas en Perú.

El Gobierno boliviano responsabilizó ayer a Perú del deterioro de las relaciones bilaterales porque ha “agredido” al país en al menos cinco ocasiones, mientras que el presidente Evo Morales se rehusó a disculparse por haber calificado de “genocidio” los enfrentamientos ocurridos en Bagua.

Al día siguiente de que el canciller de Perú, José Antonio García Belaúnde, manifestara que una disculpa del Mandatario boliviano puede contribuir al reencauzamiento de los nexos entre ambas naciones, el Poder Ejecutivo boliviano cerró las puertas a cualquier excusa formal.

El peruano solicitó ello después de que la Organización de Naciones Unidas expresara que “no existen elementos” que demuestren un intento de genocidio indígena en el conflicto peruano de inicios de mes tal como afirmó el mandatario Morales.

Éste, en un acto de entrega de obras en Apolo, en el norte de La Paz, sostuvo: “He estado escuchando a algún ministro de la hermana República del Perú que me dice que pida perdón. Cuando se trata de defender la vida, no hay nada por qué pedir perdón”.

A la par, el viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, Sacha Llorenti, consideró que el pedido de García Belaúnde es “inadmisible”. “Nosotros tenemos una retahíla de agresiones sufridas por el pueblo boliviano, por el Gobierno boliviano, por Bolivia, de parte del Gobierno de Alan García”.

Y enumeró cinco “agresiones” en una charla con el programa El pueblo es noticia, que se difunde por Canal 7 y Radio Patria Nueva. Primero, las negociaciones del Tratado de Libre Comercio que efectuó el Ejecutivo peruano con Estados Unidos y la Unión Europea, al margen de la Comunidad Andina de Naciones, de la que Bolivia forma parte.

La autoridad citó también la demanda presentada por Perú contra Chile ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya por los límites marítimos entre ambos países. Según Llorenti, el presidente García inició ese proceso para “entorpecer las negociaciones para que Bolivia pueda alcanzar una salida al mar”.

Una tercera “agresión” del vecino país sería el asilo y los refugios concedidos a Jorge Torres Obleas, Javier Torres Goitia y Mirtha Quevedo Alcalinovic, ex ministros de Gonzalo Sánchez de Lozada, quienes están procesados por la masacre de “octubre negro” que dejó el saldo de al menos 67 muertos civiles en El Alto.

Una cuarta “agresión”, para el viceministro Llorenti, fue la anterior llegada al país de una comisión parlamentaria peruana que investigaba las Casas del Alba, que según la versión de esos legisladores funcionaban como oficinas políticas de Venezuela y adonde presuntamente acudían ciudadanos peruanos, entre ellos posibles terroristas.

En su visita, el grupo parlamentario descubrió que en el Hospital de Copacabana, en La Paz, con ayuda de médicos cubanos se realizaron curaciones gratuitas de la vista a más de 14.000 peruanos que pasaron la frontera.

El presidente Morales rechazó la indagación de estos congresistas, empero, el presidente de esa comisión, el diputado oficialista Wálter Menchola, aclaró que su nación tramitó el ingreso ante la Cancillería boliviana.

Para Sacha Llorenti, con esa acción se intentó “cuestionar el aparato de solidaridad que beneficia (…) no sólo a bolivianos, sino a peruanos, argentinos, paraguayos, chilenos y brasileños”.

Por último, reclamó por la “provocación” del vicepresidente del Congreso peruano, Álvaro Gutiérrez, quien llegó la semana pasada a un encuentro de presidentes de Senado de América Latina en Santa Cruz.

La autoridad peruana anunció que planteará el veto al ingreso en territorio peruano de los dirigentes campesinos y legisladores masistas de Bolivia Isaac Ávalos y Leonilda Zurita, porque supuestamente ambos influyeron en las movilizaciones de los indígenas de la amazonia que derivaron en la muerte de al menos 34 personas, y dijo que se analizará la posibilidad de procesarlos mediante la justicia internacional.

