Animales en cautiverio son de escasa relevancia social, dice decisión de un fiscal en el caso contra Mario Cronenbold

«Qué puedo decir… Es lamentable la ignorancia. Hace falta que los funcionarios de la Justicia entiendan la importancia de la biodiversidad para que no minimicen los delitos relacionados a la tenencia ilegal, caza, tráfico o cualquier otra situación relacionada a estos ilícitos», opinó Yandery Kempff, responsable de la Dirección de Recursos Naturales (Direna) de la Gobernación, sobre la decisión de Adan Arteaga, fiscal asignado al caso contra Mario Cronenbold, por la tenencia de animales silvestres.

El proceso fue iniciado por el servicio legal de la Gobernación, bajo la figura de destrucción o deterioro de los bienes del Estado y la riqueza nacional, de acuerdo a lo previsto en el artículo 223 del Código Penal.

Sin embargo, la resolución de Arteaga fue que el caso se derive a la vía administrativa, como salida alternativa, bajo los argumentos de que «el hecho es de escasa relevancia social (…). toda vez que la afectación del bien jurídico es mínima (…). Y que ante el supuesto delito no existe dolo ni culpa, ya que el denunciado los habría comprado de la venta de animales«.



Para Kempff, «si no se imponen sanciones, lo único que se hace es alimentar el tráfico de vida silvestre».

Por su parte, Romina Landívar, activista medioambiental, dijo que es una total incoherencia el argumento del fiscal porque acepta que se extraigan animales silvestres de su hábitat y que se les ocasione la muerte, situaciones relevantes y legalmente penadas.

«Minimizar el impacto muestra ignorancia fatal. De nueve aves que se capturan, solo una sobrevive, el resto muere en el camino. Y cada día se atrapan cientos y miles, eso pone en peligro de extinción a los animales que se arrancan de su hábitat. Hay mucha ignorancia en el tema de tráfico, me canso de hablar e insistir para que sepan quiénes están involucrados, etc.», cuestionó.

Para Landívar, que sea un funcionario público el involucrado aumenta la gravedad del caso. «Debería ser diez veces más grave que un funcionario público esté involucrado porque son las autoridades las que deben dar el ejemplo y promover el cumplimiento de la ley», argumentó.

La oficina de servicios legales de Biodiversidad, de la Gobernación, ya elaboró un documento ante el juez, Manuel Baptista, solicitando rechazo a la decisión de Arteaga.

En la propiedad de Cronenbold se encontraron una paraba amarilla, una roja, un mono Martín, 10 patos putiris, tres tortugas geochelone carbonaria, dos cráneos de huaso y un cráneo de ciervo de pantano.

«Debió averiguarse si esos cráneos no eran fruto de la caza», dijo Landívar.