¿Branko a la Alcaldía? “No lo descarto, quiero ver a mi ciudad bonita”

El ministro de Planificación del Desarrollo, Branko Marinkovic dijo que entre las tareas de mediano plazo está la reactivación de Mutún y que redireccionará los recursos desde algunas instituciones a otras áreas que lo requieran

El ministro Branko Marinkovic, hoy en Qué Semana ! de EL DEBER Radio con el director Pedro Rivero y la jefa de Redacción, Mónica Salvatierra

EL DEBER

El ministro de Planificación del Desarrollo, Branko Marinkovic accedió a una entrevista en el programa Qué Semana! que se emitió hoy sábado en EL DEBER Radio para conversar sobre los conflictos sociales, el plan de reactivación económica, su relación con el gobernador de Santa Cruz, Rubén Costas y la candidatura de la presidenta Jeanine Áñez.



– ¿Cuál es el desarrollo que se planifica en la situación económica que se atraviesa? 

La pandemia es uno de los grandes problemas que estamos atravesando, agravada por las protestas del Movimiento Al Socialismo (MAS), algo inconcebible. Ahora, lo que se requiere es reactivar el sector económico del país. Considero que no hay empresa que no haya sido afectada por esto, entonces vamos a tomar medidas para inyectar recursos en la banca y que las empresas puedan reactivarse. Es un mix de cosas bastantes complicadas, no es sencillo, pero vamos a trabajar en ello.

– ¿Cuál es la disponibilidad de recursos?

 No he tenido tiempo todavía de reunirme con las instituciones. Me posesionaron el miércoles y jueves fue feriado, pero la próxima semana veremos la liquidez en entidades que no están utilizando los fondos para redireccionar los recursos donde más se necesiten.

– ¿Estará en la Asamblea, de ser necesario para destrabar los créditos externos?

Por supuesto que sí, hay que gestionarlo, y espero que la comprensión y realidad de lo que estamos viviendo impere.

– Dentro del gabinete ministerial, ¿cuál es el horizonte inmediato que se ve de actuación frente al conflicto?

Somos conscientes de que el MAS está buscando muertos, que busca una salida violenta en la desesperación de Evo Morales de volver al país. Si vemos estas protestas, se dan porque se atrasó un mes las elecciones cuando vivimos en plena pandemia. Imagine que le toque ser jurado de mesa a una persona que es diabética o hipertensa, es evidente que no asistirá. Entonces, se requiere una solución porque es una situación crítica.

Y en lo económico igual es grave, ¿qué hace el que era micrero o taxista y no trabajó durante varios meses? Quizás mucha gente no pueda abrir sus negocios otra vez. Creo que se debe tener un poco de comprensión, es lamentable el bloqueo del dinero en la Asamblea y los bloqueos de carreteras. Son cosas que no deberíamos estar viviendo.

– ¿Cuáles son los mejores y peores escenarios?

Vemos un escenario de violencia gestada por los que bloquean como lo sucedido en Samaipata, desde la creación de la policía sindical, que es una barbaridad porque es como las milicias que quería tener Evo, que tal vez si vuelve o gana Luis Arce seguro las van a impulsar.

– ¿Cuál será el plan de negocios para reactivar la economía del pueblo y no solo de los empresarios?

Estoy más preocupado por el pueblo, que por los empresarios. Los empresarios deberán ayudar, pero hay que agilizar el sector público, inventar cosas para generar empleos inmediatos.

-Se establecieron acuerdos con empresarios por los empleos, ¿cuántos se crearon?

Todavía no tengo el dato. Sin embargo, hay cosas que se pueden hacer en el corto plazo, veremos de reactivar el tema de Mutún para que funcione, hablaré con las empresas a cargo. Asimismo, las empresas chinas no las quiero botar, pero no pueden traer trabajadores de China cuando tenemos gente aquí. Eso lo veré con los ministros de Economía y Obras Públicas.

-¿Está diezmado el Gobierno porque hay varios ministros con Covid-19?

 No solo son las cabezas, son todos los equipos ministeriales diezmados. En Cancillería hay más de 50 personas. Y este tema dura mucho tiempo porque la recuperación es de hasta tres semanas.

– ¿Y esto debilita al Gobierno?

Claro, porque es difícil trabajar sin gente. No se puede reemplazar al enfermo, se hace lo posible y el Gobierno va retornando a la normalidad.

