Fundación: Timoteo Misión holandesa ayuda a niños desamparados

GRUPO. Desde muy pequeños hasta los 17 años, el albergue acoge a 25 niños y adolescentes con problemas sociales.GRUPO. Desde muy pequeños hasta los 17 años, el albergue acoge a 25 niños y adolescentes con problemas sociales.

La Misión Timoteo nació bajo la solidaridad de Dick y Theresa Altena (matrimonio holandés) en 1992. El propósito era albergar a niños cuyos padres estaban cumpliendo condena en el régimen penitenciario, ahora, “los brazos” se abrieron a niños con problemas de diversos problemas sociales.

Este albergue está ubicado en la avenida Final Cumavi y tiene dos hectáreas de terreno el cual comparte con un vivero privado; Tulipán. Esta convivencia entre la Misión y el vivero hacen que el entorno de la aldea infantil sea más agradable y “natural”.Según indica José Miguel Rebollo, director del albergue, hay 25 niños que habitan en este predio, distribuidos en 4 cabañas con una tutora en cada una. A esto es lo que Rebollo llama “modelo familiar”.

Esta institución se mantiene mediante donaciones,  se trata de apadrinamientos donde ciudadanos holandeses aportan por la educación de un niño de la aldea.Jorge Montoya, director ejecutivo de la fundación, explicó que la frecuencia de donaciones ha bajado considerablemente y que esta situación afecta a las metas como institución benéfica.También explicó que reciben un estipendio de la Gobernación departamental, sin embargo esto tan solo alcanza a cubrir los servicios básicos y de alimentación.



“El aporte viene a Bolivia una vez al mes desde Holanda. La Gobernación nos ayuda con los gastos de material escolar, beca alimenticia y de limpieza, tienen un monto asignado por día”, dijo Montoya,

“La misión Timoteo debería tener 10 niños por casa, pero no tenemos el personal suficiente para atenderlos a todos. La prioridad es tener más dinero. Hay que cubrir lo que necesitamos actualmente antes de pensar en traer a más niños”, manifestó.Ante esta disyuntiva, el director comentó que se está gestionando la apertura de una cafetería para generar recursos propios.

Los encargados de esta aldea indicaron que están abiertos a recibir cualquier tipo de ayuda o donación, desde víveres hasta servicios profesionales, ya que según comentó Montoya, hace un mes atrás requerían de un albañil pero no contaban con el presupuesto.“No estamos cerrados a solamente donación de pan o eventos de caridad”, dijo.

VIVIENDO ENTRE PLANTAS.La Misión Timoteo comparte sus predios con el vivero Tulipán, que a cambio del terreno cedido mantienen limpias y custodiadas las dos hectáreas.Rebollo adelantó que se está planificando que los niños puedan aprender sobre cultivo de estas plantas exóticas que hay en los predios. Por el momento, esta simbiosis brinda un jardín entre las cuatro cabañas donde habitan los 25 niños.

Fuente: La Estrella del Oriente