Evo y Lugo fueron a ver la película ‘Al Sur de la Frontera’

Los presidentes de Bolivia y Paraguay asistieron al estreno del film de Oliver Stone, en un acto de reafirmación del chavismo y el castrismo.

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Evo Morales antes de la proyección. | Reuters



Efe | Madrid

Evo Morales y Fernando Lugo se van al cine

Los presidentes Evo Morales y Fernando Lugo asistieron este martes en Madrid al estreno de ‘South of the Border’ (Al sur de la frontera), la película de Oliver Stone sobre el movimiento bolivariano en América Latina, en una proyección pública que se convirtió en un acto de reafirmación del chavismo y el castrismo.

Cientos de personas ondeando banderas de Bolivia y Venezuela y gritando consignas a favor de Chávez y Fidel Castro asistieron al estreno en el Palacio Municipal de Congresos, en Madrid, e interrumpieron la proyección en numerosas ocasiones con aplausos y abucheos, según quien fuera el personaje que saliera en pantalla.

Oliver Stone, que excusó su ausencia al encontrarse recibiendo un doctorado honoris causa fuera de España, ofrece en ‘South of the Border’ su visión del liderazgo de Hugo Chávez en América Latina a través de entrevistas con el propio presidente venezolano y con varios de sus colegas de Argentina, Bolivia o Paraguay.

A medida que transcurría la proyección del filme -estrenado ya el pasado año en el Festival de Cine de Venecia-, los espectadores aplaudían las intervenciones de Chávez y abucheaban a otros personajes retratados por Stone como George W. Bush, el efímero presidente golpista Pedro Carmona o la ex candidata y ex miss venezolana Irene Sáez.

«Evo, amigo, el pueblo está contigo«, «U, a, Chávez no se va», «Viva Cuba y su Revolución», «Viva Sandino» y «Uribe fascista y narcoterrorista» fueron algunas de las consignas coreadas por el público congregado en el Palacio de Congresos.

El objetivo del estreno, que llevaba el nombre de ‘Una velada por Haití’, era llamar la atención sobre la situación en el país caribeño tras el terremoto. De hecho, el primer ministro haitiano, Jean-Max Bellerive, intervino antes de la proyección para agradecer el apoyo de Cuba y Venezuela a su pueblo.

«Yo no sé de guerrilla, yo no sé de revolución, pero sí sé de solidaridad», les dijo un agradecido Bellerive a sus colegas latinoamericanos.

Entre los invitados al estreno estaban, además de Morales, Lugo y Bellerive, el canciller cubano, Bruno Rodríguez, los vicecancilleres de Venezuela y Nicaragua o la senadora colombiana Piedad Córdoba.

Lugo también intervino antes de la proyección

Fernando Lugo, uno de los protagonistas de la película, también se dirigió a los espectadores antes de la proyección para evocar el sueño de los pueblos latinoamericanos por un continente diferente y unido, una «patria grande» que complete el sueño de Bolívar, Miranda o Sucre.

Morales, el más aclamado de los asistentes, se quejó amistosamente de la ausencia de Hugo Chávez en Madrid y dijo que «la batalla de los pueblos continúa mientras haya sistemas que hacen tanto daño a la Humanidad».

En un discurso plagado de proclamas anticapitalistas, Morales alabó la «lección que nos deja Fidel, un maestro, un símbolo de solidaridad», y se felicitó de haber hallado una veta por donde horadar el sistema capitalista: la defensa de la Madre Tierra.

En la protección del medio ambiente «tenemos una mina de oro para combatir el capitalismo», subrayó.

El filme de Stone se abre con un programa de la Fox en el que la presentadora Gretchen Carlson ridiculiza a los presidentes bolivarianos y les acusa de ser drogadictos por tomar «coca».

A partir de ahí, el Fondo Monetario Internacional, Bush, la CNN y las petroleras comparten protagonismo y antagonismo durante hora y media con presidentes como Morales, Lugo o Cristina Fernández, ayudados por los comentarios de varios periodistas estadounidenses o del cineasta Michael Moore.

El principal protagonista es Hugo Chávez

Pero el principal protagonista es Hugo Chávez. Filmado en su avión presidencial, conduciendo una camioneta o pedaleando en una bicicleta, la figura de Chávez es omnipresente en el documental de Stone y deja frases como «Ésta es una revolución pacífica pero armada», «Yo le vi el rostro a la muerte» (en el golpe de estado), o «Voy a morir parado (de pie)», como el Che Guevara.

Buena parte de la película se centra en el intento de golpe de Estado que sufrió Chávez en 2002, que según Stone contó con el respaldo de EEUU y España y supuso una inflexión en las relaciones entre EEUU y América Latina.

La película, de fuerte carga ideológica, sólo se permite una licencia humorística: cuando Oliver Stone le pregunta a Cristina Fernández cuántos zapatos tiene, la presidenta argentina se revuelve y le afea que haga este tipo de preguntas machistas. Más tarde, la presidenta se desquita ante la cámara y, ante la tardanza de sus colaboradores en acercarle una foto suya con Fidel Castro, exclama: «Qué lentos son los hombres…».