Ocho jóvenes ingresarán a la ALP; el promedio de edad de los nuevos asambleístas es 44 años

Una imagen referencial de la Asamblea Legislativa Plurinacional.
Fuente: Opinión

Fernando, Daniel, María, Laura, Aleiza, Sara, Tacni y Darlen son los ocho asambleístas más jóvenes recientemente electos que formarán parte del ente legislativo en la gestión 2020-2025. De los 175 miembros de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP), incluyendo a representantes ante organismos supraestatales, sólo el 4,57% tiene menos de 28 años y, siguiendo el mismo patrón de las últimas cuatro décadas, el promedio de edad de los parlamentarios electos es de 44 años.

Se trata de dos varones y seis mujeres de entre 22 y 27 años que hasta noviembre próximo asumirán como diputados y representantes supraestatales de la nueva legislatura; ningún joven resultó electo en senadurías. Ellos compartirán curules con 152 (86,8%) adultos y 15 (8,5%) adultos mayores (tabla 1) que conformarán las dos cámaras del Órgano Legislativo.



La Ley N° 342 Ley de la Juventud define a este segmento de la población como aquel grupo comprendido entre los 16 y 28 años de edad; sin embargo, la definición constitucional para el ejercicio de la ciudadanía política en Bolivia considera 18 años. En esa línea, en el presente reporte informativo, se entiende como población joven a aquella cuya edad está comprendida entre los 18 y 28 años; adulta, entre 29 y 59 años; y adulta mayor, 60 años o más.

El más joven de todos los parlamentarios electos es Fernando Llapiz, que a la edad de 21 años ingresó en las listas de candidaturas de CREEMOS y ahora, a los 22, se convierte en diputado uninominal por la Circunscripción 58 de Beni. El exlíder cívico alcanzó protagonismo durante los conflictos de noviembre de 2019.

Por tipo de cargo, las diputaciones plurinominales convocaron más a jóvenes, pues, tres de los ocho electos llevarán esas credenciales, mientras que dos serán diputados uninominales, dos diputados indígenas o especiales y dos, representantes supraestatales. Cabe recordar que estos últimos cumplen actividades distintas a la legislativa dentro del Parlamento.

En tanto, ningún menor de 28 años ingresará al Senado, a diferencia de la gestión 2014-2019, que incluyó a dos jóvenes y la de 2009-2014, a uno. De hecho, estos dos periodos legislativos fueron los únicos en la historia democrática —desde 1979 hasta el presente—que acogieron a las juventudes en la Cámara Alta (tabla 3), debido al cambio en la edad mínima de elegibilidad de 35 a 18 años desde 2009.

Así, el Legislativo nacional abrirá sus puertas a mujeres y hombres de entre 22 y 71 años de edad, en representación de las tres fuerzas políticas con presencia en el Parlamento: Movimiento Al Socialismo – Instrumento Político por la Soberanía de los Pueblos (MAS-IPSP), Comunidad Ciudadana (CC) y CREEMOS. En términos generales, el promedio de edad de los nuevos parlamentarios es 44 años, el mismo que ha predominado en las diez anteriores legislaturas, de acuerdo con el análisis histórico realizado por la campaña #Protagonistas: Paridad-Poder-Juventudes.

Según dicho análisis, a pesar de que en 2009 la edad mínima para competir y eventualmente acceder a cargos de diputaciones y senadurías bajó de 25 y 35 años, respectivamente, a 18 años en ambos casos, ello no modificó significativamente los promedios de edad tendenciales durante las últimas cuatro décadas, que estuvieron en el rango de 38 a 52 años.

Históricamente, la Cámara de Diputados se abrió más a la inclusión de las juventudes bolivianas. Como se puede observar en la tabla 3, de las 10 legislaturas entre 1979 y 2019, sólo en cuatro no hubo jóvenes. En la nueva gestión, el 4,62% tiene hasta 28 años; el 7,69% hasta 30 años y el 20,7% hasta 35 años.