El Gobierno dice que Adepcoca debe explicar destino de la hoja

Evo Morales asegura que Santa Cruz es el departamento donde más se acullica. Este año el mercado de Villa Fátima acomodó 10.470 toneladas de la hoja.

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Fiesta: asociados a Adepcoca festejaron ayer el 26 aniversario de la entidad con bailes en Villa Fátima



La Prensa

Felipe Cáceres aseguró que en tres años el Gobierno erradicó 20.211 hectáreas de cocales.

A través del diálogo, el Viceministerio de Defensa Social buscará que los dirigentes de la Asociación Departamental de Productores de Coca de La Paz (Adepcoca) expliquen cuál es el destino de sus cosechas, según una fuente de esa cartera de Estado.

La Prensa informó ayer que, entre el 1 de enero y el 29 de julio de este año, el mercado legal de Villa Fátima acomodó 10.470 toneladas de la hoja, lo que representa unos 50.000 kilogramos diarios en promedio.

El viceministro Felipe Cáceres fue anfitrión ayer de una reunión con el viceministro de la Coca, Gerónimo Meneces; el principal responsable de la Dirección General de la Coca e Industrialización, Luis Cutipa, y representantes del Ministerio de Gobierno para analizar el caso.

La mencionada fuente informativa del Viceministerio expresó que Cáceres considera que en etapa preelectoral los dirigentes de algunos sectores sociales podrían actuar de manera política a grado tal que dejarían de lado incluso convenios firmados con autoridades nacionales.

Esta dependencia de Estado continuará las tareas de erradicación y racionalización de cultivos excedentarios sin el empleo de la fuerza y con respeto por los derechos humanos, factores que definió como características del proceso de cambio.

Cuando el actual Gobierno inició su gestión, la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD) reportó 25.400 hectáreas cultivadas con coca. Ese índice se incrementó a 27.500 en 2006, a 28.900 en 2007 y a 30.500 en 2008, el más reciente reporte oficial.

La cantidad de afiliados a Adepcoca creció de 28.700 en 2007 a 33.500 en la actualidad.

Los asociados lograron en septiembre del año pasado que el Gobierno autorizara a los productores vender al detalle en distintos puntos del país un máximo de 300 libras mensuales del producto en su estado natural.

También el Órgano Ejecutivo autoriza a los cocaleros a hacer trueques de un máximo de 150 libras por mes (tres taques), pero los cocaleros de los Yungas exigen que este límite se incremente a diez taques.

La coca que comienza a secarse es la elegida para efectuar los trueques en distintos puntos del país. Los cambios se hacen con otros productos agrícolas con quienes los siembran.

Hoy, funcionarios del Instituto Nacional de Estadística (INE) comenzarán a levantar la Encuesta de Uso y Consumo Tradicional de la Hoja de Coca en Hogares de Bolivia.

El cuestionario será planteado a 11.823 hogares, de los cuales 7.788 se ubicarán en áreas urbanas y 4.044 estarán establecidos en zonas rurales.

Esta tarea concluirá en junio de 2010 y sobre la base de la información que ofrezca se establecerá la extensión máxima de cocales legales en el territorio nacional, aunque el Gobierno se adelantó a pedir el incremento a 20.000 hectáreas, mientras que Adepcoca propuso que la superficie legal sea de 30.000.

Cáceres dijo, durante el lanzamiento del mencionado estudio, que el 62,2 por ciento de la población boliviana se define como aymara, quechua o tupiguaraní y tiene el hábito de acullicar.

Basado en esa afirmación, justificó el cálculo de que con el rendimiento de 20.000 hectáreas quedará satisfecha la demanda de consumo tradicional.

El presidente Evo Morales sostuvo ayer en la localidad cruceña de Okinawa que Santa Cruz “es el departamento que tiene más consumo de hoja de coca”, recordó que Naciones Unidas inició un programa de consultas con la finalidad de despenalizar el acullico e hizo votos por que los encuestados por el Consejo Económico y Social de la ONU comprendan que “el consumo tradicional no sólo es de los pueblos, sino de diversos sectores”.

La Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) destruyó el 7 y el 27 de mayo y el 4 de julio tres megalaboratorios de procesamiento de cocaína.

El primero tenía capacidad para producir 1,5 toneladas por mes, el segundo podía producir 100 kilos por mes, y el tercero, 36 toneladas al mes. En este último se hallaron 319 kilos del alcaloide.

La coca yungueña va también al Chapare

De acuerdo con datos a los que tuvo acceso La Prensa, el miércoles 29, comerciantes y productores detallistas llevaron 99 taques de coca producida en los Yungas a dos municipios de la provincia Chapare: Colomi y Sacaba, y al futuro municipio de Sinahota, en la provincia Tiraque, ubicada también en el trópico del departamento de Cochabamba, que es una región productora de la hoja.

Los 99 taques pesaban unas 2,25 toneladas, en tanto que otros 214 taques (4,9 toneladas) fueron trasladados a localidades próximas al área de cultivos de Cochabamba: Mizque, Cliza, Aiquile, Quillacollo y la capital departamental.

Otra región próxima al trópico cochabambino, el norte integrado cruceño y Santa Cruz de la Sierra recibieron 13,4 toneladas del producto yungueño.

Ese mismo día, los vendedores al detalle de la hoja así como los propios cocaleros trasladaron desde Villa Fátima 480 taques a los municipios tarijeños de Bermejo, Villamontes y Yacuiba, así como a Villazón, en el departamento de Potosí.

Esas cuatro ciudades intermedias se encuentran en la frontera con el norte de la República Argentina, donde el uso tradicional de la coca, aunque es ilegal, es una costumbre muy extendida entre los pobladores urbanos y rurales.

Los 480 taques enviados el miércoles a esa región representan alrededor de 11 toneladas.

A las tres regiones —Cochabamba, norte cruceño y frontera sur— se enviaron 26,65 toneladas.