La revancha del vinteño

Motos. En esta edición fue sacado por la organización en la etapa nueve, aún cuando alegó que podía continuar la carrera. Danny Nogales ya está listo para su segunda Odisea.



Le tocó bailar con la más fea en 2016. El vinteño Danny Nogales participará de su segundo Dakar, otra vez en la etapa Maratón, la más dura de la competencia. Será su propio psicólogo, su apoyo, su Dios, su todo, ya que en este tipo de modalidad no contará con asistencia alguna, salvo la propia. Está mejor preparado; cambió la moto Honda por una KTM, una máquina de punta especial para este tipo de pruebas. «Voy a terminar la carrera», señaló Nogales, quien luego de tres días de viaje, arribará en esta jornada a tierras paraguayas. No se mezquinó nada. Invirtió alrededor de 100 mil dólares para tener las mínimas condiciones de un piloto dakariano. La primera experiencia no fue buena y le quedó un sabor amargo: había llegado de último y de madrugada en la etapa 8 de la prueba, no había dormido casi nada, además de preparar su moto para la etapa 9. Partió junto a los demás pilotos, no obstante, la organización lo recogió en un helicóptero y lo retiró de la carrera alegando «por su salud». Fin de la Odisea pero un impulso para esta edición.



Lo que piensa del Dakar 2017

«El Dakar es el límite de toda carrera de motos (…) Correr en Bolivia y ante mi gente, será coronar un sueño. La hospitalidad, la cordialidad del público hacia los corredores es algo único y allí, radica la razón de que uno haga todos los sacrificios necesarios para correr, aún cuando a veces el apoyo que se consigue, no sea el que uno quisiera. Intentaré, además, sacar provecho de correr en las alturas bolivianas, un obstáculo difícil de superar para muchos competidores».

José Carlos Acosta [email protected]
Fuente: eldia.com.bo