Covid-19 se reactiva en 2 regiones de Cochabamba que ya no reportaban casos

Médicos consideran que la segunda oleada del virus puede ser más fuerte que la primera, debido al descuido de la población. Muchos ya no cumplen las medidas de bioseguridad.

Un paciente con coronavirus intubado es atendido por enfermeras. Dico SolÍs

Un paciente con coronavirus intubado es atendido por enfermeras. Dico Solís

 

Fuente: Opinión

DAYANA FLORES A.



Los casos de coronavirus se reactivaron en dos regiones de Cochabamba que ya no reportaban positivos, fallecidos ni sospechosos: el Trópico y Cono Sur.

Este panorama es respaldado por el informe emitido ayer por el Servicio Departamental de Salud (SEDES). De total de decesos registrados el miércoles en todo el departamento (tres), dos ocurrieron en Entre Ríos, un municipio que está en el Trópico del departamento.

El martes, el número de fallecidos con COVID-19 en Cochabamba era el mismo y, otra vez, dos fueron de esa región. Una de las muertes se registró en Entre Ríos y la otra en Chimoré.

Mientras que, del total de contagiados con coronavirus, también el martes, dos eran del Trópico (Chimoré) y del Cono Sur (Capinota).

Desde que inició este mes, el Trópico no ha dejado de ser mencionado en los informes del SEDES. El 1 de noviembre, por ejemplo, no había ni un caso positivo de virus en el departamento, pero si dos muertos: uno de Entre Ríos y otro de Aiquile; otra vez, municipios pertenecientes a las regiones que hace algún tiempo ya no figuraban en los registros.

CAUSAS

El responsable de Vigilancia Epidemiológica del SEDES, Rubén Castillo, dijo que algunos de esos casos son importados de otras regiones, debido a la migración intermunicipal que caracteriza al Trópico y el Cono Sur.

Más allá del contexto de cada uno de los contagios, Castillo mencionó que “repercuten en las poblaciones” porque genera una cadena de contagio local. No obstante, aún no habló de un rebrote.

SITUACIÓN

Castillo dijo que la transmisión de la enfermedad es, principalmente, “por la vía respiratoria”, pero, últimamente, la gente está obviando las normas de bioseguridad.

En Cochabamba, “estamos viendo aglomeración de personas sin barbijos y sin el distanciamiento físico”. Esto se reflejó, por ejemplo, en la celebración de Halloween, el 31 de octubre, cuando la gente copó El Prado de Cochabamba, acompañada de menores de edad; también se vio esto en cabildos y otras manifestaciones sociales que surgieron en rechazo a los resultados de las elecciones presidenciales del 18 de octubre; en la feria de Alasitas, que el día de su inauguración amontonó gente que circulaba casi rozándose.

“Ese es un comportamiento inadecuado para esta enfermedad. No esperemos que nos vaya bien en el futuro si es que nos comportamos de esa forma”, remarcó Castillo.

Acotó que las consecuencias de estos desbordes se evidenciarán entre una a dos semanas, que es el tiempo de incubación del virus.

REBROTE

En respaldo, el médico de la sede sur de Ángeles Contra el COVID, Alonso de Oliveira, acotó que “parece que la gente levantó todas las medidas de bioseguridad”.

En su criterio, es posible que haya un descontrol de los casos, posiblemente, a fines de noviembre o fin de año.

“El virus se está preparando para volver, como en Europa”, dijo e instó a las autoridades a retomar los controles rigurosos, evitar las aglomeraciones, vigilar los restaurantes, los locales y otros establecimientos. De lo contrario, es posible que la segunda ola de coronavirus sea más fuerte que la primera.