Liga de Quito vuelve a teñir a América de blanco


Liga de Quito revalidó anoche su título de campeón de la Recopa Sudamericana de fútbol al igualar 0-0 en final de vuelta ante el Estudiantes argentino, tras lograr una victoria de 2-1 hace 15 días en Quito. Imagen

El equipo que dirige el argentino Edgardo Bauza apagó todos los fuegos de Estudiantes, le sometió a una enorme trabazón y completa una etapa brillante, la más destacada internacionalmente de un equipo de su país.

La formación quiteña, que alineó a cinco centrocampistas para cortar la comunicación entre los argentinos Verón y Braña complicó, ciertamente, el control local del balón desde los primeros minutos.

Acciones

Fue así como LDU (Q) tuvo la primera ocasión de abrir el marcador a los siete minutos, cuando Hernán Barcos lanzó un centro desde la derecha que Carlos Luna cabeceó apenas desviado sin marcajes en el área, dando un aviso preocupante a los argentinos.



El Estudiantes supo de entrada que el asunto estaba difícil y que levantar la derrota sufrida en la capital ecuatoriana en la ida implicaría un esfuerzo extra, mucha concentración y viento a favor, y que un error podría costar caro.

Sobre los 25 minutos LDU (Q) tomó aire tras un sostenido ritmo de juego, retrocedió un poco y el Estudiantes se acercó con mayor frecuencia al meta José Cevallos, rodeado de cancerberos implacables en los marcajes, encabezados por Guagua y Norberto Araujo, que mantuvieron alejadas de su área a las visitas molestas.

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La escasa gravitación de Verón multiplicó los esfuerzos de Enzo Pérez por empujar a los locales ofensivamente, lo cual parecía imposible hasta que Cevallos cometió un error reglamentario al recoger con la mano un balón que debió rechazar con el pie y provocó la mayor acción de riesgo para su meta, con un tiro libre para los locales que no prosperó.

Transcurrida la primera mitad del partido el Estudiantes no había logrado sorprender nunca a su rival, y los recursos de aproximación a la meta de éste fueron generalmente las jugadas a balón parado.

Intenso
En la mejor jugada colectiva hasta ese momento, el punta local Leandro González remató al larguero a los 47 minutos, tras una cesión de Leandro Benítez, y la sensación de gol parecía entibiarse cerca de la portería ecuatoriana.

Verón y el juvenil Auzqui exigieron al meta Cevallos entre los 60 y 65 minutos, pero una acción individual de Barcos, a los 74, puso en serio riesgo a la defensa del Estudiantes, lanzado totalmente al ataque.

Pero no pudo el conjunto de Sabella. Liga de Quito supo cómo hacer para alzarse con un nuevo título que le convierte en un conjunto laureado como pocos en el extremo norte de Sudamérica.

Fuente: El Tiempo