Gremios de la prensa rechazan ataques de Arce, Evo y ministros

Los gremios de la prensa boliviana recuerdan que no es la primera vez que el MAS expresa intolerancia contra los periodistas y medios independientes del país.

 

  • Medios de comunicación durante una cobertura periodística. | Carlos López

 

La Asociación Nacional de Periodistas de Bolivia (ANPB) y la Asociación de Periodistas de La Paz (APLP) rechazaron el ataque emprendido por el Gobierno y el oficialismo contra los periodistas y medios independientes. Tanto ministros del presidente Luis Arce como el jefe masista Evo Morales han expresado calificativos fuera de tono en contra del trabajo periodístico, porque supuestamente la prensa es de “oposición”, “tergiversa los hechos”, “coordina titulares”, conforma “corporaciones mediáticas” y “abusa” del derecho a la libertad de expresión, lo que no es evidente, afirman los gremios.



Remarcan que los periodistas y los medios cumplen su trabajo informativo con responsabilidad y ética, bajo los preceptos del Sistema Interamericano de Protección de los Derechos Humanos, de la Constitución Política del Estado, de la Ley de Imprenta y del Código Nacional de Ética Periodística, “con clara conciencia de que sus tareas son fundamentales para el desarrollo del Estado constitucional de derecho y de la democracia”.

Relación tensa

Los gremios recuerdan que no es la primera vez que militantes del MAS expresan intolerancia contra los periodistas y medios informativos. “Los tres gobiernos de Morales estuvieron marcados por tensas relaciones con nuestro gremio y hoy la administración del presidente Arce da señales de transitar igual o peor camino, lo que denota una lamentable falta de conocimiento sobre las funciones y el alcance del derecho a la libertad de expresión”, se lee en el comunicado.

Es pertinente, agregan, dejar establecido que el objetivo central del periodismo, en tanto ejercicio de la libertad de expresión, es fiscalizar al poder, para evitar que las autoridades cometan abusos en los asuntos públicos que tienen a su cargo. También es necesario remarcar que las autoridades, como se ha establecido en la jurisprudencia interamericana, están sometidas a un mayor escrutinio público y obligadas a ser más tolerantes con la crítica.