Combate nulo entre Peterhansel y Al-Attiyah y Sainz se enreda en el polvo

Combate nulo entre Peterhansel y Al-Attiyah y Sainz se enreda en el polvo

Combate nulo entre Peterhansel y Al-Attiyah y Sainz se enreda en el polvo

Apenas nada ha cambiado en los 342 kilómetros de la etapa 10 que hoy ha unido Neom y Al-Ula, en la jornada más intrascendente de lo que llevamos de Dakar en la categoría de coches. De hecho, Al-Attiyah, Peterhansel y Sainz apenas han llegado a meta separados por apenas dos minutos.

Ninguno de ellos ha ganado la etapa, que ha sido para el saudí Yazeed Al-Rajhi (que llegó a meta otra vez en tres ruedas) y, por no pasar, ni siquiera Peterhansel, que era el piloto que hoy abría trayecto, ha perdido tiempo por esa circunstancia: apenas 49 segundos con Al-Attiyah.



«La clave del Dakar será mañana», aseguraba Al-Attiyah en meta temeroso de la jornada del jueves para la que tendrá una estrategia clara y obligada: «No hay opciones de estrategia, habrá que salir fuertes y encontrar un buen ritmo, aunque será una etapa complicada también en la navegación», aventuró.

Se esperaba que por ese hándicap el francés pudiera al menos ceder tres minutos, los que le separaban en el orden de salida de Nasser Al-Attiyah, pero el catarí hoy no ha tenido ritmo para pillar a Peterhansel y, al menos, salir mañana al día decisivo algo más cerca del galo. Esta noche se acostará a 17:01 del líder, una distancia corta, pero que puede permitir a la leyenda francesa cubrirse ante alguna eventualidad, como pinchazos o errores de navegación.

Peterhansel apenas ha cedido segundos pese a abrir pista.

En el caso de Sainz, el madrileño completó una buena etapa, pero arrastró durante toda la jornada los seis minutos perdidos en los primeros 90 kilómetros, complicados de navegación y donde se encontró con la imposibilidad de pasar a los coches más lentos por su estela de polvo. Sin embargo, de ahí a meta el panorama se aclaró y volvió a ser el más rápido, recortando la distancia a la mitad. Esta vez Sainz y Cruz se toparon con un nuevo enemigo.

Sainz y Cruz al menos ha cumplido parte de su misión para hoy, que era terminar la etapa lo más arriba posible, para poder mañana asistir a Peterhansel en la odisea final.

El cuarto puesto en la etapa le permitirá salir justo tras Monsieur Dakar… pero sus opciones de ganar mañana estarán hipotecadas a cubrirle las espaldas a Peterhansel… especialmente en el cordón de dunas de 100 kilómetros con el que todos soñarán esta noche.

Al-Attiyah tendrá que jugarsela mañana.