Reflejos. Analistas y expertos dicen que si bien en Bolivia en los últimos años se han dado niveles mayores de participación ciudadana, esto se reduce al nivel de la cultura política. Queda pendiente consolidar la justicia y los Derechos Humanos.
Un estudio de ‘lapop’ sobre cultura política en nuestro país refleja avances en 30 años de democracia
EL DÍA, 14 de Octubre, 2012
El 10 de octubre pasado, Bolivia superó tres décadas de vida democrática. La plenitud y legitimidad de ella sigue siendo un tema de discusión y un desafío permanente a la vez. Un estudio, realizado entre marzo y abril cuya muestra está compuesta por 3.029 entrevistas realizadas personalmente a varones y mujeres, mayores de 18 años distribuidas en todo el territorio nacional, sobre la "cultura política de la democracia en Bolivia", revela que nuestro país en los últimos años ha logrado consolidar un importante caudal de participación electoral, partidaria, de protesta, cívica y comunitaria.
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A pesar de ello, dice también que temas como la pobreza, discriminación y exclusión social tiene rostro de mujer y siguen siendo temas pendientes a superar. "Los datos muestran con claridad que el interés por la política está marcado por las variables de género, riqueza, educación y experiencias de discriminación. Los varones, los más ricos, los más educados y quienes sufrieron alguna forma de discriminación son los más inclinados hacia el interés por la política", explica Gustavo Pedraza, analista político.
La temática en sí. Dice el informe en su capítulo II que la proporción de ciudadanos que asiste a elecciones es apreciablemente alta. De los encuestados, el 94,5% votó en 2009, y el 70% de ellos volvió a hacerlo el 2011 en la elección de magistrados. También, hace notar que pese a que el acto electoral por su carácter obligatorio y coercitivo no garantiza que sea acatado plenamente.
"Lo que me parece importante es que los bolivianos en general somos muy participativos en relación a otros países. Esto se da en distintos niveles como son las electorales, la comunidad, los barrios, los entes cívicos y también en las protestas. El porcentaje más alto de participación en protestas es distintivamente superior en Bolivia", explicó Daniel Moreno, Coordinador del Estudio 2012 de Lapop (Proyecto de Opinión Pública de América Latina, por sus siglas en inglés).
En el caso de Santa Cruz. A diferencia de los años anteriores al 2009, donde la temática de la autonomía y el referéndum revocatorio era uno de los rasgos notables de la participación política y electoral. En el 2011 no se registró diferenciado por grandes regiones del país. En el caso de Santa Cruz solo el 71,4% de los que votaron el 2009 volvieron a las urnas el 2011.
"Si bien Santa Cruz muestra que, en las elecciones judiciales de 2011, solo participó el 71,4% de quienes votaron en 2009, este dato no tiene correlación con los otros departamentos de la denominada media luna. Esto evidencia que no existe, de acuerdo a estos últimos datos, una coherencia en tal sentido en términos territoriales y electorales", refiere Pedraza.
En tanto, para la politóloga Jimena Costa, tenemos una sociedad muy activista de la democracia en el sentido de elegir autoridades a través de decisiones colectivas de consenso. "Lo que también prueba que somos muy poco adeptos a los gobierno autocráticos que se quedan indefinidamente en el poder", analiza.
Preferencia partidaria. El estudio menciona que a partir de la crisis política del 2003 el sistema de partidos, dentro el ámbito de la democracia pactada de corte neoliberal que había funcionado perfectamente durante casi 20 años, se desmoronó y nunca se recompuso. En ese contexto, el MAS es el partido que cuenta con más simpatizantes. Dice el informe, que un 76% de los que se declaran simpatizantes de algún partido prefieren el MAS. Sin embargo, el informe señala que esa simpatía disminuyó en el 2012 de manera significativa. El estudio revela que el 2008 había un 29% de simpatía, el 2010 un 31,1% y el este año hay un notable descenso con apenas un 15,8% de preferencia hacia los partidos políticos.
Costas argumenta que este fenómeno se da por las acciones desacertadas de este gobierno en los últimos años. "El MAS tiene una base orgánica de un tercio del padrón electoral. Con eso no se gana una elección. Creer que están débiles y no tienen apoyo (el MAS) eso no es verdad tampoco. Es decir que los otros dos tercios están ahí, dispersos, no los tiene nadie. Hay un desgaste importante", sustentó Costas.
Siguiendo ese perfil la participación en campañas políticas también disminuyó entre el 2010 y 2012. Otros analistas dicen que si bien el MAS sigue siendo el partido de mayor preferencia es porque el electorado no cuenta con otra alternativa. "En términos generales, la falta de credibilidad y confianza en los partidos existentes es un rasgo llamativo acerca de la situación de la democracia en Bolivia. En términos específicos, en relación al MAS, existe una significativa correlación entre pobreza y afinidad con el partido de gobierno. Los sectores más carenciados de la población del país tienen una muy alta simpatía por el MAS, algo que claramente va disminuyendo en la medida en que el nivel de riqueza se va incrementando", describe Pedraza.
Participación ciudadana. Por su parte, Reymi Ferreira fundamentó que la participación ciudadana en ascenso está ligada con la retrospectiva de los 30 años de vida democrática del país, basada en cuatro etapas de maduración social y política. El primero tiene que ver con el ’82, cuando la dictadura devuelve esta cualidad al Estado boliviano. El segundo ciclo vendría con el periodo de la democracia pactada y representativa de partidos que permitió encumbrar las políticas sociales y económicas de corte neoliberal. Y el tercero se da con debacle política de esa democracia representativa del 2003, que dio origen al ascenso de un proceso que admite e incluye al gran conglomerado social de campesinos e indígenas tras la conquista del poder el 2006, de Evo Morales.
