El presidente de Filipinas ordena al jefe de la Aduana tirar a matar a los narcotraficantes

“Hasta ahora no has matado a nadie? Póngase en forma”, le dijo el presidente Rodrigo Duterte al comisario de la Oficina de Aduanas.

Fuente: clarin.com



El presidente de FilipinasRodrigo Duterte, ordenó públicamente al máximo responsable de las aduanas del país que dispare a matar narcos de drogas, en una de sus amenazas más explícitas en los cuatro años de letal campaña antidroga, el pilar de su presidencia.

Duterte aseguró que no autorizó las ejecuciones extrajudiciales, pero amenazó de muerte a los narcotraficantes. Tanto él como la policía nacional, que se hizo cargo de gran parte de la campaña antidroga, dijeron que la mayoría de los sospechosos abatidos por la policía durante la iniciativa se resistieron y pusieron en peligro la vida de los agentes. 

En declaraciones televisadas el lunes por la noche durante una reunión del gobierno sobre la pandemia del coronavirusel mandatario dio la orden al comisario de la Oficina de Aduanas, Rey Leonardo Guerrero.

Rodrigo Duterte, el polémico presidente de Filipinas. Foto: AP
Rodrigo Duterte, el polémico presidente de Filipinas. Foto: AP

Guerrero, un general retirado del ejército y exjefe del Estado Mayor, no estaba presente cuando Duterte hizo esas declaraciones, aunque el presidente dijo haberse reunido antes con él y otros dos oficiales en el palacio presidencial en Manila​.

“Sigue entrando droga en el país por las aduanas”, dijo Duterte, añadiendo que antes había aprobado las solicitudes de Guerrero de armas de fuego. “Le dije: ‘Aprobé la compra de armas de fuego, ¿y hasta ahora no has matado a nadie? Póngase en forma’”.

Manila, una ciudad sumergida en la pobreza. Foto: EFE.
Manila, una ciudad sumergida en la pobreza. Foto: EFE.

«Se lo dije directamente. ‘Sigue entrando droga. Me gustaría que mataras (…) en cualquier caso, te apoyaré y no irás a la cárcel. Si son drogas, dispara a matar. Ese es el acuerdo»’‘, dijo Duterte sin entrar en detalles.

Más de 5.700 sospechosos de tráfico o consumo de drogas, la mayoría pobres, murieron en la campaña antidroga de Duterte, que alarmó a los grupos de Derechos Humanos y a gobiernos occidentales, además de provocar una pesquisa de posibles crímenes contra la humanidad en la Corte Penal Internacional. Duterte prometió mantener la mortal campaña durante los dos años de mandato que le quedan.

Los grupos de Derechos Humanos señalan que según sus investigaciones, algunos sospechosos fueron asesinados sin piedad y después la policía modificó la escena y les puso armas en la mano para que pareciera que se habían resistido. La policía dijo que los grupos de DD.HH. deben presentar denuncias penales en los tribunales si tienen pruebas contra agentes.

El sur de Filipinas, lugar de combate contra las drogas. Foto: EFE.
El sur de Filipinas, lugar de combate contra las drogas. Foto: EFE.

En 2018, después de que dos grandes cargamentos de drogas ilegales eludieran a la agencia en el puerto de Manila, Duterte puso bajo control militar temporal la oficina aduanera, salpicada por casos de corrupción.

Una investigación del Congreso sobre cómo pasaron por el vigilado puerto los grandes cargamentos, se cree que de metanfetaminas, terminó con recomendaciones de que se presentaran cargos contra algunos funcionarios de aduanas y se hicieran reformas en la agencia. (AP)