Transporte público vuelve en El Alto con aglomeraciones y caos

Pasajeros realizaban filas sin respetar el distanciamiento físico. Algunos choferes aceptaron más personas dentro de los vehículos sin respetar protocolos.

Luis Escóbar  / El Alto / La Paz

Un 40% del transporte público de la ciudad de  El Alto reanudó ayer actividades. Lejos de todos los planes, este retorno se caracterizó por  las  aglomeraciones de los vecinos que  buscaban un minibús y   las filas de ciudadanos que no respetaban la distancia física. No fue lo único. Los  choferes no cumplieron los protocolos y  permitieron  el ingreso de más  pasajeros sin respetar  lo establecido, además realizaron  trameajes  de  rutas.



El desorden se registró  en especial en la  avenida 6 de Marzo y en la calle 2, a unos pasos de la Ceja. “Estoy esperando hace más de 30 minutos un minibús para  visitar a mi papá que vive en El Kenko, pero no puedo conseguir un minibús. Ni bien el chofer abre  la puerta, el vehículo se llena”, dijo una de las vecinas.

Los usuarios se aglomeraban en busca de un minibús, otros realizaban  filas para tomar un vehículo del transporte público sin respetar la distancia. Algunos  ciudadanos  no portaban mascarillas o barbijos, varios adultos y   niños caminaban pese a la normativa de la cuarentena dinámica.

El servicio volvió después de que la Federación Andina de Choferes y la Alcaldía llegaran a un acuerdo. Este compromiso permitió reanudar operaciones al 40% del parque automotor que en El Alto suma 11.600 minibuses. Ayer se permitió  la circulación de vehículos con   placas terminadas  en 1-2-3-4, hoy serán las 5-6-7-8, el miércoles 9-0-1-2, el jueves 3-4-5 -6 y el viernes 7-8-9-0.

Los  choferes se comprometieron,  además, a dejar libre los asientos  centrales para evitar el contacto entre los usuarios y separar al conductor de los ciudadanos. Indicaron que usarían barbijos y   guantes, además colocarían  alcohol en gel  y pisos desinfectantes.

Ante la gran demanda y el poco control,  varios choferes permitieron  el uso de todos los asientos,  algunos llevaron pasajeros “parados”. Los conductores volvieron a las malas costumbres y comenzaron a  tramear en algunas  rutas, además no llegaban a sus destinos. No colocaron alcohol en gel en  varios  vehículos.

El dirigente de los transportistas  Víctor Tarqui  calificó la reanudación de las operaciones como positiva. “Definitivamente debo aplaudir a los compañeros, salieron a trabajar  y adecuaron sus carros. Sólo en un 15% hubo fallas. Para mañana (hoy)  el servicio será mejor. Continuaremos  implementando las medidas de bioseguridad”, afirmó.

Tarqui reconoció que los pasajeros se aglomeraron en la avenida 6 de Marzo. Escenas similares se repitieron  en Senkata y El Kenko. “Estos problemas ocurren porque  todavía  no  están operando los interciudades. A partir de ahora  haremos  que el transporte masivo (los micros) entren a esos lugares, también moveremos algunas líneas”, afirmó.

El dirigente reconoció que algunos minibuses no acondicionaron  sus movilidades de acuerdo con los protocolos  e indicó que trabajarán bajo esta modalidad hasta la siguiente semana. Anunció que después conversarán con la Alcaldía la posibilidad de mantener la restricción a cuatro dígitos o subir  a cinco para contar con la  mayor cantidad de minibuses.

El secretario de Movilidad Urbana de la Alcaldía de El Alto, Fernando Flores, dijo que se llevaron adelante controles en toda la urbe,  pero se dio prioridad a  22 sectores conflictivos. “Vimos desde temprano varias ilegalidades, por ejemplo, cargaban los 14 pasajeros. Llegamos e  hicimos respetar las normas de bioseguridad. Verificamos  el uso de barbijos y vimos que muchos usuarios no usan”, dijo.

En el primer día, el funcionario informó que se amonestó de forma verbal a los conductores e indico que fue complicado  retirar las placas. “En las extrancas como el Cruce a Villa Adela se intentó decomisar las placas, pero la misma población lo impidió. Decomisamos un par”, dijo.

Respecto al trameaje, Flores  indicó  que el usuario  permite que el transportista actúe de esa manera. “En las vías principales no se permitió el trameaje, pero en las alternas los choferes aprovecharon para cortar las rutas alternas. Pedimos a los usuarios controlar este aspecto. No podemos colocar  un policía o guardia en cada vehículo”,  sostuvo. Estos hechos ocurrieron en las rutas a Tilata, al cruce de Villa Adela, hacia Kiswaras y a la plaza de la Cruz. Añadió  que  la población incumple también  con la restricción de circulación de acuerdo con el  número de carnet de identidad.

Detienen  161 vehículos que intentaron entrar a La Paz

Hasta ayer al mediodía, efectivos de la Policía detuvieron  161 vehículos que intentaron pasar por siete distintas rutas de  El Alto a La Paz. Los conductores, en su mayoría de minibuses, deberán pagar una multa de 2.000 bolivianos por infringir la cuarentena rígida  en la sede de Gobierno.

“Coordinamos con las Fuerzas Armadas  y la Policía los operativos de control. (…) En Cotahuma retuvimos tres vehículos; en la avenida Max Fernández,   cuatro; en Mallasa, seis;  en La Portada, uno; en el Trébol de la autopista, 105; en la avenida Baptista y Entre Ríos, dos, y en la avenida 9 de Abril, 39. Suman 161 motorizados retenidos”, dijo  el secretario se Movilidad Urbana de la Alcaldía paceña, Ramiro Burgos.

A diferencia de El Alto, La Paz definió  con el transporte reanudar las actividades el siguiente lunes 1 de junio. “Todos intentaron  burlar los controles porque estaban llevando pasajeros (…) Distribuimos a nuestro personal para que no suceda”, añadió Burgos.

Llamó a la reflexión a la ciudadanía. “La población debe tomar conciencia de que los controles no buscan perjudicar la movilidad. Buscamos velar  la salud y seguridad de las familias. Estos vehículos no guardan ninguna condición de bioseguridad y están llevando una cantidad de pasajeros por encima de la autorizada”.

El secretario ejecutivo de la Federación de Choferes Primero   de Mayo, Rubén Sánchez, se reunió con autoridades de la  Alcaldía paceña y al salir mostró la norma con  la que se reiniciará el servicio de transporte público.  “El lunes 1 de junio se permitirán las operaciones  con las medidas de bioseguridad como distanciamiento, limpieza de vehículos,  desinfección con alcohol y agua”, afirmó. Aclaró que las medidas de bioseguridad  son obligatorias,  tanto los conductores como usuarios deben usar barbijos.

Fuente: Pagina Siete Digital