SIP reconoce avances y retrocesos de la libertad de expresión en las Américas

KNIGHTGiovana SánchezLa reunión de medio año de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), que tuvo lugar del 8 al 11 de abril en Punta Cana (República Dominicana), concluyó sus discusiones con la renovación de su apoyo a la libertad de prensa y la condena a la continua violencia que sufren los periodistas en el continente.El encuentro reunió a más de 280 directores de medios y periodistas de la región. Como resultado de la reunión, la asociación produjo un texto final que menciona los avances relacionados con la impunidad y la libertad de prensa en Argentina (el final de la agresión contra la prensa independiente), Cuba (mejora en el tratamiento a la prensa internacional), Paraguay (extradición del presunto autor intelectual del asesinato del periodista Pablo Medina) y República Dominicana (eliminación parcial de la difamación penal).El presidente de la Knight Foundation, Alberto Ibargüen, recibió el Gran Premio Chapultepec 2016 durante la reunión de mitad de año de la SIP.El texto también puso de relieve los desafíos en la lucha contra la impunidad y la continua violencia contra los periodistas, especialmente en los seis países en donde se registraron los 12 asesinatos de periodistas desde la 71º Asamblea General de la SIP que tuvo lugar en octubre de 2015. Para ese momento, cuatro periodistas habían sido asesinados en México, otros cuatro en Brasil, uno en Colombia, uno en El Salvador, uno Venezuela y uno en Guatemala.La asociación agregó que en México “hay un alarmante aumento de actos violentos contra las periodistas mujeres (84 casos [durante 2015, de acuerdo con Artículo 19 México]) que van desde hostigamiento y acoso sexual hasta desprestigio en las redes sociales”.La SIP adoptó resoluciones separadas condenando los asesinatos y exigió a los gobiernos tomar acciones pertinentes para investigar y enjuiciar los crímenes.El texto final también menciona caso de “censura, restricciones, presiones y amenazas contra medios de comunicación, sus dueños o sus periodistas” en países como Bolivia, Cuba, Ecuador, El Salvador y México. Acciones policiales, presiones, amenazas por parte del narcotráfico o delincuencia organizada fueron reportados en República Dominicana, El Salvador, Ecuador y Paraguay.En la reunión, Danilo Medina, presidente de República Dominicana, firmó la Declaración de Chapultepec prometiendo cumplir con el decálogo de principios de libertad de expresión y de prensa, de acuerdo con El Nacional.Adoptada en 1994, la Declaración de Chapultepec hace hincapié en los principios que se consideran necesarios para la libertad de expresión y de prensa con el fin de mantener una sociedad democrática.Alberto Ibargüen, presidente de la Fundación Knight y exeditor de The Miami Herald y El Nuevo Herald, recibió el Gran Premio Chapultepec 2016.Ibargüen ha estado involucrado con la SIP desde que comenzó como editor en The Herald. También lanzó la primera campaña de la SIP contra la impunidad en los crímenes contra periodistas.Ibargüen dijo a los asistentes que cuando se firmó la Declaración de Chapultepec, la gente no podía prever “que surgiera una nueva y diferente guerra contra el periodismo, el periodista y la libre expresión, una guerra cuyos protagonistas no son de gobierno sino son intereses comerciales como el narcotraficante o ideológicos como suelen ser los terroristas y en cual el objetivo no es silenciar al periodista sino usar el asesinato de un periodista como arma en una guerra propagandística, utilizando medios y tecnología del momento para diseminar sus atrocidades sin necesidad ni de ningún Estado ni de la prensa”, informó ElSalvador.comA la vista de estas amenazas, instó a los asistentes a luchar por la libertad de expresión, encontrar un modelo de negocio sostenible y permanecer unidos, de acuerdo con este portal.Luis Almagro, secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), también habló sobre la importancia del esfuerzo colectivo en la lucha por la libertad de expresión en el continente.“La historia de libertad de expresión y el pluralismo en América Latina no es lineal. Es una historia de acelerador y freno”, dijo Almagro. “Todos nosotros: organismos internacionales como la OEA, la sociedad civil, los gobiernos, la gente que se expresa en las calles para protestar o a través de las redes sociales, los periodistas que arriesgan su vida a diario lamentablemente en el continente, los propietarios de medios; todos tenemos un papel que cumplir para asegurar que la libertad de expresión y el pluralismo predominen sobre intereses particulares”.Periodismo en las Américas