Crisis humanitaria en Etiopía: ONU menciona posibles crímenes de guerra por civiles muertos

Amnistía Internacional denunció previamente que numerosos civiles murieron durante una «masacre» perpetrada según testigos por la guerrilla en la región etíope disidente del Tigré.

    
Unruhen in Äthiopien (Eduardo Soteras/AFP/Getty Images)Milicianos de la región de Amhara en Etiopía en Tigray, a principios de este mes.

Fuente: DW



 

La ONU advirtió este viernes (13.11.2020) de posibles crímenes por los numerosos civiles que habrían muerto en la región de Tigré en Etiopía, donde el Gobierno federal lanzó hace diez días una operación militar.

El primer ministro Abiy Ahmed, ganador del Premio Nobel de la Paz el año pasado, ordenó esta operación en esa región disidente, causando conmoción en la comunidad internacional que teme que esto sea el comienzo de una larga y sangrienta guerra civil.

Cientos de personas han muerto y miles han huido de los combates y los ataques aéreos en el Tigré, a cuyos líderes Abiy acusa de buscar desestabilizar al país.

Bachelet pide una investigación exhaustiva

La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, pidió una investigación exhaustiva sobre informaciones de una masacre en la ciudad de Mai-Kadra, denunciada por Amnistía Internacional.

«Si se confirma que fueron deliberadamente perpetrados por una de las partes en los combates, estos asesinatos de civiles equivaldrían desde luego a crímenes de guerra», dijo Bachelet en un comunicado.

Äthiopien Premierminister Abiy Ahmed (Minasse Wondimu Hailu/picture alliance/AA)El primer ministro etíope, Abiy Ahmed, habla en una reunión en Addis Abeba.

AI confirma los sucesos

Amnistía Internacional denunció el jueves que numerosos civiles murieron durante una «masacre» perpetrada según testigos por la guerrilla en la región etíope disidente del Tigré, donde una operación del Ejército obligó a más de 11.000 personas a refugiarse en Sudán.

«Amnistía Internacional puede confirmar que numerosas personas, probablemente centenares, fueron apuñaladas o asesinadas a hachazos en la ciudad de Mai Kadra (May Cadera), en la zona suroeste de la región etíope del Tigré, en la noche del 9 de noviembre», indicó el comunicado de Amnistía.

La organización aseguró que ha «verificado digitalmente fotografías espantosas y videos de cuerpos desperdigados en las calles de la ciudad, o siendo transportadas en camillas».

La oenegé internacional dijo que no disponía de la información suficiente para identificar a los autores de la masacre, pero habló con testigos que los atribuían a la guerrilla secesionista del Frente de Liberación de los Pueblos del Tigré (TPLF).

Según testigos, algunas víctimas procedían de la región de Amhara, una zona con un largo historial de tensiones con el Tigré.

TPLF: estas acusaciones eran «infundadas»

Miles de milicianos de Amhara fueron desplegados en la frontera con el Tigré para luchar junto a las fuerzas federales. El líder del TPLF, Debretsion Gebremichael, dijo a la AFP el viernes que estas acusaciones eran «infundadas».

Abiy Ahmed asegura que su operación militar es una respuesta a los ataques en dos campos militares federales perpetrados por el TPLF, que en el pasado dominó la política etíope y que afirma que ha sido marginado y atacado por el primer ministro. El partido niega haber llevado a cabo estos ataques.

Las tensiones entre Abiy y el TPLF aumentaron de nuevo en septiembre cuando tras suspenderse las elecciones nacionales debido al coronavirus, la región siguió adelante con sus propios comicios, insistiendo en que Abiy era un líder ilegítimo.

El viernes, Abiy Ahmed envió un mensaje a la región, especialmente a sus soldados, instándoles a «levantarse» y a ponerse del lado del Ejército nacional.

«Esta malvada fuerza está rodeada por todas partes. Es una fuerza en su último aliento. Vuestros hijos están sufriendo muerte y heridas en el frente», declaró en un discurso transmitido en Facebook en el que el idioma de la región.

Un apagón en las comunicaciones en el Tigré dificultó la verificación de las afirmaciones de cada bando en el terreno, pero Abiy Ahmed prometió que daría un triunfo decisivo «en un periodo de tiempo relativamente corto».

Así, Abiy dio un ultimátum a las fuerzas rebeldes para rendirse en los próximos tres días.

«Eso es un sueño. Somos gente orgullosa que puede defenderse. Este es un cementerio para los invasores», replicó el líder del TPLF, Debretsion Gebremichael.

Michelle Bachelet advirtió que si el conflicto continúa «hay un riesgo de que la situación se descontrole, provocando muchas víctimas y destrucción, así como desplazamientos masivos dentro de la propia Etiopía y a través de las fronteras».

EE. UU. llama a una desescalada

Estados Unidos urgió, por su parte, a tomar «medidas inmediatas para reducir la escalada» en la región de Tigré en Etiopía, y expresó su alarma por la «masacre de civiles».

«Condenamos la masacre de civiles en Mai-Kadra e instamos enérgicamente a que se tomen medidas inmediatas para reducir la escalada y poner fin al conflicto en la región de Tigré», dijo Tibor Nagy, el principal diplomático estadounidense para África, al aludir a una ciudad del norte del país donde, según Amnistía Internacional, se perpetraron asesinatos en masa.

«Es fundamental que se restablezca la paz y se proteja a los civiles», escribió en Twitter.

FEW (AFP, EFE)