MAS ataca a la Iglesia y la oposición dice que Memoria desvirtúa retórica del golpe

El oficialismo calificó a la Iglesia Católica de “cómplice” del supuesto golpe de Estado y pidió a la Fiscalía que convoque a declarar a sus representantes. CC y Creemos respaldan la Memoria de la CEB.

Fuente: paginasiete.bo



Erika Segales / La Paz

Luego de que la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) publicara  la Memoria sobre los hechos del proceso de pacificación, sucedidos entre fines de 2019 y principios de 2020, el MAS se estrelló contra la Iglesia Católica  calificándola de “cómplice” del supuesto “golpe de Estado”. Mientras que opositores respaldan el documento y señalan que desvirtúa la retórica del “golpe de Estado”.

“Algunos jerarcas de la Iglesia Católica que callaron cuando gobierno de facto masacraba al pueblo y asaltaba al Estado, ahora justifican el golpe con sus comunicados políticos. Tratan de esquivar su culpa, pero lo que hacen es confesar que fueron cómplices”, escribió el presidente  del MAS Evo Morales.

Asimismo,  el diputado Héctor Arce, del MAS,  señaló que la Iglesia trata de justificar su participación en un “hecho violento”,  y que se parcializó con la derecha. Apuntó que el Ministerio Público debe convocar a declarar,  entre otros actores,  a representantes de la Iglesia en el marco de las investigaciones del caso “golpe de Estado”.

“Vemos que este informe de la Iglesia es un cuento de hadas que trata de justificar también su rol, su participación en este hecho violento que vivió el país. Vemos que este informe expresa la parcialización con la derecha (…). Se quiere posicionar ese informe en la opinión pública como la absoluta verdad. El Ministerio Público tiene que investigar y convocar a todos estos actores políticos internos, cívicos, malos policías y militares, representantes de la Iglesia. Estos señores tienen que ir a declarar”, dijo.

Por su parte,  el presidente de la Cámara de Diputados, Freddy Mamani, señaló que la Iglesia busca “lavarse las manos”,  y aseguró  que los representantes de la CEB  deberían estar entre las más de 30 personas que serán convocadas  por el Ministerio  Público a declarar.

“Tenemos conocimiento que son más de 30 personas que están convocadas para declarar. Creo que dentro de ese grupo deben estar (…). Me gustaría que el pueblo boliviano juzgue el accionar de la Iglesia, ellos mismos han indicado que han sido partícipes, pero en qué condiciones han sido partícipes, y ahora cómo quieren lavar su imagen. Eso que juzgue el pueblo boliviano y también que trabaje la justicia boliviana”,  manifestó Mamani, cuando fue consultado al respecto.

Mientras que las fuerzas opositoras Comunidad Ciudadana  y Creemos respaldaron la Memoria presentada por la CEB,  e indicaron que desvirtúa la retórica que trata de imponer el MAS sobre un “golpe de Estado”.

“El documento constata que hubo un proceso de diálogo permanente, donde participaron autoridades del MAS;  por tanto, es un documento que desvirtúa la falsa versión del MAS de que existió un ‘golpe de Estado’. Este documento, esta verdad hecha pública, este testimonio de quienes facilitaron el diálogo irrumpe, contradice abiertamente el relato falso oficialista de ‘golpe de Estado’”, expresó el diputado Erwin Bazán, de Creemos.

Por su parte,  la diputada Samantha Nogales, de Comunidad Ciudadana,  indicó: “El MAS, siempre que sale alguna noticia o documento que va en contra de lo que ellos profesan falsamente, lo condena. No nos llama la atención que digan que el documento que presentó la Iglesia es falso. Nosotros respaldamos lo que dice la Iglesia Católica, porque cuenta de manera detallada cómo sucedieron los hechos”.

Para el Conade, el informe de la CEB tiene credibilidad porque relata precisa y cronológicamente los sucesos y los actores que participaron en el proceso de pacificación.

 “El informe de la Iglesia refleja la verdad de lo que sucedió y con ello se defenestra la teoría del ‘golpe’. La verdad histórica ha sido que hubo un fraude, una convulsión, que Evo Morales se fue, que hubo un proceso de pacificación y no puede haber golpe, ni conspiración cuando ya no había gobierno;  hubo un vacío de poder y cuando hay un vacío de poder, el hecho que se reúnan para pacificar, no puede ser considerado un ‘golpe de Estado’”.

El presidente de la CEB, monseñor Ricardo Centellas, invitó a leer la Memoria y pidió no descontextualizar el documento sobre el proceso de pacificación que acompañó  la Iglesia Católica, junto con  la Unión Europea y la Embajada de España.

“Invitamos a leer este documento de 25 páginas, es una relación objetiva, clara, científica de los hechos (…). Les invito a no sacar frases, textos del contexto general del documento. El documento sirve para una referencia, para una ubicación mejor en la realidad conflictiva que hemos vivido como Bolivia”, dijo.

En la memoria  presentada por la CEB se establece que los primeros contactos del diálogo se dieron    antes de la renuncia de Morales, el 7 de noviembre, cuando se entabló comunicación con el  exministro Manuel Canelas.

Canelas, en su cuenta de Twitter, expresó: “La reunión fue cordial y breve. Intercambiamos opiniones sobre la situación y compartimos la preocupación por el incremento de la violencia. (…) No llegó a darse ningún proceso de mediación formal. Y podría haber sido bueno, pero hablamos del 7 de noviembre cuando la voluntad de ruptura de varios estaba en marcha ya”.

En el documento también  se  indica que Adriana Salvatierra se negó a asumir la Presidencia. La expresidenta del Senado tuiteó ayer que no aceptó la sucesión de Jeanine Añez, pero no mencionó si rechazó asumir el mando del país. “Nunca acepté la presidencia de Jeanine Añez, de ninguna manera. Ella asumió en una sesión sin quorum y por tanto ilegal, impidiendo el ingreso de los parlamentarios y reprimiéndonos con violencia policial. Claramente la sucesión constitucional no era su interés”, afirmó.