La innovación tecnológica necesita a las humanidades

pensadorEmprendedores famosos como Steve Jobs, Mark Zuckerberg y Jeff Bezos han visto en las humanidades un revulsivo de la capacidad creativa.En Estados Unidos, republicanos y demócratas coinciden en que la enseñanza debe promover las habilidades científicas y tecnológicas, por su utilidad en la nueva economía digital. Pero esta presunción pasa por alto que las humanidades también son necesarias para estimular la innovación que buscan las empresas tecnológicas, explica el periodista Fareed Zakaria en The Washington Post.Zakaria ve razonable que ambos partidos quieran mejorar la calidad de la enseñanza de matemáticas y ciencias, dos materias en las que los estudiantes estadounidenses puntúan bajo en PISA. Lo que le preocupa es que las humanidades queden marginadas, pues se extiende la idea de que “los estudios humanísticos son irrelevantes, mientras que la formación técnica es el futuro”.Este enfoque contrasta con la dirección que han emprendido algunos países asiáticos, como Singapur y Corea del Sur, cuyos alumnos sí destacan en matemáticas y ciencias. Pese a sus buenos resultados en PISA, las autoridades educativas de estos países insisten ahora en potenciar las humanidades como una forma de estimular la innovación tecnológica.“La innovación no se reduce a un problema técnico sino que trata de entender la forma en que las personas y la sociedad funcionan, qué necesitan y qué quieren”, escribe Zakaria. “Estados Unidos no liderará el siglo XXI haciendo chips de ordenador más baratos, sino reimaginando constantemente cómo interactúan los ordenadores y otras tecnologías con los seres humanos”.Quien sí veía clara la necesidad de aunar microchips y humanismo era Steve Jobs, fallecido en 2011. “Apple lleva en su ADN la idea de que la tecnología por sí sola no basta, y que es la unión de la tecnología, las artes liberales y las humanidades, lo que arroja resultados que son una bendición”, dijo Jobs en la presentación de un nuevo modelo de iPad.Una buena educación humanística estimula la creatividad, pero también ayuda a pensar y a escribir, dos cualidades que Jeff Bezos busca en sus colaboradores. El fundador de Amazon y nuevo propietario del Washington Post suele pedir a los directivos de su compañía que escriban informes, a menudo de hasta seis páginas. “No hay manera de escribir un informe de seis páginas, que esté bien estructurado, si no piensas con claridad”, afirma Bezos.A Mark Zuckerberg, el creador de Facebook, se le presenta muchas veces como un geek que no acabó la carrera. Pero no se suele decir que al final de la secundaria eligió estudiar griego. Ni que en Harvard compaginó los estudios en ciencias de la computación con los de psicología. De ahí que afirme que la red social que ha creado “tiene tanto de psicología y sociología como de tecnología”.Es cierto, concluye Zakaria, que las profesiones del futuro requerirán formación en competencias tecnológicas. Pero, al final, “las habilidades más valiosas serán aquellas que son propiamente humanas, las que no puede sustituir un ordenador”.El Diario Exterior – Madrid