-¿Estorba la candidatura de Jeanine Áñez dentro de esta crisis? ¿Es por ello que no hay una actuación de FFAA y Policía en los bloqueos?

Si algo aprendí en estos 10 años de exilio es que todos tienen el derecho a ser candidato, debido a que vivimos en democracia lo que debe prohibirse es la reelección presidencial. El común denominador en América Latina en los últimos 20 años es la perpetuidad en el poder, la reelección, pero decirle a alguien que estorba en una elección es ser antidemocrático también decirle que no están reprimiendo porque afecta la imagen. Y si uno va y reprime dicen que uno es asesino.

Tiene que ser la propuesta del candidato la que gane y enamore a la gente. Cuando Evo Morales ganó la primera vez en Bolivia había más de seis candidatos, pero logró más del 60% porque fue una propuesta que agradó al país, ahora que luego haya hecho barbaridades es otra cosa. Sin embargo, coartarle a alguien y decirle que estorba genera un precedente peligroso en la democracia.

– Sin embargo, la presidenta es a la vez candidata en esta coyuntura…

Lo hizo también Evo Morales, puede molestarles a algunos u otros, pero no está prohibido por ley y está dentro de la Constitución Política del Estado. Yo fui de los que me quejé cuando estaba en el Comité pro Santa Cruz. Ganó la CPE en un referéndum, entonces mientras no se cambie estaríamos coartando el derecho a las personas.

 ¿Qué cambió para que luego de ser un ciudadano amenazado ahora sea ministro?

Definitivamente es que el MAS se fue. Hubo otros gobiernos, pero no perseguían, no inventaban casos judiciales, ellos hicieron de la persecución su arma política. Ellos llevaban adelante una campaña de denigrar y faltar el respeto a las personas.

– Usted dice que se fue el MAS, pero son ellos los que bloquean y traban los recursos en la Asamblea Legislativa…

Me corrijo, se fue el MAS del Gobierno, yo creo que se quedarán muchos años en el país, creo que será como el MNR que tenía un voto duro e hicieron sus reformas. Se puede asemejar al MAS, que el MNR hizo cambios, aunque el MAS es más parecido a un cártel por cómo se maneja.

– Llamó la atención que en su discurso el gobernador Rubén Costas le deseó suerte, pero aclaró que Demócratas no gobierna, ¿hay un quiebre?

No sé. No estoy preocupado por ese tema. Hay mucha especulación de mi relación con el gobernador, si hay, si no hay. Creo que el gobernador debe dedicarse a la Gobernación y yo al área económica desde el gabinete. No entraré en controversia por el tema Rubén. Yo no soy del partido, fui invitado por la presidenta. Ahora mi responsabilidad es con el país y la salud.

– Sin embargo, hubo una lucha conjunta con el gobernador por la autonomía, ¿tuvo una charla con él últimamente?

No, porque no hubo ocasión. Probablemente suceda más adelante, porque mi ministerio maneja la parte presupuestaria de las gobernaciones, pero croe que debe ser de la manera más profesional. No veo quiebre y rupturas, cada uno dedicado a su trabajo.

– ¿En qué ocupó su tiempo fuera del país? ¿qué le hizo más falta?

Me faltó todo, no es una sola cosa. Lo más grave es la impotencia, que no puedes volver. Yo no había hecho absolutamente nada y estaba acusado, los primeros años me defendí con abogados y me costó caro, compré una empresa chica en Brasil, me fue bastante bien, la hice creer y estuve tratando de sobrevivir como se dice.

– Desde antes de su retorno se hablaba de su candidatura a la Alcaldía de Santa Cruz…

No descarto nada, me dicen que soy caduco en el trabajo y siempre dije que quiero ver mi ciudad bonita, mejorar el tráfico. Vengo de vivir en Sao Paulo donde hay 20 millones de habitantes y ocho millones de vehículos registrados y no se siente el estrés que se vive en Santa Cruz.

Los bolivianos cruzaban a Corumbá con placa boliviana y respetan las cebras y la señalética, porque los multan y eso es lo que debemos instalar, hacer respetar las normas. Se debe respetar la normativa y si es necesario un referéndum para tener una ciudad moderna y menos agresiva para las personas, hay que hacerlo. Cuando una ciudad es menos agresiva, te da una ciudad más tranquila y le da más valor a la ciudad, lo que no podemos decir es que la migración no es buena, es positivo, la ciudad creció y eso permite hacer negocios. Entonces, lo que se debe hacer es ordenar la ciudad, pero es un tema que se verá más adelante.