En el partido azul elogian al líder de Creemos por optar por la vía democrática. Morales dice que la ventaja que tienen es que sus oponentes están fraccionados.
Fuente: Página Siete
Pablo Peralta M. / La Paz
En el MAS celebran que Fernando Camacho, candidato a la presidencia por la alianza Creemos, divida el voto contrario al partido azul. En tanto que el exlíder cívico arremete contra Carlos Mesa, postulante por Comunidad Ciudadana (CC).
El expresidente Evo Morales, quien es el jefe de campaña del MAS, sostuvo que Camacho está “envalentonado” y que no cree que decline a su postulación. Subrayó que la ventaja que tiene el partido azul en la contienda es que el bloque contrario a esa fuerza está dividido.
“Aunque le están exigiendo que renuncie a Camacho, pero Camacho está envalentonado. No creo que renuncie. Esa es la ventaja que tenemos. Ellos están divididos, nosotros solos, superando algunos problemas internos que siempre se presentan”, manifestó Morales en una charla virtual impulsada por la organización política argentina La Simón Bolívar.
Rolando Cuéllar, dirigente y candidato a diputado del MAS por Santa Cruz, en declaraciones a Página Siete destacó que Camacho haya optado “por la vía democrática” y aseguró que el sistema democrático permite que en el bloque de las fuerzas políticas contrarias al partido azul haya más de un candidato en la carrera electoral.
“Le decimos al señor Camacho que está bien que se presente a las elecciones. Nosotros estamos haciendo nuestro trabajo. La derecha en la historia de este país siempre estuvo dividida. Siempre presentaron cinco, seis candidatos. Esto no es nuevo, más bien esto es democrático. Si la derecha presenta seis candidatos, yo creo que ésa es la democracia que el país necesita”, aseguró Cuéllar.
Esta postura en el MAS contrasta con el discurso duro que el propio Morales buscó instalar sobre el líder de Creemos en sus redes sociales. El exmandatario empezó a difundir, ni bien renunció a la presidencia el 10 de noviembre de 2019, que Camacho era uno de los que fraguaron el supuesto golpe en su contra.
“Así fue mi primera noche después de dejar la presidencia forzado por el golpe de Mesa y Camacho con ayuda de la Policía”, tuiteó Morales el 11 de noviembre de 2019, un día después de que decidiera renunciar a la presidencia de Bolivia.
El tono de Morales se mantuvo hasta después de mediados de este año. El 2 de julio, por ejemplo, el expresidente apuntó contra Camacho y su postura de renovación política. “Camacho habla de renovación política pero sus métodos son de dictadura: sobornos a militares y policías para que den golpe, pago por paros, cuoteos y perdonazos de impuestos para sus socios”, sostuvo entonces el expresidente.
Mientras esto ocurre en la vereda del MAS, Camacho comenzó a arremeter contra Mesa, aunque de forma paradójica con un tema relacionado con el partido azul y su máximo líder.
Ayer, Camacho compartió en sus redes sociales la nota “Mesa apuesta por coalición para zanjar crisis en Bolivia”, y luego comentó: “¿Y ahora qué van a decir aquellos que exigían ‘voto útil’? Voto útil para negociar y pactar con el MAS. Es una vergüenza que Carlos Mesa le proponga esto al país: acuerdo con Evo Morales”.
Desde CC respondieron que la nota a la que hizo referencia Camacho “falsea la declaración original” de Mesa, quien brindó el miércoles una rueda de prensa ante periodistas de agencias y medios internacionales.
Después, el candidato de la alianza naranja, en rueda de prensa desde Santa Cruz, manifestó que jamás dijo, ni directa ni indirectamente que se iba a aliar, ni remota ni de ninguna manera, “con ese señor”. “No voy a aliarme con Evo Morales en ningún contexto”, aseguró Mesa.
Ayer también circuló una información falsa sobre la salud del postulante. “Falsear documentos sobre mi estado de salud es el colmo de la guerra sucia, vamos a proceder con la denuncia correspondiente. Están desesperados porque van a perder”, indicó Mesa.
Roxana Lizárraga, candidata a diputada por Creemos, sostuvo que tanto Morales como “la vieja clase política” le tienen miedo a Camacho y buscan que el postulante cruceño decline a su candidatura porque no quieren rendirle cuentas al país.
“Evo Morales y la vieja clase política, los opositores funcionales, los que siempre estuvieron con Evo Morales pactando, teniendo pactos de impunidad, haciendo alianzas reservadas, son los que le tienen miedo a Camacho. Entre toda esa juntucha que ahora están en el poder están atacando a Camacho y quieren que Camacho se baje, porque todavía tienen que encubrir muchos hechos de corrupción”, sostuvo Lizárraga al programa Asuntos Centrales.
La candidata de Creemos indicó que tanto el masismo como el mesismo, así como “la vieja clase política” y el Gobierno de transición, tienen que rendirle cuentas al país.
“Le decimos al señor Camacho que está bien que se presente a las elecciones. Nosotros estamos haciendo nuestro trabajo”.
Rolando Cuéllar (MAS)
“Evo Morales y la vieja clase política, los opositores funcionales, son los que le tienen miedo a Camacho”.
Roxana Lizárraga, candidata de Creemos
“El miedo obliga a recurrir a la guerra sucia. Carlos Mesa tiene la victoria (…). No haremos alianzas con el MAS”.
Andrea Barrientos (CC)