Fuente: Unitel
Luciendo una cabellera completamente blanca, Delfina Chuquimia llegó este miércoles hasta el Prado paceño, donde funciona uno de los puntos autorizados por el Servicio Departamental de Salud (Sedes) La Paz, para recibir su cuarta dosis contra el coronavirus.
La mujer tiene 88 años, se traslada sola y, pese a su edad, no ha dejado de trabajar, es comerciante. Abrigada con chamarra, chalina y otros elementos de bioseguridad llegó a buscar la vacuna para protegerse, tras la confirmación de la circulación en el país de la subvariante BA.2, un linaje de ómicron que provocó un incremento inusitado de enfermos en China.
«Siempre cumplo con las vacunas, para que no me afecte la enfermedad», manifestó la carismática mujer, con una sonrisa.
Tras la confirmación de la circulación de la variante BA.2 en los puntos de vacunación de La Paz se evidenció un leve incremento de la demanda de las dosis.