Caen los ingresos de las fuentes que alimentan Fondo de Renta Dignidad

En 2014 las utilidades de las empresas públicas eran de 7.371 millones de bolivianos y en 2021 de sólo Bs 2.871 millones. La recaudación del IDH cayó de Bs 15.602 millones en 2015 a Bs 5.445 millones el año pasado.

Fuente: Página Siete / La Paz

Las  utilidades de las empresas públicas no llegan ni a la mitad de lo que generaron como ganancia hasta 2014 y expertos advierten que su contribución al Fondo de la Renta Dignidad cada vez es menor, al igual que el aporte del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), la otra fuente que alimenta el pago del beneficio.



El Fondo de la Renta Universal de Vejez (FRUV) se financia con un porcentaje de los recursos provenientes del IDH y la distribución de dividendos de las empresas nacionalizadas y capitalizadas.

La Memoria de la Economía Boliviana 2021 del Ministerio de Economía revela que el año pasado las compañías del Estado lograron un beneficio neto de 2.871 millones de bolivianos.

Sin embargo, en 2014 las utilidades de estas empresas  alcanzaron su pico con 7.371 millones de bolivianos (unos 1.059 millones de dólares). Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) en 2021  obtuvo una  ganancia de 1.196 millones de bolivianos (171.8 millones de dólares) debido a mayores volúmenes exportados de gas natural. Pero en 2013 la estatal había alcanzado  una ganancia neta de 6.416,5 millones de bolivianos (921,9 millones de dólares) y en 2014 alrededor de  los 1.000 millones de dólares, según reflejó entonces la revista América Economía con declaraciones del fallecido expresidente de la estatal Carlos Villegas.

Esto significa que las ganancias de la principal empresa pública del país en 2021 están muy lejos de los beneficios que había logrado en 2014.

De acuerdo con la Memoria del Ministerio de Economía la Empresa Nacional de Electricidad (ENDE) en 2021 reportó una utilidad de 1.019 millones de bolivianos. Como referencia en 2015 la estatal obtuvo 1.435 millones de bolivianos de ganancia.

La Corporación Minera de Bolivia (Comibol) en 2021 reportó un beneficio de  1.014 millones de bolivianos producto del desempeño favorable en el sector minero y el efecto de los precios internacionales de los minerales. La Empresa Metalúrgica Vinto  ganó 261 millones de bolivianos  y la Empresa Estratégica Boliviana de la Construcción (EBC) 21 millones de bolivianos.

Cae el IDH

Según refleja la Memoria 2021 del Ministerio de Economía, la recaudación del IDH que en 2014 llegó a 15.543 millones de bolivianos y en 2015 a 15.602 millones de bolivianos, en los años siguientes descendió y el año pasado alcanzó 5.445 millones de bolivianos, el nivel más bajo desde 2007.

El analista Gonzalo Chávez  opinó que el Gobierno tiene   serios problemas fiscales y la Renta Dignidad se paga con parte de las ganancias  de las empresas estatales y esto no está ocurriendo.  Por otro lado hay menos IDH y el sector hidrocarburos se achicó, las exportaciones de gas natural  son 4.000 millones de dólares menos que en 2014, complementó.

El investigador de la Fundación Jubileo René Martínez señaló que la fuente más importante pata financiar el FRUV es el IDH y la recaudación ha ido cayendo desde 2015 al igual que los volúmenes de exportación de gas natural.

“Con relación a 2014 el IDH  cae en 64% y con esos niveles de recaudación ya no alcanzarían los ingresos  para el pago de la Renta Dignidad. Como este es un gasto corriente siempre dijimos que no es consistente pagarlo con fuentes de recursos no renovables, no se tendrán los ingresos por siempre”, indicó.

Añadió que no se tienen cifras del valor el FRUV actualizados, pero sus gastos son mayores por el aumento de beneficiarios y por eso el Gobierno busca otras fuentes de financiamiento.

El presidente del Colegio de Economistas de Tarija, Fernando Romero, sostuvo que en teoría deberían existir recursos suficientes para los bonos sociales, tales como la Renta Dignidad, pero es un hecho que las utilidades de las empresas públicas  en los últimos años decrecieron.

En su criterio, es posible  que los ingresos estatales se estén reorientando u optimizando a inversión pública y pagar la deuda externa y se esté generando cierta iliquidez para sostener  programas implementados en años de bonanza.

“Si consideramos que de 2013 a 2021 el IDH cayó en un 65% y la producción nacional de gas natural, 2016-2021, en un 20%, esto afecta sin dudas a todo lo que financia este impuesto. En la gestión 2022, de acuerdo con el  PGE, se planea gastar  5.834 millones de bolivianos para beneficiar a 1.211.253 ancianos, lo cual significa en el primero un incremento del 28% y el segundo caso de apenas del 7% respecto al 2021”, observó.

Defensa de empresas

El ministro de Economía, Marcelo Montenegro,  destacó que  las  utilidades de  2.873 millones de bolivianos del 2021 de las empresas públicas están entre las mayores desde 2016.

“En 2020 hay pérdida de 757 millones de dólares porque el Gobierno de facto lo que hizo es proscribir el funcionamiento de empresas públicas a favor de empresas privadas”, precisó en declaraciones a Bolivia TV.

Explicó que en la forma de presentación de las finanzas públicas hay superávit y déficit, pero lo importante es mostrar si hay utilidad o pérdida.

“Los ingresos corrientes superan a los gastos corrientes y hay superávit, pero el valor negativo   es por la inversión. Cada vez las empresas aumentan capacidad productiva, por lo tanto, no habría  forma de explicar utilidades si no hay inversiones”, apuntó. Montenegro aseguró que la mayoría de las empresas públicas están con superávit corriente. “Hay  empresas que tenían una  tendencia desastrosa en 2020 y para 2021 se acercan a punto equilibrio, otras superaron eso y  tienen márgenes positivos, como Emvibol,  que  está apostando a otra pequeña planta, esto significa que van a poder abastecer el mercado. Las empresas públicas  están permitiendo generar superávit fiscal, si tuvieran problemas,  generarían  déficit y aportan con utilidades”, remarcó.

 

Balance de capital
  • Inversión La Memoria de la Economía Boliviana 2021 del Ministerio de Economía, además de las utilidades e ingresos y gastos corrientes de las empresas públicas, también refleja el gasto de capital de las empresas públicas en los últimos años.
  • Flujo En 2021, los gastos de capital de las empresas públicas subieron de 2.175 millones de bolivianos en 2020 a 4.073 millones de bolivianos en 2021, es decir un crecimiento de 87,2% (variación absoluta de 1.897 millones de bolivianos), que obedeció, según el Ministerio de Economía  a la política de reactivación de proyectos de inversión pública en sectores generadores de excedentes económicos y productivos.
  • Evolución Los gastos de capital de las empresas públicas  si bien mejoraron en 2021, no se comparan a los niveles por ejemplo de 2016 cuando alcanzaron un pico de 12.124 millones de bolivianos. Luego de ese año estos gastos  comenzaron a  descender, según se puede leer en la Memoria de la Economía  Boliviana 2021.