La crisis de Yacimientos

La situación de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos no es buena en ninguno de los frentes. Por ejemplo, está considerada como la responsable de que en este momento se tenga que importar el 25 por ciento de los combustibles líquidos que se consumen en el país.

laRazon Editorial La Razón



El presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos, Carlos Villegas, recriminó, en Santa Cruz, a los empresarios petroleros por haber ejecutado hasta ahora sólo el 29 por ciento del presupuesto de inversiones del año.

Agregó que esta situación perjudica los niveles de producción, las metas de crecimiento de la estatal petrolera y el cumplimiento con los mercados interno y externo, principalmente en las exportaciones.

El comentario, hecho en el marco del congreso “Bolivia Gas & Energía”, pudo haber sido más efectivo si no fuera que la empresa que Villegas dirige ejecutó sólo el 1,7 por ciento de su presupuesto. La situación no ha pasado desapercibida para el presidente, Evo Morales, quien llamó la atención a los responsables de esta situación.

Es más, el ministro de Planificación del Desarrollo, Noel Aguirre, condicionó el desembolso del crédito de 1.000 millones de dólares para Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos a la ejecución que realice.

Así, la situación de la empresa estatal del petróleo no es buena en ninguno de los frentes. Por ejemplo, está considerada como la responsable de que en este momento se tenga que importar 25 por ciento de los combustibles líquidos que consume, lo que deja mal parada a la reciente fama de Bolivia de que es un país exportador de hidrocarburos en la región.

Debido a eso es que las importaciones de combustibles y lubricantes llegaron a los 530 millones de dólares el año pasado, duplicando la cifra del 2006, cuando se registraron 260 millones.

Es probable que los altos precios que rigieron el 2008 pudieran haber tenido un impacto fuerte en el resultado de las importaciones, pero no se puede negar que también hubo un fuerte incremento de los volúmenes comprados.

Además, todos los días se informa sobre la caída en los ingresos por concepto de exportación de hidrocarburos. Para los municipios, la rebaja representa más de 34 por ciento, según cifras oficiales.

Los ingresos del Estado boliviano provenientes de los hidrocarburos cayeron en 14,7 por ciento entre enero y mayo pasados, respecto a similar período del 2008. En otras palabras, en los cinco primeros meses los ingresos fueron de $us 209,3 millones, frente a los 245,3 millones logrados de enero a mayo del 2008.

En el segundo congreso de energía surgió la propuesta de una empresa petrolera, respaldada por expertos como el ingeniero Carlos Delius, de que Bolivia ayude a resolver los problemas que están frenando las exportaciones a Argentina.

Para que el país pueda enviar a ese mercado los convenidos 27,7 millones de metros cúbicos diarios hace falta que se complete una conexión de 40 kilómetros entre los ductos de ambas naciones, dentro de territorio argentino. La propuesta dice que Bolivia podría financiar esa obra en la perspectiva de beneficiarse con las futuras ventas de gas.

Pero de parte de las autoridades nacionales no hay ideas que estén dirigidas a resolver los problemas que afectan a YPFB.

Todo esto muestra que no anda bien la más grande reforma hecha hasta ahora por el Gobierno en el área económica, de la cual tan orgulloso se siente el presidente Morales.