Límites a la producción

carlos-mirandaCarlos Miranda PachecoArabia Saudita, liderando las 14 naciones de OPEP, está empeñada en lograr una limitación a la producción anual de petróleo para poder estabilizar sus precios en el mercado. En la reunión de Argelia sobre energía, en septiembre pasado, la OPEP informó que pretende reducir su producción para el próximo futuro a 32,5 millones de barriles por día. Como se distribuye la reducción de producción entre cada uno de los 14 integrantes, tenía que ser aprobada en la reunión de Ministros de la OPEP del 30 de noviembre, en la sede de la organización, en Viena.Rusia, acompañada de otros productores No OPEP, importantes como Azerbaiyán y Kazajistán, también concordaba con la posición saudita, con la diferencia de que en vez de reducir la producción, planteaba el congelar a los volúmenes de octubre pasado.Aún dentro de la OPEP existían diferencias importantes. Irán mantenía su posición de que habiendo sido objeto de un bloqueo internacional estuvo fuera del mercado internacional del petróleo. Ahora que el bloqueo ha sido levantado, concuerda con el programa de reducción de producción para estabilizar el mercado, pero pide que se le sea aplicado una vez que llegue a los 4 mbp de producción. Irak también manifestaba que, estando en guerra contra el Estado Islámico, no consideraba justo que se debiera hacer reducciones a su producción de petróleo.Por estas diferencias, se ha llegado a la reunión de la OPEP con un clima muy tensionado entre países. Las pretensiones de Irán e Irak significan que el productor con mayor reducción sería Arabia Saudita. Asimismo, para Arabia Saudita la pretensión rusa de no bajar producción, sino más bien congelar producciones, representa ceder mercados a Rusia y a sus acompañantes. Rusia mantenía que sus planes de incremento de producción son de tal naturaleza que un congelamiento actual equivaldría a una reducción de producción de 300 mil bpd.Por el tono al que habrían llegado las discusiones y las diferencias, la mayoría de los expertos estimaban que en la reunión de Viena no se llegaría a acuerdos entre los países de OPEP, ni con los productores No OPEP.Pero, ante la sorpresa de expertos y del mercado internacional, en la reunión del 30 de noviembre se acordó: 1. Que los países OPEP inicien un programa de reducción de producción para que, a partir de enero del año próximo, se llegue a 32,5 millones bpd. 2. Que se respete la posición de Irán, Libia y Nigeria, que podrían mantener su nivel actual, y, en algunos casos, incrementarlos. 3. Rusia iniciará un programa de reducción de 300 mil bpd a partir del próximo año. 4. Todos los países asistentes a la reunión de Viena se comprometieron a trabajar juntos para conseguir ese objetivo. El mercado reaccionó inmediatamente a los acuerdos de Viena. Los petróleos Brent y WTI subieron de cotización a los 10 minutos después de haberse dado a conocer los acuerdos.Por otro lado, lo acordado en Viena significa el fin de la estrategia saudita de bajar el precio del petróleo a niveles que hacían la explotación de shale oil no rentable. Como resultado de la difusión de los acuerdos, la inversión en explotación de shale oil está subiendo espectacularmente.Finalmente, los acuerdos de la OPEP en Viena son prácticamente históricos. Es la primera vez que el cártel se pone de acuerdo con países no miembros. Adicionalmente, se estima que los posibles precios más elevados de 2017 influyan en la planificación de China, que hará necesario se reactive, a fin de compensar facturas mayores por energía. Esta posible reacción de la economía china requeriría más importaciones de materias primas de los países en desarrollo. En gran síntesis: mejores precios en el mercado del petróleo podrían ocasionar una reactivación de la economía mundial.¿Pero cómo afectan a nuestra vida diaria estos grandiosos planes y reuniones al otro lado de los mares? Nos afectan poco y mucho. Somos un país inexistente en producción de petróleo; por tanto, sus precios no nos conciernen. Pero, de acuerdo con los contratos de exportación que tenemos con Brasil y Argentina, los precios de los derivados del petrolero, el WTI, fijan los precios de nuestro gas de exportación; por tanto, el precio del petróleo WTI que se define en Viena es de gran importancia para nosotros.Página Siete – La Paz