"En este periodo crece la participación ciudadana a través no solo del voto sino de la acción directa como el referéndum, el revocatorio. Este ciclo se consolida con la nueva Constitución Política del Estado" refiere Ferreira.
En términos de pobreza. El estudio dice que hay diferencias relevante en la participación partidaria de hombres y mujeres en campañas apoyando a algún partido o candidato. También es visible que la pobreza tiene efecto negativo en este tipo de participación. Además de la pobreza, ser mujer también afecta negativamente la participación en campañas partidaria o el trabajo con candidatos.
Para Moreno son tres los motivos en que la mujer es mas discriminada que el varón. Por su condición de género, por vivir en área rural y por ser indígena. Esas tres desventajas en relación a los hombre no solo persisten sino que se traducen en la pobreza existente. "La pobreza tiene rostro de mujer", afirma enfáticamente.
Ferreira reta el escepticismo algunos analistas y considera que hubo un avance significativo en sectores sociales como los indígenas, los campesinos y las mujeres que hoy han logrado participación importante en círculos de poder y en instancias decisivas del Estado. "Hemos avanzado bastante. Hasta el 2002 de 130 diputados tres eran indígenas. A partir del 2006 eso ha cambiado notablemente, son muestras palpables de inclusión masiva, de la lucha de contra la discriminación", enfatizó.
Costas encuentra dos factores en ese fenómeno. El primero por el ascenso de Evo Morales al poder que implicado la inclusión de gruesos sectores indígenas en el escenario político. "Mucha gente que no se sentía representado en el Estado ni se sentía parte, ha logrado ser incluido y ahora se siente que parte activa. Ese es un efecto propio del gobierno actual, nadie se los puede quitar pero se debe en gran medida a los 30 años democracia", manifestó.
Además, destaca que la discriminación "esta viento en popa", desde el mismo gobierno actual. "Nunca en la historia democrática del país había visto tanta discriminación a las mujeres. Hay acoso sexual, y discriminación por genero e identidad sexual. Hay discriminación regional e intelectual. Cómo es que el Presidente Evo Morales puede decir que se siente feliz no haber ido a la universidad, eso es discriminación a los intelectuales", asegura.
Activistas de las protestas. Según el estudio, la democracia ha dado tanta apertura que la participación ciudadana en las protestas es la mas alta en Bolivia comparativamente con los países latinoamericanos. "Los bolivianos son los latinoamericanos que más recurren a formas de participación no convencionales. La protesta es parte de la dinámica política habitual y tiene efectos claros en las políticas públicas", dice textualmente.
Destaca que dos hechos influyeron en este sentido en los últimos dos años. El primero fue el gasolinazo, cuyo decreto que incrementaba el combustible en un 80% el 2011 provocó una protesta popular en todos los rincones del país que obligó al gobierno dejar sin efecto la medida. Y en segundo lugar esta la carretera por el Tipnis, este hecho generó protestas y movilizaciones en todos los sectores.
Aún sigue vigentes el problema.
Cuatro puntos de participación según Lapop
Comicios. Bolivia es una de las sociedades más participativas de América Latina. La proporción de ciudadanos que asisten a elecciones es apreciablemente alta. Se vuelve a constatar las altas proporciones de filiación en organizaciones comunitarias. Un elemento que desafía una investigación es el hecho de que la participación comunitaria es mayor en países pobres.
Cabildo. El cabildeo difiere de la participación partidaria, ya que involucra una relación más directa con los "tomadores de decisiones" para fines de modificar el curso de las políticas públicas. Esta experiencia tan bien fortalecida en los últimos años se asienta en la experiencia de ser discriminado, la pobreza, la condición de líder comunitario y el interés por la política.
Pobreza. La pobreza tan contrastante en un país diverso cultural y étnicamente, influye negativamente en el grado de participación electoral, en la vida partidaria y también la participación en política virtual. A ello se suma el hecho de ser mujer, lo cual involucra un comportamiento político diferente de los varones. En estas circunstancias participan más.
Protestas. Somos un país especialmente caracterizado por las protestas. Este mecanismo de expresión es utilizado por diferentes sectores sociales para generar no solo demandas sino orientar las políticas públicas. El estudio señala que en tanto hubo más personas participando de movilizaciones el gobierno central volvió a ser el adversario o el favorecido.
Punto de vista
Carlos Cordero
Analista Político
"Los estudios nos están mostrando una visión"
"Lo que hay que afirmar es que la democracia como una forma de gobierno que resuelve sus problemas vía el voto se ha impuesto.
Por supuesto que en los últimos cinco años nuestro proceso democrático ha ampliado su horizonte. Y la prueba clara es que hoy tenemos un Presidente de origen indígena no solo en el incremento de su caudal electoral sino abriendo la participación directa en las decisiones políticas de amplios sectores de la población que antes no existían.
Lo que no dice este estudio es cómo estamos en los derechos ciudadanos y las libertades ciudadanas y de expresión.
Hay una disminución evidente de los derechos humanos y la justicia.
Los estudios nos están mostrando una visión que quizá sea del agrado de este gobierno. Esta es una mirada sobre el sistema político, al lado hay derechos fundamentales en los que aún no se ha avanzado.
En términos de pobreza todavía tenemos un gran desafío por mejorar los índices que si bien en los últimos años han bajado. Eso sigue persistiendo. Se han ido reduciendo bastante desde un 60% hasta un 40%. Es probable que el censo muestre un índice mayor.
Será mérito de este gobierno, pero seguimos cargando secuelas de otros gobiernos. De todas maneras, seguimos siendo como sociedad y como Estado comparativamente con otros países mucho más pobres. Los otros temas pendientes que superar en democracia son la corrupción, la poca confianza en la justicia. Estamos bien en cultura política, pero no en derechos humanos.