El objetivo es garantizar la seguridad alimentaria para que las familias consuman productos sanos, pero además aprendan a ser resilientes.
Huertos Urbanos.
Una iniciativa crece a pasos agigantados. Se trata de los huertos urbanos en La Paz, que prevén instalarse en los predios municipales que están abandonados, subutilizados o que no tienen ningún uso. Allí, se proyecta que se establezcan, previa solicitud mediante un formulario, huertos que brinden hortalizas a los agricultores urbanos que deseen formar parte de este proyecto.
La mañana de este 28 de marzo, el Comité de Seguridad Alimentaria de La Paz, conformada por huerteros y organizaciones sociales, presentó al Gobierno Municipal de La Paz una propuesta para que se haga efectiva la Ley Municipal 321 de Promoción de Huertos Urbanos -que ya tiene tres años- con el fin de hacer efectivo los trámites y procesos para que las personas instalen huertos vecinales y cultiven sus propios alimentos.
Las organizaciones presentaron un formulario que deberá ser llenado por las personas que quieran utilizar un espacio municipal para cultivar sus alimentos.
El secretario de Gestión Ambiental y Energías Renovables, José Eduardo Galindo, manifestó que seguirán apoyando estos proyectos. “Ustedes están demostrando que los huertos urbanos es una actividad que debemos seguir apoyando, esto nos lleva a ser resilientes, a adaptarnos y a generar este tipo de acciones que no sabemos si en cualquier momento pueden ser vitales para la sobrevivencia de nuestra especie (…) es por eso que nosotros como municipio moderno queremos estar siempre preparados y trabajar con ustedes”, expresó.
Por su parte, el secretario ejecutivo José Carlos Campero, mostró su satisfacción por el formulario único y estandarizado que permitirá agilizar los trámites para que la gente cree sus huertos urbanos. “Este es un instrumento para los subalcaldes que son quienes tienen que ponerle la firma y dar la autorización para que a partir de ahora no tengamos el estilo libre en la otorgación de permisos y que todos sepan que este es el formulario, es una declaración jurada que le da responsabilidades y derechos a ambas partes”, sostuvo.
Aclaró que en ningún caso estos permisos para huertos urbanos suponen algún tipo de sesión legal de terrenos municipales a particulares.
Al respecto, la responsable de agricultura urbana de la Fundación Alternativas, Mariela Rivera Rodríguez, informó que Laka Uta es el primer huerto urbano comunal y vecinal a nivel nacional, y que ya tiene nueve años de existencia. Se lo utilizó como modelo para replicar otros con apoyo del Comité Municipal de Seguridad Alimentaria, así en total se suman 14 huertos urbanos, de los cuales 3 están formalmente registrados, sin embargo se prevé legalizar absolutamente todos, así como los futuros instalados en La Paz.
“El trabajar esta propuesta para efectivizar la Ley 321 es para que más huertos estén legalmente establecidos, y hay muchos más con ganas de querer implementar huertos en el Municipio”, contó.
Cada huerto tiene una dimensión diferente, hay algunos de 40 metros cuadrados y otros de hasta una hectárea, tal es el caso del huerto Laka Uta, que está establecido en el parque municipal Laka Uta, que estaba abandonado. Se logró revitalizarlo gracias a 40 familias y se convirtió en un aula abierta, ya que los ahora huerteros aprendieron desde cero a cultivar sus propios alimentos. “Nosotros ocupamos 600 metros cuadrados en producción”, acotó Rivera.
La propuesta presentada al Municipio también pide que se haga la identificación y cuantificación de los espacios municipales que podrían usarse para huertos vecinales.
“Entre los beneficios que trae consigo practicar la agricultura urbana en los municipios es 1. Rescatar esos espacios abandonados de avasalladores, de delincuencia e inseguridad. 2. Generar comunidades, aulas abiertas, genera espacios agradables para que la población pueda visitar, conocer y aprender. 3. Puedes trabajar seguridad alimentaria, agricultura urbana, cambio climático. 4. Y sobre todo reconecta a la población con la naturaleza, con aquello que es producir nuestros alimentos y esto hace que se genere empatía con el medio ambiente”, explicó.
Al respecto, una de las huerteras, Luz María Aramayo, quien es Administradora Turística y Educadora Especial, manifestó que al cultivar también aprendió a ser resiliente, ya que debe esperar varias temporadas para ver el crecimiento de la planta. “Para nosotros esto muy enriquecedor, también hemos hecho una comunidad de huerteros porque estamos todos mirando hacia un mismo objetivo”, dijo.
Aramayo dijo que decidió conocer este oficio debido a la necesidad de que su familia consuman alimentos orgánicos, pues los productos se cultivan sin pesticidas, por lo tanto, además el producto dura más tiempo. “Por el tema de la seguridad alimentaria nos estamos enfocando a mantener nuestras familias sanas con estos productos, no estamos lucrando”, aclaró.
Otro de los huerteros, Isaac Rojas, quien estudió filosofía, también cuenta su experiencia y asegura que a partir de la pandemia en mucha gente despertó la conciencia medioambiental y empezaron a hacer algo más en sus tiempos libres, así como lo hace él. “En mi zona trabajamos con los vecinos, alrededor de 10 familias”, relató.
Explicó que aprendió a crear abono natural, que es muy fértil, con material seco y orgánico producido en los mismos hogares, principalmente con lo que se desecha de la cocina.
Capacitación
Una vez al mes la población que lo desee será capacitada en Jornadas de Agricultura Urbana, donde aprenderá a cultivar desde la preparación del suelo, el cuidado de las plantas, elección de hortalizas, cómo cosecharlas y qué hacer con las cosechas. Estas actividades serán gratuitas para el público, quienes pueden encontrar más detalles en la página de Facebook Huerto Orgánico Lacauta o contactarse al 73258314.