Bolivia: En 70 días hubo 120 denuncias de estupro

La figura penal del estupro está cuestionada. ¿Es posible que una adolescente de 14 años pueda consentir una relación sexual con un hombre mayor o debe considerarse violación?

Andrea Cardona

La naturalización del estupro dificulta la acción contra este delito

Según los datos que apunta la directora nacional de la Fiscalía Especializada en Delitos de Violencia Sexual y en Razón de Género, Pilar Díaz, publicados en la página oficial de la Fiscalía General del Estado, entre el 22 de marzo y el 31 de mayo, es decir en el lapso de 70 días, se registraron 102 denuncias por estupro en Bolivia.



Sin embargo, para algunas especialistas, entre ellas la directora de la Red de Lucha Contra la Violencia, Peky Rubín de Celis; y la directora municipal de Coordinación y Articulación Social, Patricia Paputsakis, esta cifra se minimizó por la cuarentena. Por lo que creen que hay casos que no se denunciaron.

El artículo 309 del Código Penal establece que comete delito de estupro “quien, mediante seducción o engaño, tuviera acceso carnal con persona de uno u otro sexo mayor de 14 y menor de 18 años”. El estupro está sancionado con privación de libertad de tres a seis años de cárcel. Antes de los 14 años se considera violación.

“El estupro es una violación. La Ley estipula que la adolescente va a dar su consentimiento sin tomar en cuenta el contexto. Una menor de edad no puede consentir porque está manipulada, pero así está la ley. A título de cultura se aceptan relaciones entre adultos y menores de edad. En muchos lugares se alienta este tipo de relaciones”, explicó Rubín de Celis.

En los últimos días un caso retumbó en los medios de comunicación. El Ministerio de Justicia presentó una denuncia penal contra el expresidente, Evo Morales, por los presuntos delitos de estupro, abuso sexual, trata y tráfico, entre otros. Las polémicas fotografías que presentan a Morales junto a una menor de edad, a la cual exhibieron en medios de comunicación en medio de una índole política con intenciones visibles de desentrañar al Movimiento Al Socialismo (MAS), confirmaron que la revictimización no está prohibida por el Estado.

Y no es primera vez que se advierte esa situación. La líder feminista de Mujeres Creando, María Galindo, en una publicación el 2018, dijo que el expresidente es una muestra del uso de poder sexual y patriarcal con una retórica sexista en Bolivia y otros países similares.

“Evo Morales nos ofrece en su sexualidad, expuesta como identikit político, un cuadro tan grotesco y decadente como el de sus predecesores: hacer del poder político un lugar desde donde el mayor acto de poder se sintetice en el acceso de posesión sexual de cuanta mujer se le antoje. Cometió con Gabriela Zapata el delito de estupro, cuando ella era menor de edad. Actualmente, con jóvenes integrantes de equipos de fútbol femenino, continúa cometiendo este delito, a cambio de pequeñas prebendas y con una impunidad reforzada. Nadie ya se atreve a denunciarlo”, expresó.

¿Se naturaliza el estupro?

No hace falta que una figura pública como Morales exponga en la agenda de la semana el uso y abuso de poder patriarcal sexual en la cuestionada figura penal de estupro. “¿Cómo podría una menor de 14 años dar un consentimiento cuando se trata de una relación sexual con un hombre de 40?”, cuestionó Rubín de Celis. “En el marco legal sólo se penaliza de tres a seis años”, dijo.

Pero, en Bolivia, ¿se naturaliza el estupro? Se podría afirmar que todos los ciudadanos conocen al menos un caso de este hecho ilegal. Muchos callan, otros cuestionan y otros ni siquiera se escandalizan.

“Por donde vivo, un hombre de 45 años fue detenido porque se metió con una chica de 17 años. Y claro, los vecinos salieron a favor de él porque decían que era buena persona. Dijeron que nunca tuvo malas intenciones y que la chica lo buscaba y cosas así. Después empezaron a pedir que la chica se vaya de la comunidad, porque decían que no era la primera vez que estaba metida en un problema como ese. Pero había una historia de fondo que los vecinos no veían, ella vivía con su madre y su padrastro, y tenían una chichería. Había el rumor de que el padrastro abusaba de ella desde hace años”, contó una fuente confiable.

Pero en una jornada de conversación se pueden conocer varias historias como esta.

“Cuando tenía 14 años, tenía una compañera que salía con un chico de 23. Eran 9 años de diferencia, él ya estaba en la universidad e iba a recogerla en su auto al cole. Los papás de ella sabían que este chico era su novio y le dieron total consentimiento porque entre padres eran amigos. Nadie veía un problema ahí, pero por supuesto que él la manipulaba con todo descaro. Ella seguía teniendo 14 años”, contó otra persona.

Paputsakis argumentó que en la mayoría de los casos son adolescentes que buscan un refugio para escapar de situaciones violentas en sus hogares. No todos los casos de estupro se denuncian, en su mayoría es porque se producen embarazos y los padres de la víctima recién se alertan. El mayor número de estupros se soluciona con tratos entre las partes.

¿El caso de Morales es de trata y tráfico?

El presidente departamental de la Red de Lucha Contra la Trata y Tráfico de Personas, Daniel Siles, explicó que existe una confusión entre los delitos de trata y tráfico de personas. El delito de trata es la captación, traslado y explotación de una persona y tiene 14 finalidades que atenta contra la integridad de las víctimas y el bien jurídico a proteger es la vida de la víctima. En el caso del tráfico de personas, sucede cuando hay la facilitación la salida o entrada ilegal entre un estado y otro. El bien jurídico a proteger es del Estado por que se ha vulnerado las leyes migratorias.

Fuente: elpais.bo