Gobierno aguarda informe final sobre el ‘jet abandonado’; indagan a la tripulación

Se descartó el microaspirado de la aeronave debido a una pesquisa previa hecha por la fuerza antinarcóticos cuando la nave arribó a Bolivia en abril de 2017. Solo resta un informe de México referido a los antecedentes de los tripulantes.

El jet Super Mid-Size Gulfstream III. Foto: http://www.opinion.com.bo/
El jet Super Mid-Size Gulfstream III. Foto: http://www.opinion.com.bo/
  

El Ministerio de Gobierno aguarda un informe final sobre el “jet abandonado” al que le restan los antecedentes internacionales de la tripulación. Al momento solo falta el reporte de México y los datos recabados hasta la fecha dan cuenta que el personal no tiene ninguno. Se descartó el microaspirado de la aeronave debido a una pesquisa previa hecha por la fuerza antinarcóticos.

“Otro tema que estamos esperando para tener un informe final es si los tripulantes tienen un antecedente o no”, indicó el ministro de Gobierno, Carlos Romero, en una rueda de prensa improvisada en Palacio de Gobierno al término del habitual gabinete ministerial de los miércoles.



Explicó que a la fecha, con base en la información internacional ya recabada, los operadores del avión “no tienen ningún tipo de antecedentes”, aunque “está pendiente una información que hemos pedido a México y que espero que nos den curso en las siguientes horas”

La aeronave arribó el 7 de abril de 2017, de acuerdo con registros de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) y un año después se puso a conocimiento de la Aduana Nacional de Bolivia (ANB).

Fue esta última entidad la que verificó que no contaba con ninguna autorización, por lo que se la calificó como contrabando por no regularizar su estadía en el país y, bajo esa tipificación y sobre la base de normativas nacionales e internacionales, se la decomisó.

La presidenta de la ANB, Marlene Ardaya, ratificó la semana pasada que el avión “no se va a devolver (…) la posición de la administración aduanera es clara: es una avión de contrabando”

Como parte de las indagaciones en este caso, se había evaluado efectuar un microaspirado a la aeronave para establecer si se usó para el tráfico de sustancias ilícitas. Esa tarea no se cumplió por negativa de la Fiscalía, que no consideró necesaria una pericia complementaria por una inspección que hizo la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) cuando piso suelo boliviano.

“El microaspirado no ha sido admitido por el Ministerio Público bajo el argumento de que no ha sido abierta una casusa especifica en ese campo y tomando en cuenta que por protocolo la FELCN ha hecho la revisión de la aeronave en el momento que ha arribado al país”, detalló Romero.

Hasta el 13 de diciembre de 2017 los dueños la aeronave, con matrícula N557 JK, mantuvieron contacto con Aasana y pagaron Bs 75.371 por costo de pernocte. De esa fecha hasta hoy perdieron contacto y la deuda acumulada ahora asciende a poco más de Bs 63.000. (18/07/2018)

La Razón Digital / M. Chávez, R. Ariñez / La Paz