“Si el médico me dice positivo me vacuna, y si no pues nada, tengo que venir unas dos o tres veces más”, manifestó resignado un adulto mayor al enterarse que necesita una autorización médica para recibir su dosis.
Muchos adultos mayores pensaron que al estar asegurados en la Caja Nacional de Salud (CNS) su vacunación sería más sencilla y rápida; sin embargo, deben hacer colas y hacer un chequeo médico que definirá si reciben o no su dosis. Los afectados señalan que nadie informó sobre los trámites.
“Perdemos tiempo. Hacemos fila supuestamente, esas cosas deberían prever”, manifestó José Jiménez, afiliado a la CNS en La Paz.
Tal vez las filas es lo menos complejo. Una vez llegan a recibir su vacuna, es en ese instante que a los adultos mayores les informan que necesitan una evaluación médica que autorice su vacunación.
“Si me dice positivo me vacuna, y si no pues nada, tengo que venir unas dos o tres veces más”, manifestó resignado otro adulto mayor.
Los adultos mayores reclaman y señalan que todo esto ya se debió informar con anterioridad y de manera adecuada a sus asegurados.
Esto no pasa en centros médicos del sistema público. Aquí los adultos mayores solo necesitan presentar su carnet de identidad con el que se verifica si corresponde al grupo de vacunación. Además, se verifique si la persona no está asegurada y en caso de no estarlo, reciben su dosis en minutos.