El tren de la oposición

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Las últimas encuestas de agosto- 2009- de Gallup Internacional, le dan un portazo en las narices a la oposición que se apresta a participar en las elecciones de diciembre próximo. Evo Morales obtiene el 57.7% de intención de votos y le siguen a mucha distancia Samuel Doria Medina 9.7%, Manfred Reyes Villa 8.6%, Tuto Quiroga 7.2%, Victor Hugo Cárdena 4.5%, René Joaquino 3.5%, Germán Antelo 1.5% y Jimena Costa 1.2%.

Se pueden decir muchas cosas, entre ellas que la encuesta ha sido fabricada para favorecer a algunos, o se puede decir que se han inclinado ex profeso las preferencias, etc, pero a mi entender esta encuesta refleja de algún modo la situación que se puede apreciar en el momento actual y que es fruto del desacierto y confusión reinante.



No se puede ser tan ciego, ni dejarse manipular tanto con los verdaderamente interesados en que siga cundiendo la dispersión del voto que está llevando a que la oposición esté camino a entrar en una suerte de subasta a riesgo de extinción. Disculpen la franqueza para expresar lo que se puede ya oler y observar en este ambiente pre electoral en el que un mundo de intereses da muestras de que hay quienes están pescando en río revuelto. Es realmente incomprensible que se tome un momento tan álgido como la oportunidad para sacar pequeños réditos que nada aportarán al país y que destruirán totalmente la posibilidad de hacer un juego político serio y que obtenga resultados con los que se podría entablar una defensa de los derechos humanos que están siendo tan seriamente vulnerados, de la institucionalidad erosionada y del Estado de derecho, situaciones que están permitiendo que cada día nos alejemos más de las reglas democráticas para entrar en un terreno complejo y de difícil retorno.

Los candidatos Samuel Doria Medina y Tuto Quiroga que se han opuesto férreamente a conformar un frente de oposición, dan muestras de estar jugando a establecer sus propias minorías para seguir exactamente el mismo juego político que desarrollaron durante la gestión que concluye, vale decir negociando con el partido del presidente Morales, tal como negociaron el alargue de la Asamblea Constituyente, el Referendum Revocatorio, la re elección, etc, etc, claro que en el futuro van a negociar nada menos que la profundización de una hegemonía que les exigirá marchar sin contramarcha.

En la otra esquina del pugilato se ha colocado el MNR; partido del que pensamos que tiene sobrada experiencia por lo que no puede estar tomando decisiones a ciegas ni a tientas y que posiblemente debe estar calculando que necesita inmolar sangre nueva, para que el obtener así sea una escuálida bancada congresista, le permita negociar y zafar de los juicios de responsabilidades que el gobierno actual ha planteado desde su inicio. Esta parece ser la misma apuesta por la que se estarían jugando los prefectos de la Media Luna y otros que piensan que los congresistas que logren obtener los ayudarán a negociar con el Masismo, que tiene todos los juicios en ciernes y a la orden del día, conocedores de que este ha sido el mejor y más efectivo argumento para empujar el tren de los opositores que se entregan al infierno en vagones sellados y por separado.

Algunos por inexperiencia y otros porque son viejos y callosos lobos de mar, van camino al matadero de los opositores, entregándose en bandeja y con el grave riesgo de dejar que se derrame sangre nueva en la ofrenda del banquete sacrificial. En este contexto podemos decir que es previsible que el MAS obtenga un triunfo rápido y sin problemas porque la oposición ha decidido convertirse en un grano de arena y como grano de arena se ha conformado con molestar o alborotar los callos del MAS pero no tiene ganas o no tiene las agallas de hacerle una oposición en serio, el sentido estricto de la concepción política del término.

Hemos entrado en cuenta regresiva y tal como ya ocurrió con el revocatorio en el que todos terminaron a la postre revolcados y el pueblo cada vez más indefenso, expuesto y desprotegido, creemos que no estamos equivocados en este análisis, pues la oposición no ha cohesionado un discurso, no ha mostrado propuestas y está canturreando cada uno con su propia musiquita, ciega y sorda y para yapa indiferente a la realidad que se cierne inexorable.