Dustin Hoffman se enfrenta a tres nuevas acusaciones de acoso sexual

Varias mujeres, incluyendo una menor, han acusado al actor en la última semana.

Dustin Hoffman se enfrenta a nuevas acusaciones de acoso sexual, incluida la de una menor

Desde que el pasado mes de noviembre una mujer acusara a Dustin Hoffman de acoso sexual durante el rodaje de una película cuando ella tenía 17 años, el protagonismo del actor en el debate generalizado en Hollywood sobre víctimas de acoso se había diluido. La enorme cantidad de casos que habían acaparado titulares en los medios de comunicación hicieron más difícil centrar la atención en él, sobre todo con nombres como los de Kevin Spacey tan presentes en las portadas. Pero después de protagonizar una tensa discusión con el presentador británico John Oliver tras la proyección de uno de sus clásicos la semana pasada, los focos han vuelto a enfocar a Hoffman y no parece que vayan a volver a apartarse dentro de poco.

Al polémico encontronazo con Oliver le siguió la acusación de la actriz Kathryn Rossetter, que el pasado viernes alegó en The Hollywood Reporter que Hoffman la había agredido sexualmente en los 70. Y este jueves, otras tres mujeres se han sumado a señalar a Hoffman por acoso sexual en casos que siempre se remontan a los años 80. Una de ellas, Cori Thomas, era una estudiante de instituto cuando el actor se quedó completamente desnudo delante de ella.

Thomas cuenta en Variety que por entonces era compañera de clase de Karina Hoffman-Birkhead, hija adoptiva del actor que acabaría siendo dama de honor en su boda. Tras pasar el día con Hoffman por Nueva York, Thomas se quedó a solas con el actor en su apartamento después de que Hoffman-Birkhead se hubiera ido. Thomas todavía tenía que esperar a que su madre la recogiera. Mientras ella estaba sentada en el sofá del salón, Hoffman se dio una ducha y apareció ataviado sólo con una toalla que le rodeaba la cintura. Tras un breve instante, el actor dejó caer la toalla y quedó expuesto ante Thomas, que no supo reaccionar. Hoffman le pidió luego que le masajeara los pies y ella accedió porque no sabía cómo responder. Cuando Hoffman insistió para que Thomas le admirara desnudo, ella intentó ignorarle. El sonido del teléfono finalmente rompió la incomodidad de la situación y Thomas pudo irse del apartamento. Nunca le contó nada a nadie hasta siete años después, cuando confió en amigos cercanos y familiares. Uno de ellos confirma a Variety haber escuchado la historia en algún punto de los años 80. Thomas no se lo contó a su madre, que siempre sospechó que había pasado algo, hasta hace muy poco.Las otras dos mujeres del artículo de Variety, una de ellas anónima, acusan al actor de agresión sexual en dos puntos diferentes de la producción de la película Ishtar (1987). La mujer que no ha querido desvelar su nombre alega que Hoffman primero le introdujo la mano por debajo de la falda para después meterle los dedos durante un trayecto en camioneta con varios miembros del equipo del filme. La mujer añade que Hoffman la manipuló entonces para tener relaciones sexuales con él. Ella dice que para lo que pasó en la camioneta no hubo consentimiento. Sobre si lo hubo en el otro encuentro que tuvo lugar poco después en la casa del actor, la mujer dice que no lo sabe.Melissa Kester, la tercera mujer, salía con un productor musical que estaba trabajando con Hoffman en las canciones de Ishtar en un estudio de Los Ángeles. Kester fue como invitada varias veces para ver cómo trabajaban en la película. Normalmente, Hoffman se encontraba en una sala de grabación conjunta al estudio donde estaba el resto del equipo. A través de la ventana que unía ambas habitaciones, la gente del estudio sólo podía ver a Hoffman de pecho para arriba. Según cuenta Kester, en una de sus visitas, Hoffman pidió que ella le acompañara en la sala de grabación porque se aburría. Al principio, Kester creía estar ayudando a Hoffman a mejorar su interpretación vocal y que el actor sólo estaba flirteando con un tono amigable correspondido por todos los presentes, incluyendo su novio. Pero llegado un punto de una de las canciones, Hoffman aprovechó para meterle mano a Kester por debajo de los pantalones e introducir sus dedos en ella durante 15 o 20 segundos. Kester no supo cómo reaccionar y dejó que Hoffman terminara su canción sin decir nada, consciente de que cualquier reacción podría llamar la atención de su novio o del equipo que estaba al otro lado de la ventana, incapaces de ver qué estaba sucediendo realmente.Poco después de que ocurriera, Kester le confió la historia a una amiga sin mencionar hasta qué punto Hoffman se aprovechó de ella. Esa persona confirma el relato a Variety. Días después del incidente, Hoffman intentó contactar con Kester hasta en dos ocasiones, hasta que ella le dijo que dejara de llamarla. Nunca más supo de él.Los relatos de cuatro mujeres en la última semana, sumados a las historias que contaron Anna Graham Hunter y Wendy Riss Gatsiounis a primeros de noviembre, añaden más dudas en torno a Hoffman, uno de los actores más reputados de Hollywood con dos Oscars en su historial. Respecto a la respuesta que el actor ha tenido al respecto de estas últimas alegaciones, su abogado es el único que ha contestado a Variety, diciendo las acusaciones son sólo «difamaciones falsas». Por ahora, en eso queda.Fuente: revistavanityfair.es