Líder campesino denuncia que ex prefecto «Chito» Valle está refugiado en Perú prófugo de la justicia

«Hemos descubierto que está en Lima, Perú. La información me la pasó un boliviano que lo encontró en un auto..»

image

El secretario ejecutivo de la CSUTCB, Isaac Avalos. – Abi | Los Tiempos



Los Tiempos

La Paz | Abi. El máximo dirigente de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), Isaac Ávalos, denunció el martes que el ex prefecto de La Paz, Luis Alberto ‘Chito’ Valle, prófugo de la justicia boliviana por defraudación de más de 17 millones de dólares, está refugiado en Perú .

    «Hemos descubierto que está en Lima, Perú. La información me la pasó un boliviano que lo encontró en un auto, tiene el número de placa», reveló el líder campesino en una entrevista con un medio local.

    El ex prefecto de La Paz, desaparecido desde el seis de enero de este año, está acusado de defraudar al Estado más de 17 millones de dólares.

     Ávalos reprochó al gobierno peruano por «custodiar a asesinos y corruptos» que son buscados por la justicia boliviana, en alusión también a los tres ministros del ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, que recibieron asilo en ese país y que están sumariados en Bolivia por genocidio.

    «Se han metido con el tema de la CAN, negociando el TLC y el ALCA; se han metido en el tema marítimo, que el presidente Evo Morales y Bachelet de Chile estaban negociando, con un proceso internacional a la Haya; y con los perseguidos de nuestra justicia boliviana, como Chito Valle y otros maleantes que están allá custodiados», argumentó.

    En Perú se encuentra asilados los ex ministros bolivianos de Hacienda, Jorge Torres Obleas, de Participación Popular, Mirtha Quevedo; y de Salud, Javier Tórrez Goitía, incluidos en el juicio de responsabilidades al ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, por la masacre de más de 67 personas y más de 400 heridos en octubre de 2003.

     Por otro lado, el dirigente campesino, que asistió el mes pasado a un congreso internacional de indígenas en Puno y fue acusado por oficialistas peruanos de instigar la violencia en Bagua, insistió que Bolivia y su presidente Evo Morales «no tiene por qué pedir perdón a nadie», sino al contrario señaló que otros deben pedirle disculpas al país y al pueblo boliviano por usarlos para esconder las muertes de Bagua.

    «Nosotros no tenemos ninguna diferencia con el pueblo peruano (…) nosotros no teníamos por qué meternos, pero ya nos culparon, ya amenazan con procesos por una visita a un evento continental que hicimos en Puno», justificó Ávalos.