ONU pide fondos para paliar efectos de inundaciones en Bolivia

El Programa Mundial de Alimentos (PMA) de las Naciones Unidas pidió ayuda urgente para poder atender la situación de emergencia que atraviesan miles de familias debido a las inundaciones en la Amazonía boliviana.

La Razón / La Paz

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Lluvias. Una de las calles del poblado fronterizo de Guayaramerín. Foto archivo AFKA.

El Programa Mundial de Alimentos (PMA) de las Naciones Unidas pidió ayuda urgente para poder atender la situación de emergencia que atraviesan miles de familias debido a las inundaciones en la Amazonía boliviana.

“La inundación en Bolivia sigue siendo noticia para las personas que lo sufren día a día. No podemos olvidarnos y pensar que esto ya ha pasado”, indicó a EFE la directora adjunta del PMA en Bolivia, Marina García Real, según un boletín de la institución.

“El Gobierno boliviano está respondiendo a la emergencia, pero el desastre es de tal magnitud que requiere el apoyo del sistema de Naciones Unidas y de la cooperación internacional”, dijo la directora adjunta.

El PMA, que a diferencia de otras agencias de la ONU se financia solo a través de donaciones, necesita 4 millones de dólares para asistir, en siete departamentos (excepto Tarija y Oruro), a unas 76.000 personas que lo han perdido todo, explicó García Real durante una operación de ayuda en Guayaramerín.

Hasta ahora, solo se ha recibido 1 millón de dólares, por lo que la representante del PMA recalcó la importancia de seguir recibiendo contribuciones que permitan brindar ayuda básica a las miles de familias damnificadas. En las zonas afectadas, el PMA cubre las necesidades básicas de alimentos en una primera fase de respuesta.

“Sin embargo, para llevarla a cabo necesitamos donaciones que nos permitan realizar nuestro trabajo”, subrayó García Real.

El organismo multinacional ha distribuido a las familias afectadas 20 toneladas de galletas nutricionales y “en breve” repartirá otras diez toneladas.

Llueve en Guayaramerín y las aguas siguen subiendo

La lluvia no da tregua en Guayaramerín. Todos los días hay precipitaciones pluviales y el agua no desciende. El viernes estaba por encima de los 2,23 metros sobre el nivel del barranco, pero ayer subió dos centímetros.

Las lluvias no son tan constantes como hace un mes, pero cada día se produce este fenómeno climático “al menos por un buen rato”, dijo el alcalde José Guzmán. “El agua nos ha embolsado y hay problemas con las alcantarillas que revientan”, señaló el burgomaestre.

Respecto al inicio de las clases, el viernes, el ministro de Educación, Roberto Aguilar, declaró a Erbol: “Hoy día hemos hablado con la Dirección Departamental y Distrital (de Educación), y nos han indicado que han coordinado con el COE (Centro de Operaciones de Emergencias) para que se habilite el sistema de refugios; a partir del lunes ya casi todas las unidades educativas estarían retornando a clases”. Pero Guzmán indicó que es imposible que se reanuden las labores educativas porque las escuelas se convirtieron en albergues.