Ávalos y Zurita participaron en el IV Congreso Continental de Indígenas del Abya Yala (América Latina), celebrado en Puno, Perú, cinco días antes de los enfrentamientos en la región amazónica de Bagua.

La dirigente campesina fue la emisaria de una carta del presidente Morales a los indígenas reunidos en ese encuentro continental, en el que les llamó a la “rebelión” para que logren una “segunda y definitiva” independencia.

Llorenti sostuvo ayer que la amenaza del congresista peruano “muestra la doble moral del Gobierno peruano porque (por una parte) quieren procesar a personas que defienden la vida y encubren a los ex ministros (de Gonzalo Sánchez de Lozada)”.

Las relaciones diplomáticas entre Perú y Bolivia atraviesan su momento más crítico tras una serie de roces verbales entre mandatarios, acusaciones mutuas de injerencia y la salida del embajador peruano en La Paz, Fernando Rojas, en protesta por las declaraciones del presidente Morales, quien el sábado 13 de junio calificó los enfrentamientos en Perú como un “genocidio del TLC”.

Naciones Unidas desechó ello. Pero ayer Morales reiteró que no pedirá perdón y aclaró que no es enemigo del Perú sino “gran defensor de la vida”. Afirmó que le echan la culpa por defender el medio ambiente y por rechazar el Tratado de Libre Comercio. “Las políticas de libre mercado no son ninguna solución para los pueblos. Estamos aprendiendo con quienes defienden la política de la vida y con quienes defienden las políticas de la muerte”.

Llorenti, por su parte, arguyó que el Gobierno “no callará”. “Si tenemos que mandar diez o veinte cartas para alertar a los pueblos del mundo sobre las nefastas consecuencias del neoliberalismo en los tratados de libre comercio, lo haremos”. Y admitió que las relaciones con la nación peruana pasan por una etapa difícil, pero los nexos con otros países vecinos pasan por sus “mejores momentos”.

Legislador peruano recomienda a Evo un tratamiento psicológico

El ex canciller y congresista peruano Luis Gonzales Posada sugirió ayer al presidente boliviano Evo Morales recibir tratamiento psicológico porque en las declaraciones del Jefe de Estado boliviano se reflejarían una mezcla de psicopatía política y odio contra Perú.

De acuerdo con la agencia oficial Andina, Gonzales cuestionó que Morales insista en no pedir disculpas por sus frecuentes agresiones contra su país y estimule campañas para desprestigiar al Gobierno peruano. “El señor Evo Morales requiere tratamiento psicológico, en consecuencia es inimputable porque no hay otra explicación a sus declaraciones, que no sólo reflejan un odio contra el Perú, sino una verdadera psicopatía política”.

Sostuvo que esa nación tiene el camino para presentar una queja internacional por los enumerados agravios del Mandatario boliviano, pues más allá del “odio” hay una carga de violencia e intromisión en asuntos internos.

“El Presidente de Bolivia, lo que está haciendo es provocar constantemente, como una especie de camorrero latinoamericano. Lo que dice no tiene ningún sentido. Nadie puede darle ningún crédito a sus declaraciones. Lo que está haciendo es provocar la ruptura de relaciones o provocar una escalada de violencia”.

Refirió que esos ataques pueden tener graves consecuencias para las relaciones bilaterales, de las que su país resultaría perjudicado. “Está jugando con fuego, sin saber cuáles son los límites de lo que está haciendo. No lo hace por ignorancia, sino por una mezcla de odio al Perú y psicopatía política”.

El legislador oficialista peruano advirtió también que Morales pondrá “un candado para en caso de que se abran negociaciones que puedan posibilitar una salida al mar para Bolivia en un territorio que antes fue peruano”.

Tres claves del lío

Las relaciones diplomáticas entre Bolivia y Perú se deterioraron como consecuencia de tres eventos, entre otros, que se desarrollan a continuación:

Tratado de Libre Comercio: El Gobierno peruano negoció con Estados Unidos y la Unión Europea el TLC al margen de la Comunidad Andina de Naciones. Este hecho fue criticado por el presidente Evo Morales, quien abogó por la negociación en bloque y en el marco de otras condiciones. En junio de 2008 llamó “muy gordo y poco antiimperialista” a su homólogo peruano Alan García.

