Migrantes del país asiático cuentan que en sus negocios bajaron las ventas y piden no ser discriminados. Autoridades recalcan que el virus no llega con las mercaderías.
Fuente: paginasiete.bo
Verónica Zapana S. / La Paz
Cada día que pasa, nos asustamos más. El coronavirus está provocando que la gente boliviana se aleje y desconfíe de nosotros. Antes teníamos buena clientela en la chifa, pero ahora la gente tiene miedo hasta de lo que preparamos. Ya estamos viviendo rechazo sin razón, contó un ciudadano chino que radica en La Paz.
El dueño de la chifa -que prefirió guardar su identidad y no identificar su negocio- dijo que esta situación se incrementa cada día.
Cuando surgió la enfermedad nadie le daba importancia, pero ahora todos hablan de eso. En la calle sólo escucho hablar del tema. Cuando me ven y estoy cerca, la gente comienza a murmurar, relató.
Él nació en China. Visitó Bolivia, se enamoró y decidió quedarse en el país. Vive en la ciudad de La Paz desde hace más de 15 años . Yo tengo mi familia aquí, dijo orgulloso; pero su sonrisa desapareció segundos después cuando comentó con amargura: Acá no se dio un diagnóstico de un caso positivo, pero la gente cree que por ser asiático uno es portador del virus.
No es la única víctima de la desinformación y el miedo. Cinco ciudadanos chinos -entre propietarios de chifas y comerciantes- contaron a Página Siete que se sienten discriminados por la gente boliviana desde que comenzó la difusión de la información sobre esta enfermedad. Indicaron que incluso fueron víctimas de insultos por esa causa.
¿Qué hacen aquí?, ¿por qué no se van a su país?, ¿con qué cosas prepararán su comida?, me dijo una mujer cuando me vio con barbijo en la puerta de la chifa, relató uno de los entrevistados.
Según la psicóloga Marynés Salazar, es importante que entre toda la población boliviana se genere conciencia sobre esta temática en diferentes espacios, ya sean educativos, familiares, laborales, grupos de amigos y en los medios de comunicación. Hay que generar conciencia en las personas sobre los actos y las conductas xenofóbicas en las que pueden llegar a caer, dijo.
La experta explicó que la xenofobia implica el rechazo de la persona extranjera por el hecho de serlo, y el racismo es la concepción de la superioridad de una raza sobre otra bajo parámetros que no son objetivos.
Salazar aseguró que generalmente aparece la xenofobia o el racismo cuando las personas precisan fortalecer aquello que consideran débil en sus vidas. Y eso es falta de información oficial, añadió.
En gran medida, el hecho de manifestar actitudes xenófobas tomando como excusa el coronavirus, devela a una sociedad que no tiene conocimiento suficiente, que tiene actitudes sin ninguna base sustentada en la información real y científica. La xenofobia es prueba de una sociedad que puede caer en la ignorancia, destacó Salazar.
Con una mirada similar, el psicólogo Carlos Velásquez sostuvo que esto sucede por falta de información oficial mientras que en las redes sociales abundan datos erróneos que, lamentablemente, las personas creen sin verificar. Y eso está generando distanciamiento, agregó.
El especialista aseguró que los bolivianos actúan de esa forma por miedo y falta de información seria. Existe temor a la pérdida de la vida , dijo e indicó que por eso actúan a la defensiva.
El sociólogo Eduardo Paz explicó que las redes sociales juegan un papel muy importante para generar pánico en la población. Aseguró que este hecho no sólo ocurre en Bolivia, sino en varias partes del mundo.
Según medios internacionales, en España, Francia, Italia, entre otros país, ya se registraron casos de xenofobia y de discriminación contra los ciudadanos asiáticos.
La gente no puede basarse en rumores. Deben evidenciar la información que reciben sobre esta enfermedad, acotó Paz.
Hace unos días -en la localidad de Uyuni- funcionarios internaron en un hospital a tres japoneses por ser asiáticos y presentar fiebre leve.
La ministra de Comunicación, Isabel Fernández, expresó entonces que no se puede generar xenofobia y malestar a estas personas. Lo último que queremos es eso. Añadió que por eso se trabaja en otorgar una información oportuna y transparente sobre la enfermedad a toda la población.
Según el representante de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Alfonso Tenorio, una persona es sospechosa de tener coronavirus sólo si estuvo en los últimos 14 días en China y si presenta tos y fiebre alta, de lo contrario, no, recalcó.
Los coronavirus son una familia de virus que se descubrieron en la década de los años 60. En diciembre pasado surgió un brote de esta enfermedad en Wuhan (China) y aunque no se conoce el origen, la OMS asegura que la fuente primaria es un animal. El virus -denominado neumonía de Wuhan o 2019-nCoV- se presenta con fiebre, fatiga, tos seca y dificultad para respirar.
El 30 de enero, la OMS declaró la emergencia internacional ante el brote del nuevo coronavirus. Las autoridades informaron que se seguirán los protocolos establecidos, pero que no hay razones para limitar los viajes o el comercio con el gigante asiático.
La enfermedad ya se propagó por más de 15 países de Asia, América del Norte y Europa. Hasta ayer había provocado más de 723 muertes y afectó a más de 30.000 personas, la mayoría en China.
El miércoles, el Gobierno reportó el caso de un boliviano de 18 años que llegó de China y presentó síntomas. Hasta el viernes el joven era sospechoso de portar el virus, según el Sedes. Se confirmó que tiene dengue y ayer se descartó que tenga coronavirus.
Pese a los informes oficiales, los comerciantes asiáticos reportan que sus ventas se redujeron. La gente tiene miedo de comprar nuestros productos. Dicen que pueden estar llegando con el virus, lamentó una mujer de 45 años.
La responsable de la Unidad de Epidemiología del Ministerio de Salud, Carola Valencia, recalcó que el virus no se transporta por mercaderías. El riesgo es cero, puede llegar ropa o cualquier objeto de Asia y eso no representa ningún riesgo, dijo.
Con un poco de optimismo, el dueño de la chifa espera que la gente cambie de actitud y todo vuelva a la normalidad.
Fuente: paginasiete.bo