Ministra Chacón: “Se va a cambiar toda la normativa del sector defensa”

Entrevista. La primera mujer en ejercer el cargo que rige sobre las FFAA comparte sus retos y planes para modernizar y adecuar algunos preceptos militares.

imageMaría Cecilia Chacón, ministra de Defensa

María Cecilia Chacón no tiene más de 30 años y es la primera mujer en ser ministra de Defensa en la historia de Bolivia. Después de que transitó, en cargos intermedios, por varios ministerios, el presidente Evo Morales sorprendió a todos al colocarla al mando del despacho que trabaja de manera directa con las Fuerzas Armadas.



Esta es la primera entrevista que la autoridad concedió a un medio de comunicación impreso.

¿Qué significa ser la primera mujer ministra de Defensa en la historia de Bolivia?

Las mujeres tenemos las mismas capacidades, los mismos derechos y las mismas obligaciones. Para mí es un desafío, una oportunidad y un compromiso con el país. Es una gran oportunidad para consolidar el sector Defensa de acuerdo al mandato de la Constitución, que tiene un enfoque de seguridad y defensa del Estado mucho más amplio del enfoque tradicional que primó en las anteriores décadas.

¿Le costó tomar esta decisión?

Yo acepté asumiendo un compromiso como parte de una generación de jóvenes que hemos ido trabajando por el país.

Este proceso de cambio nos ha permitido trabajar por Bolivia desde hace varios años. Los lugares en los que he estado me han permitido tener un panorama de la función pública.

Siendo joven me han encargado importantes responsabilidades y los resultados de ese trabajo han sido satisfactorios. Creo que eso ha primado en el momento de la definición que tomó el Presidente. Tengo una gran responsabilidad: construir un Estado plurinacional más incluyente desde las Fuerzas Armadas.

Agradezco esta oportunidad que, sin duda, muchos jóvenes están esperando. Mi trabajo será abrir un espacio más amplio para ellos.

¿En qué situación está la tropa?

En las unidades que he visitado he notado que faltan condiciones de infraestructura, los espacios habitacionales son escasos. Hay que mejorar las dotaciones de cocina y sanidad. Hay que mejorar la nutrición del soldado, garantizar servicios básicos, asegurar los transportes para las unidades en lugares alejados.

¿Se puede cambiar la idea de que la vida militar debe ser dura?

Es necesario. Esa visión de que el soldado debe sacrificarse y debe ser sometido a condiciones extremas responde a un contexto anterior.

Antes se concebía la vida militar como una preparación para la guerra. Ahora nos debemos preocupar por un personal profesionalizado, capacitado para atender desastres naturales, emergencias, sequía, incendios; coadyuvar en la salud y la educación.

¿Cuál será el horizonte de las Fuerzas Armadas?

Tienen un gran potencial. Estamos redescubriendo a las Fuerzas Armadas. Son un espacio para profundizar el desarrollo integral del país. Actualmente ya colaboran en la lucha contra el narcotráfico, contra el contrabando, protección de nuestras fronteras y defensa de recursos naturales.

¿Cuál será la diferencia con las Fuerzas Armadas del siglo XX?

El contexto actual ha cambiado la concepción de las FFAA. La concepción del “vivir bien” será parte de la nueva institución.

Esa visión ya ha calado en las Fuerzas Armadas. El problema anterior ya ha cambiado, desde allí se han resistido los aprestos sediciosos de los primeros años del Gobierno del presidente Morales. Desde este despacho se van a fortalecer estos lineamientos.

¿Cómo se va a luchar contra la impunidad en las FFAA?

El compromiso de mi despacho es claro. Se va a promover y defender los derechos humanos desde acá. Los esfuerzos hechos hasta ahora no han sido suficientes.

Hay que reconocer que esto no es un panorama general pero, en los casos en los que sucede esto, se debe combatir la impunidad. Tenemos que adecuar la normativa institucional al mandato de la nueva Constitución. Esto es un proceso gradual, el compromiso es claro.

Esto implica un cambio en todas las normas y prácticas militares’

Se va a modificar la Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas. Estamos trabajando en la readecuación de toda la normativa del sector defensa para poder estar acorde a la Constitución. Ya existen algunos proyectos que están en revisión. Hay que proteger los derechos humanos, garantizar la transparencia de la gestión y luchar contra la corrupción en todos los ámbitos militares.

En algunos espacios prevalece una tradición antigua de lo que es la vida militar. Ya no se trata de la preparación para la guerra. Vamos a sustituir esa visión con un enfoque de defensa amplio.

“Si tengo un roce con algún militar será una excepción”

Las Fuerzas Armadas son una institución machista’

Yo diría que las FFAA en todo el mundo tienen una tradición de preponderancia masculina y esto, naturalmente, ha sido gradualmente sobrellevado.

Bolivia es uno de los países que primero ha registrado una apertura a la participación de la mujer. Para las mujeres esto no ha sido fácil, tuvieron y tenemos que luchar. En la institución hay un reconocimiento al rol de la mujer, no obstante hay que seguir trabajando para lograr una inclusión plena.

Nos hemos propuesto un plan en coordinación con las mujeres: realizar un diagnóstico de los problemas e identificar las soluciones. El plan debe contar la participación de los que son afectados directamente.

¿Cómo está su relación con las Fuerzas Armadas?

He empezado a construir con ellos una relación muy cercana, hemos visitado a varias unidades militares. Esto me ha permitido ver las distintas realidades.

Existe una relación de mutuo respeto, compartimos un proyecto y una visión común. Son más de 70.000 personas que creen en un país y en un proyecto de Bolivia incluyente.

Las FFAA saben que tienen un rol y están dispuestas a trabajar por él. No he tenido ningún problema en la relación, al contrario, he notado que tienen un gran respeto por la autoridad y eso ha primado en el relacionamiento. También destaco la disciplina con la que trabajan en las Fuerzas Armadas. Si hay algún roce, será una excepción.

Página Siete, Boris Miranda / La Paz – 30/05/2011