Panamá acepta unirse al acuerdo de intercambio de información fiscal

El secretario general de la OCDE anuncia la decisión y pide actuar también contra los técnicos que facilitan la evasión

Ángel Gurría, segundo por la izquierda, con los ministros del G5 y Christine Lagarde, este jueves en Washington. REUTERS

Panamá ha aceptado incorporarse al programa de intercambio de información fiscal que auspicia la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) tras el escándalo por los Papeles de Panamá, la macrofiltración de documentos sobre sociedades opacas radicadas en el país. El secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, lo anunció este jueves por la tarde en Washington en la rueda de prensa que los países del G5 convocaron para, precisamente, impulsar un plan que ayude a desvelar quiénes están detrás de las empresas y evitar la evasión fiscal.

“Acabo de recibir información de que va a haber un pronunciamiento, si esto se confirma y lo hacen por completo, serían muy buenas noticias», afirmó Gurría. Antes de comenzar la comparecencia, de hecho, se repartió un documento entre la prensa en el que Panamá figuraba, junto con Bahrein, entre los países que aún no había aceptado formar parte del pacto de intercambio de información.



Lo que propuso este jueves el G5 –grupo que forman España, Alemania, Francia, Italia y Reino Unido- es un sistema por el cual las autoridades tributarias de cada país se informen las unas a las otras de forma automática sobre la identidad de los propietarios reales de las sociedades, estructuras fiduciarias (trust) o sociedades instrumentales offshore, es decir, con domicilio fiscal en un país en el que, en realidad, no desarrollan ninguna actividad y que normalmente buscan el marco fiscal más favorable.

La imagen de la rueda de prensa sirvió de reflejo de lo extendida que es la práctica de ingeniería fiscal –legal o ilegal- que busca evitar al fisco. De los cinco ministros que participaron, dos de ellos, el español Luis de Guindos y el británico George Osborne, tenían a miembros de su Gobierno salpicados por los Papeles de Panamá.

El primer ministro David Cameron ha reconocido que se benefició del fondo de inversión que dirigía su padre en un paraíso fiscal, según se ha conocido a través de esa filtración masiva de documentos de un despacho de abogados en Panamá. Por su parte, el ministro español de Industria, José Manuel Soria, figuró como administrador de una sociedad radicada en el paraíso fiscal de Jersey hasta 2002, cuando era alcalde de Las Palmas de Gran Canaria.

“Las palabras de condena o malestar social no recolectan ni un dólar en ingresos fiscales o lleva a los criminales a la cárcel”, lamentó Osborne, y agregó que lo que busca el G5 “es que esta propuesta sea adoptada a nivel global”. Guindos, por su parte, resaltó que es hora de dar «una respuesta integral» y confió en que el uso compartido de información resulte “clave para alcanzar la plena transparencia».

Esta medida se enmarca en los intentos del G20 desde 2009 para erradicar el secreto bancario y lograr un marco global de intercambio de información automática de impida la evasión fiscal. Gurría instó a actuar también, no solo contra las firmas que evaden impuestos, sino contra los técnicos, como los despachos de abogados, «que hacen posible el uso de esos vacíos legales» para esquivar al fisco.

Fuente: elpais.com