Milena Soto denuncia persecución política en Bolivia en nota enviada a Bachelet

La dirigente dijo que la Fiscalía emitió 220 citaciones contra miembros de la RJC. Sepa cuáles son las denuncias que hizo Soto.

 



Fuente: paginasiete.bo

Milena Soto, aprehendida esta jornada, envió el domingo una nota Alta Comisionada para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, a Michelle Bachelet, en la que denuncia que el Gobierno de Luis Arce desencadenó una persecución política contra la Resistencia Juvenil Cochala (RJC), que comenzó con la captura de dos de sus principales dirigentes y la entrega de 220 notificaciones contra sus miembros.

Soto —quien se identifica como “madre y padre de un niño de 14 años” y quien el 26 de julio denunció una tentativa de secuestro por personas de civil, a los que identifica como “paramilitares” al servicio del partido en el Gobierno (MAS)— se declara perseguida política y víctima de una manipulación pruebas y procedimientos judiciales y extrajudiciales con el propósito de encarcelarla o acabar con su vida.

En la misiva, asegura que se falseó una certificación que probaría que ella estaba en Cochabamba y no en Sucre entre el 5 y 9 de octubre del año pasado, cuando un grupo de este movimiento ciudadano se trasladó a Sucre para exigir la renuncia del fiscal general del Estado, Juan Lanchipa.

Esa manifestación terminó con destrozos y grafitis de la fachada del edificio. Por este motivo, el Ministerio Público presentó una denuncia penal contra los dirigentes y miembros de la RJC por los delitos de instigación publica a delinquir, asociación delictuosa, tenencia y porte de armas no convencionales, atentados contra los bienes públicos, destrucción o deterioro de los bienes y la riqueza del Estado y daño calificado.

A continuación las frases más importantes de la carta de Soto

“Mi nombre es Milena Soto López, madre y padre de un niño de 14 años, de nombre Ignacio Eduardo V. S., a la fecha soy una perseguida política del actual Gobierno del Movimiento al Socialismo”.

“Mi situación actual es delicada, el gobierno de Luis Arce, presidente de Bolivia, quiere por todas las formas posibles e ilegales meterme a una cárcel o acabar con mi vida. Se me inicio un proceso en la ciudad de Sucre en el mes de octubre de 2020, donde se me acusa de un sinfín de delitos que no tienen sustento legal, por el que actualmente mis compañeros Mario Bascopé Revuelta (Tonchy) u Jasir Molina se encuentran detenidos en la cárcel de San Roque de la ciudad de Sucre”.

“Se me acusa de estar los días 5, 6, 7, 8 y 9 de octubre del año 2020 en la ciudad de Sucre y de haber realizado destrozos, grafitis (…) solo por formar parte del movimiento ciudadano Resistencia Juvenil Cochala. Cabe resaltar que jamás estuve en tiempo u espacio en dicha cuidad, ya que me  encontraba trabajando en Oficinas de Migración Regional Cochabamba (en la gestión de Jeanine Áñez) . Aún sin haber estado (…)  me apersone a la Fiscalía para presentar mi declaración acompañada con pruebas de descargo”.

“La prueba más importante que acompañé es una certificación de la Unidad Administrativa de Migración, que controlaba el ingreso, falta y salida de todas las oficinas de Cochabamba. Dicha prueba fue impresa cuando aún trabajaba en dichas oficinas con firma y sello del exfuncionario público Mauricio Ardaya, jefe de esa área, con lo cual se demostró mi presencia en Cochabamba”.

( Sin embargo, ya en el gobierno de Arce, la Fiscalía pidió una nueva certificación), y el sistema de Control de Personal emitió un “informe falso y manipulado a tal grado de cambiarme de unidad (…) En la certificación que presentaron a la Fiscalía me presentaron como si yo hubiera trabajado en la Dirección de Régimen Penitenciario, siendo esto completamente falso”

“Soy víctima del Estado que solo busca mil formas posibles de meterme a la cárcel, la Fiscalía basándose en dicho informe manipulado intenta forzar una audiencia de medidas cautelares y pedir mi detención preventiva en un penal”.

“No contentos con todo el daño que me están causando, fui víctima de un intento de secuestro. La noche del 26 de julio, me atacaron dos hombres que responden a grupos paramilitares del Gobierno Bolivia. Me llamaron por mi nombre y que soy de la resistencia, que por eso debían matarme. Trataron sin reparo de meterme a la fuerza a una movilidad, con insultos, me pisaron y patearon en mi cabeza amenazándome de muerte”.

«Yo me defendí como puede y al verse descubiertos por la luz de una movilidad escaparon tirada en la tierra y en shock”.

“Mi agrupación está siendo perseguida políticamente, todos los lideres son citados y procesados, entre ellos Jaime Maldonado Méndez, Luis Terán y Favio Bascopé,  (…)  Este Gobierno está actuando como una dictadura, existen más de 220 citaciones para jóvenes  de la  RJC . En Bolivia no exisie el debido proceso y la Justicia está parcializada con el MAS”.