Los jugadores habrían visitado discotecas de la noche porteña en las que abundan “botineras”, o sea, chicas “caza-futbolistas”
Parece ser que siempre se espera que los mejores den lo mejor de si, y que si no lo dan, pues la culpa es siempre de las féminas. Eso es lo que al menos debían pensar los periodistas que en su momento culpabilizaron a Sara Carbonero del mal estreno del equipo del Del Bosque en su debut mundialista por "despistar" a su novio, el portero, y los que ahora acusan al combinado rojo de haberse ido de fiesta con "señoritas de vida alegre" en Buenos Aires y no rendir por ello en su amistoso ante Argentina.
El diario argentino Clarín ha acusado a la selección española de no rendir ante su selección nacional en el partido amistoso que jugaron, y que perdieron 4-1, por haberse ido de fiesta en compañía de "botineras", es decir, "putas-busca-futbolistas". La "noche loca" del combinado español se habría producido a sólo 36 horas del partido amistoso hecho que, de ser cierto, podría justificar su bajo rendimiento en el encuentro. "Además de sacarse fotos en el estadio y de visitar a la presidenta, los jugadores de España se divirtieron: la madrugada de el lunes se les vio en una conocida discoteca de la avenida Juan B Justo …", explica el citado diario.
En la citada avenida de la capital porteña se sitúan las discotecas, Esperanto i Ink, famosas entre los jugadores de la liga albiceleste y repleta de chicas a la cajaza de un futbolista de cartera abultada, conocidas como "botineras". El periodista Fernando Niembro, en su programa de radio Del Plata, protestó y comentó que "a mi porque me acreditaron pero si hubiese pagado la entrada me hubiese colocado en la puerta de la AFA y no me hubiese ido hasta que me devolvieran los 450 pesos de la entrada .
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Los españoles no podían ni con las piernas… ". Un colaborador de la tertulia agregó: "¡Claro, si se fueron todo de putas!". En la noche argentina es muy frecuente este tipo de "romances fugaces", tanto, que el fenómeno ha sido explotado televisivamente con un culebrón llamado, precisamente, ‘Botineras’.
Fuente: La Vanguardia