El cardenal se queda en soledad entre tantas sotanas

Toribio Ticona Porco tiene una relación distante con los jerarcas católicos. Se reúnen poco desde que hubo una divergencia entre el prelado y los obispos 

Iván Paredes Tamayo



Vive una especie de soledad acompañada. El cardenal Toribio Ticona Porco puede que se sienta solo en medio de un conglomerado de sotanas por las declaraciones que emitió y por su pasado teñido de lucha política de izquierda. Analistas ven que las divergencias entre el purpurado –nombrado por el papa Francisco– y los jerarcas católicos son notorias por la posición que asumió Ticona Porco al declarar su amistad y afinidad con Evo Morales, pero además al desentenderse sobre el referendo del 21 de febrero de 2016.       

Ludwig Valverde es el presidente del Colegio de Politólogos de La Paz. El experto no duda al responder que existe una discrepancia entre el cardenal Ticona y la cúpula religiosa, aunque remarca que esta divergencia no afecta la relación cordial y laboral que tienen los obispos. “Hay dos momentos desde la designación del cardenal. El primero se da por el impacto de que un sacerdote de origen humilde haya llegado a ser cardenal, pero a eso se suma el otro momento, cuando el cardenal ya emite pronunciamientos de carácter político”, opina Valverde. 

El analista añade que el pasado de Ticona –ligado a la política de izquierda y a la dirigencia sindical– puede ser un punto de discordia en la relación con la cúpula de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB). Y a eso se puede incluir, dice, la forma en que mostró su amistad con Evo Morales, el presidente criticado por los jerarcas católicos.    

El ida y vuelta de Ticona

Ticona gambeteó con una serie de declaraciones. Primero, recién designado, cuestionó la construcción de la Casa Grande del Pueblo, el nuevo Palacio de Gobierno. Días más tarde se desdijo y apoyó la edificación. Luego prefirió desentenderse de los resultados del 21-F. En esos dos aspectos la Iglesia católica mostró su posición y las dos son en contra del Gobierno. Y a eso se añade la amistad que el prelado tiene con el mandatario, algo que Ticona lo anuncia cuando quiere. 

Ante eso, la CEB expresó que Ticona no es el vocero de la Iglesia católica y que es parte de los obispos que firman las posiciones contra el Gobierno. Así, desautorizaron al cardenal. El analista Carlos Toranzo ve que el Movimiento Al Socialismo (MAS) intenta incluir al cardenal Ticona en su bando con declaraciones de respaldo político. Y eso puede afectar –considera– la relación entre el prelado y los obispos de la CEB, porque el oficialismo buscaría la división de la Iglesia católica. “Los emisarios del régimen pusieron su cuota política en este asunto. El cardenal Ticona es una autoridad religiosa y su trabajo se limita al bienestar social de la población. Pero que Evo Morales quiera llevarlo al Vaticano ya muestra que el MAS quiere coquetearlo para sus fines políticos”, considera Toranzo. El oficialismo expresa su respaldo el cardenal desde que aplaudió la construcción de la Casa Grande del Pueblo y porque no emitió criterio sobre el referendo del 21-F. El jefe de bancada del MAS en Diputados, David Ramos, destaca el trabajo de Ticona en su pasado en las regiones rurales de La Paz y Potosí. “Ahora tenemos un cardenal de origen indio, humilde, como nuestro presidente. Eso molesta a los jerarcas de la Iglesia católica y por eso lo desautorizan. Sabemos que se podrá trabajar en conjunto con el hermano cardenal”, remarca Ramos. El politólogo Romano Paz añade su percepción. Cree que el oficialismo se equivoca al emitir respaldos políticos al cardenal y señala que el MAS busca dividir a la Iglesia católica. “Lo político es una cosa y eso está bien para los partidos. El MAS tanto criticó porque creía que la Iglesia se metía en temas políticos y ahora comete ese error. Pero veo que la idea es dividir a la Iglesia y por eso actúa de esa manera”, considera el experto.

El senador opositor Edwin Rodríguez cree que el cardenal debe trabajar al lado de la dirigencia de la CEB y unirse a los pronunciamientos que emiten los jerarcas contra la reelección de Evo Morales.  

El MAS y la Iglesia

Fricción por la reelecciónLa Iglesia católica expresó su posición respecto al referendo del 21 de febrero de 2016. Dijo que el MAS debe respetar el voto del pueblo, que negó una nueva reelección de Morales. El oficialismo salió a criticar a los jerarcas católicos y les pidió no ingresar al terreno político.  Contra la Casa GrandeLa Iglesia también emitió un comunicado criticando la construcción de la Casa Grande del Pueblo, el nuevo Palacio de Gobierno. Pidió mayor inversión en salud y educación en vez de gastos secundarios. Evo y la IglesiaEvo Morales mantuvo una relación distante con la Iglesia católica, incluso llegó a acusaciones y amenazas de crear una nueva Iglesia. Eso cambió desde que el papa Francisco lidera a los creyentes católicos. 

Fuente: eldeber.com.bo