El gobierno, mediante la aplicación de la llamada nueva política de Lucha Antidroga, indirectamente, está favoreciendo el crecimiento del narcotráfico en el país, a través del fomento a los cultivos de la hoja de coca, materia prima para la elaboración de pasta base y cocaína. Esta aseveración se sustenta en los siguientes hechos:
- Los cultivos de coca han aumentado en el Trópico de Cochabamba, Yungas, Caranavi, La Asunta, Alto Beni y otras regiones.
- La erradicación o racionalización de cultivos ha bajado dramáticamente en relación a otros años.
- Incumplimiento del Acta de Entendimiento, suscrita en octubre de 2004, que fijaba 3.200 Has de cultivos permitidos en el trópico de Cochabamba. Los cultivos mensurados llegan casi a 6.000. El Viceministro de Defensa Social oculta las cifras al señalar al periódico El Deber que no puede dar ninguna cifra oficial.
- Autorización de facto e ilegal (no hay ley ni decreto) de un cato por afiliado. En el Chapare superan los 45.000. En el Departamento de La Paz y resto del país no se conoce con precisión número de afiliados.
- Registro y catastro de cultivos en entredicho. De las tareas de racionalización (erradicación) y su fiscalización, participan el gobierno a través del VDS y otras Direcciones, cuyas autoridades son cocaleros. En todo el proceso está presente las Federaciones de cocaleros (juez y parte)
- Gobierno retrasa en forma deliberada, con diversos argumentos, el Estudio de la Demanda Legal de hojas de coca. Ya estaba virtualmente concretado el financiamiento de organismos internacionales., cuando dejó el gobierno el presidente Rodríguez. Esperamos que el gobierno cumpla lo anunciado por el Viceministro de Defensa Social, ayer 20 de mayo en un matutino cruceño, en sentido que este año empieza el estudio.
- Se sabe por diversos estudios que las cantidades de hoja de coca requeridas para productos derivados de uso legal, de concretarse la llamada industrialización de la coca, son mínimas. Por ejemplo en la fábrica de industrialización de coca inaugurada en diciembre de 2006, en Lauca Ñ, se anunció que se necesitaría 1.500 toneladas de hojas de coca para productos derivados. Esto hace un total de apenas 550 hectáreas de cultivos del arbusto. Un estudio científico e imparcial es indispensable para aclarar definitivamente el tema.
SOBRE LA POSICION DEL GOBIERNO
El Viceministro de Defensa Social, Felipe Cáceres, dice que la nueva Estrategia de lucha antidroga, parte de la revalorización de la hoja de coca, consenso con los cocaleros y no a la represión.
Ernesto Justiniano afirma que:
Esta política es ambigua, porque por un lado se incentiva la producción de la coca legalizando de facto las zonas excedentarias e ilegales, y por otro, se dice que se combate al narcotráfico, como si ambos factores no tuvieran relación. Es también paradójica porque se pelea contra el efecto y no contra la causa.
El gobierno se jacta de cero represión, olvidando la muerte de dos cocaleros en inmediaciones de Yungas de Vandiola y el Parque Nacional Carrasco.
El llamado consenso, no es otra cosa que un acuerdo político entre el Presidente Evo Morales y sus afiliados de las Seis Federaciones, que además aumentaron de 23.000 a más de 45.000, según admite el propio Viceministro y los dirigentes sindicales del sector.
Se agrega el hecho del nuevo reglamento de circulación y comercialización que permite que alrededor de 70000 productores de coca en el país puedan vender la coca directamente al consumidor. Esto imposibilita la fiscalización legal y operativa del Estado.
El Viceministro de Defensa Social afirma que en el pasado no hubo una verdadera lucha contra las drogas. Menciona casos de narcoavión, narcovínculos, Huanchaca. Dice que en el actual gobierno han realizado la mayor incautación de droga de la historia…
Ernesto Justiniano señala que:
El aumento de los niveles de incautación es directamente proporcional al alarmante crecimiento de la producción de droga en todo el país, producto del aumento de cultivos. Si bien, se reconoce el enorme esfuerzo de la FELCN, organismo de alta especialización y larga experiencia, en el trabajo de interdicción. También es necesario advertir que la incautación de droga representa entre el 10 y 15 % del total de droga producida en el país.
El Viceministro al mencionar casos emblemáticos de los llamados peces gordos del pasado, olvida que desde hace algunos años, el narcotráfico ha cambiado de accionar, ha reemplazado las grandes mafias por la micro empresa de la droga y los clanes familiares que existen por miles en todo el país y en ciudades como El Alto, donde se encuentra al menos una fabrica por semana, con capacidad de producir 5 kilos de cocaína al día. La diversificación hace más difícil la captura. El consumo interno también ha aumentado en adolescentes y hasta en niños, según la FELCN. (La Razón, domingo 20 de mayo 2007)
Otro tema que olvida el gobierno, a través del Viceministro, es que las cifras record de incautación de droga están abultadas por la marihuana. Es decir que el gobierno en la lucha contra el narcotráfico enfoca sus mayores esfuerzos hacia la marihuana, cuyos productores no están sindicalizados, y no así a la cocaína.
El viceministro, ante la constatación de El Deber, admite que el narcotráfico es un problema real en el Chapare. Más de 1.200 fábricas de cocaína destruidas en la región en apenas 4 meses.
Más cultivo de coca, más droga. A confesión de parte relevo de prueba.
401 personas que consumen habitualmente cocaína son envenenadas con el equivalente de una producción anual de un cato de coca en el Chapare.