Demanda internacional: Perú presentó una demanda contra Chile ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya por el límite marítimo en el océano Pacífico. Según el Gobierno boliviano y expertos internacionales, ese juicio perjudicará la aspiración boliviana de salida al mar. El Presidente boliviano, desde entonces, criticó en varias oportunidades a Alan García.

Asilo y refugio políticos: El Gobierno peruano concedió asilo a Jorge Torres Obleas y refugio a Javier Torres Goitia y Mirtha Quevedo, ex ministros de Gonzalo Sánchez de Lozada, acusados de la masacre de “octubre negro” que en 2003 dejó un saldo de al menos 67 muertos. El canciller peruano, José Antonio García Belaúnde, dijo que Perú concedió protección a las ex autoridades porque no “confiaba” en la “objetividad” de la justicia boliviana.

Repercusiones

“La mala relación entre los gobiernos (de Perú y Bolivia) pone en riesgo una balanza comercial de 960 millones de dólares que tenemos con Perú. Es lógico que el Presidente se disculpe porque está siguiendo el mismo camino que con Estados Unidos, por lo que perdimos el ATPDEA. Perú retiró su Embajador y puede tomar otra decisión”

Arturo Murillo

Diputado de UN

“No tendríamos por qué pedir ninguna disculpa, porque no ha sido una posición oficial (del Gobierno de Bolivia). (A Puno) fueron dirigentes y organizaciones sociales al igual que las declaraciones de dirigentes sociales del Perú y de algunos parlamentarios que con el abrigo de Santa Cruz hacen un escenario político en nuestro territorio”.

Jorge Silva

Diputado del MAS

“El Gobierno ha manejado las relaciones internacionales de manera irresponsable e ideologizada (…) Eso es reprochable. Es la peor tragedia que le pudo pasar a Bolivia porque esas políticas están por encima de los intereses del pueblo boliviano, no contribuyen al fortalecimiento de la unidad con Perú”

Fernando Messmer

Diputado de Podemos

“Hay una línea de prepotencia del Gobierno porque hemos tenido conflictos incluso con otras naciones vecinas, como con Paraguay, y posiblemente ocurra con otros países. Es acertada la petición de Perú, creo que Bolivia debe responder eso por el bien de los negocios y la relación entre pueblos”

Gustavo Ugarte

Diputado de MNR

OPINIONES

Javier Murillo

Ex canciller

“Una relación bilateral se construye desde ambas partes, eso quiere decir que tiene que existir el respeto mutuo en el sentido más amplio. La palabra, al final de cuentas el instrumento de la diplomacia, es un lenguaje claro y respetuoso. Hay que tener mucho cuidado y esto va para ambas partes, creo que esta escalada entre ambos mandatarios (Evo Morales y Alan García) ha llegado a un tensionamiento muy serio. Hay que ser muy cuidadoso, efectivamente hablar de genocidio no se ajusta ni por los antecedentes que conocemos a lo que puede haber ocurrido a los sucesos lamentables que hubo en el Perú; sin embargo, no creo que una disculpa resuelva, sino un acercamiento, por ejemplo, unirnos en el combate a la gripe A”.

Armando Loaiza

Ex canciller

“Es un poco fuerte pedir disculpas; lo que seguramente pide Perú es una explicación razonable más que disculpas, para (así) iniciar el pedido de reconciliación, y Bolivia puede dar una explicación aceptable, así es como se llama en diplomacia sobre los asuntos internos del Perú y por la acusación inapropiada de genocidio, ya que las Naciones Unidas no han encontrado elementos de genocidio. Además, el término de genocidio fue mencionado por varios actores de forma inapropiada. Seguramente habrá una investigación internacional que informará con más precisión sobre lo que ha ocurrido. Asimismo, el pedido de que expulsen a tres ex ministros también es inapropiado”.