Usan brechas y líneas negras para combatir los incendios en la Chiquitania boliviana

Por recomendaciones de los expertos, en quemas de grandes magnitudes se emplea maquinaria pesada para aplicar nuevas técnicas de control del fuego 

Así ardía el monte la mañana de ayer, en la zona de Limoncito, de Roboré. Por la tarde, una cuadrilla ingresó para hacer trabajos de mitigación

 

Siguiendo las recomendaciones de los expertos enviados por EEUU (Usaid/OFDA), se ha decidido cambiar la estrategia de combate al fuego, introduciendo el uso de maquinaria pesada para abrir brechas cortafuego y aplicando técnicas de control del fuego, como la conocida con el nombre de líneas negras, que es una especie de fuego controlado, que se emplea en incendios de grandes magnitudes.Expertos estadounidenses llegaron a la conclusión de que en la Chiquitania se están dando incendios forestales de sexta generación, que resultan ser muy peligrosos para combartirlos cuerpo a cuerpo, por lo que se requiere el uso de maquinarias para controlar su avance.“Desde ayer (por el miércoles) se decidió un cambio de estrategia, siguiendo las recomendaciones de personal de Usaid y de bomberos expertos. Se ha decidido usar maquinaria pesada y no operar cuerpo a cuerpo en incendios de grandes magnitudes.



Se ha empezado a trabajar con dos orugas”, informó Jorge Adriá- zola, responsable de Control de Incendios Forestales de la Gobernación, al referirse al trabajo que se comenzó a hacer en Roboré.Adriázola se refería a la técnica empleada el miércoles cuando el fuego amenazaba la comunidad de Limoncito y se puso a trabajar dos orugas con las que se abrió brechas de cinco metros y se logró contener el avance del fuego.Similar trabajo se realizó ayer en el lado sur de la localidad de Roboré, a unos cinco kilómetros de Urucú, donde el fuego avanzaba peligrosamente a la zona poblada, según informó Carlos Ragone, secretario general de la Alcaldía de Roboré, que operaba en la zona.Según Adriázola, además se ha dado la instrucción de que los bomberos, luego de hacer las brechas cortafuego, vean si es necesario ensanchar más las líneas de defensa utilizando la técnica de líneas negras, “que consiste en quemar una franja de unos 100 metros y luego apagarla para que cuando el incendio llegue se pueda resistir el golpe de las llamas”.

Adriázola indicó que está técnica solo puede ser aplicada por bomberos capacitados y experimentados. Hasta Roboré se han desplegado una decena de bomberos con la experticia necesaria, que serán los que guiarán al resto de los brigadistas a la hora de aplicar este método.Incendios activosAyer por la mañana había 58 incendios activos en 12 municipios cruceños y la preocupación estaba centrada en Roboré, San Ignacio, San Matías y Concepción, donde los incendios son de magnitud. La lluvia que cayó por la tarde en Concepción trajo alivio a los pobladores y se esperaba los reportes de las distintas zonas para saber si lograron aplacar los incendios.Desde Roboré, el director de la Unidad de Conservación del Patrimonio Natural de Tucabaca, Richard Rivas, informó de que seis incendios siguen preocupando; uno en la serranía de Santiago; otro en la zona de Santa Rosa (valle de Tucabaca) y tres en la parte sur de Roboré, es decir, cerca de las comunidades de San Pedro y Limoncito.En estas últimas zonas, lo más crítico se vivió la noche del miércoles, aunque no fue necesaria la evacuación de familias, como se dijo extraoficialmente. Sobre los incendios forestales, Adriázola refirió que los reportes oficiales dan cuenta que en San Matías el fuego consumió diez viviendas: una en la comunidad de Ascensión de Frontera, dos en la comunidad de Candelaria y siete en Minador.EL DEBER / Deisy Ortiz D.