Romero plantea contrainteligencia para hacer frente a corrupción en la Policía

LA PAZ |

El Gobierno nacional dio el mandato al nuevo comandante de la Policía Boliviana, general Yuri Vladimir Calderón Mariscal, de erradicar la corrupción que afecta a esa institución.



Plantea tres mecanismos para esa tarea: repuesta y mecanismos de control cruzado, dispositivos de contrainteligencia y dispositivos de reacción inmediata.

Calderón fue posesionado la noche de ayer por el presidente en ejercicio, Carlos Borda, en reemplazo del general Rómulo Delgado, quien asumió ese cargo hace poco más de tres meses. El acto se realizó en la Casa Grande del Pueblo.

En la posesión, el ministro de Gobierno, Carlos Romero, resaltó que la nueva autoridad tiene el reto de sanear a la institución que está afectada por la corrupción, la cual arrastra hace muchos años, pero que en los últimos meses se visibilizaron con más fuerza.

«Necesitamos respuestas y mecanismos de control cruzado, dispositivos de contrainteligencia, dispositivos de reacción inmediata porque cuando un policía delinque está ofendiendo a una de las instituciones fundamentales del Estado, está deshonrando el Verde Olivo que debe ser sagrado«, enfatizó Romero.

El primer trimestre del año hubo cuestionamientos a la institución policial por distintos hechos registrados en el país, donde aparecieron involucrados varios uniformados.

Entre estas denuncias destacan, hechos de corrupción en la Academia Nacional de Policía (Anapol), denuncias de violación en carceletas de Beni, cobros ilícitos para destinos y vinculaciones en contrabando en Oruro, además de denuncias por robo en Potosí y otros.

Romero aseguró que la lucha contra delincuencia y la corrupción en esa institución permitirá posicionar al país como uno de los más seguros del continente.

Resaltó que este desafío se da en un momento en que la Policía experimentará un salto cualitativo con la implementación del programa BOl 110, que se trata de un moderno sistema tecnológico.

«Es la principal tarea, un ejercicio de mando que permita cumplir las tareas institucionales, pero también que permita neutralizar y eliminar las acciones de corrupción en nuestra institución policial», afirmó Romero.

Este mandato fue reforzado por Borda, quien afirmó que las Policía Boliviana necesita dar una señal para erradicar la corrupción que aqueja a la misma. Asimismo, exhortó al Comandante dar señales de transformación y la lucha inclaudicable contra la delincuencia.

«Necesitamos dar una señal fuerte al pueblo boliviano, al cual nos debemos, de un cambio cuanti-cualitativo y dialéctico que emerja precisamente de la voluntad de los mismos policías para erradicar algunos actos de corrupción que están empañando la noble reputación de la Policía; una señal fuerte para erradicar a estos malos policías que no han entendido que la función que desempeñan es vital y ante todo tener principio ético moral», dijo Borda.

Por su parte, el flamante Comandante se comprometió a cumplir los desafíos planteados relacionados con el fortalecimiento de la seguridad ciudadana y la transformación institucional de la Policía.

«Estoy convencido que nuestra tarea primordial es luchar incansablemente contra el crimen, el delito y la corrupción en todas sus manifestaciones (…) Para ello, pido a cada uno de mis hermanos camaradas que nuestro accionar tenga un compromiso con la historia de este nuevo Estado», afirmó.

Calderón, quien hasta ayer fungía como director nacional de instrucción y enseñanza de la Universidad Policial (Unipol), pidió a las autoridades un trabajo conjunto para lograr los retos y desafíos planteados.

«Estas acciones, bajo los lineamientos y las políticas institucionales de trabajo coordinado y responsabilidad compartida, nos comprometen y permitirán seguir trabajando intensamente y sin descanso para alcanzar esa meta anhelada de ser la institución más confiable, transparente y respetuosa de la ley y de las garantías constitucionales», resaltó Calderón.

Por otro lado, Romero descartó que el cambio del alto mando policial se deba a denuncias contra la gestión de Delgado y reconoció su labor.

«No hemos recibido ninguna denuncia de irregularidades o corrupción respecto a la gestión del general Delgado, esta aclaración la quiero precisar para evitar cualquier tipo de especulaciones», afirmó Romero.

Fuente: lostiempos.com