Los tres sobrevivientes reconocieron al oficial de haber participado en la cruel matanza. Hermana del narco plagiado advirtió que si no se liberaba a su familiar, revelaría datos sobre los vinculados al narcotráfico.
El Día. El teniente Dagner Paz Mendoza quedó aprehendido ayer en la Policía al ser reconocido mediante un desfile identificativo de haber participado en la matanza de San Ramón, donde quedó secuestrado el supuesto narco William Rosales Suárez.
El oficial que se presentó voluntariamente para ser sometido a una investigación fue reconocido por Jair Repizo Rengifo, Dagoberto Burgos Durán y Edgar Terrazas Suárez, los tres sobrevivientes del exterminio en San Ramón donde fallecieron tres serbios miembros de la seguridad de Rosales.
El vehículo en que viajaban los testigos fue sometido ayer a un peritaje balístico para determinar la trayectoria de los proyectiles el momento en que fueron ejecutados. “Queremos saber si hubo cruce de fuego y determinar por qué se mató sólo a seis y no a todos”, dijo Miguel Gonzales, jefe de la Felcc.
Para hoy se tiene planificado dar a conocer la prueba del guantelete a la que fue sometido el teniente de Policía implicado.
Sonia Rosales, hermana del desaparecido, aseguró que William se encuentra con vida pues en un contacto telefónico escuchó cómo se hacían la burla de él. La Policía espera que en el transcurso de hoy se tome declaraciones a Juan Carlos Maraz, que también sobrevivió con tres disparos en el cuerpo.
Detienen a un teniente de Policía por caso Rosales
El policía en servicio activo fue identificado como parte del operativo delictivo
Delincuencia. Cuatro de los seis asesinados el viernes en San Ramón. La Policía investiga el hecho.
La Razón. El teniente en servicio activo de la Policía, Dagner Paz, fue aprehendido ayer por la Fiscalía poco después de que fuera identificado como uno de los uniformados que habría participado del operativo de secuestro de William Rosales y el asesinato de seis personas, informó el fiscal Ruddy Peredo.
“Paz va a ser conducido ante el juez de garantías por el delito de asesinato. Una de las personas que ya fue detenida lo reconoció frente a otros tres policías”, informó Peredo.
El teniente de Policía se presentó ayer por la mañana para prestar declaraciones, ya que un día antes fue vinculado en el caso Rosales por Jahir Repizo Rengifo, Dagoberto Burgos Durán (ex policía) y Edgar Suárez Terrazas, primo del narcosecuestrado.
El abogado de la familia del plagiado, Denver Pedraza, informó que Repizo identificó al teniente. “Lo identificó plenamente por su forma de andar (tiene una dificultad al caminar), sus rasgos físicos, la estatura y sus gestos. Fue el que le sacó la manilla al colombiano (Repizo)”, insistió.
Además de Paz, fue sindicado el ex teniente de apellido Rioja, el capitán Orlando Araujo y un policía que trabajaría en Inteligencia y que tendría como sobrenombre Masaco.
La hermana del desaparecido, Sonia Rosales, exigió al director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), coronel Miguel Gonzales, y a la Fiscalía “que hagan que lo entregue a mi hermano, porque él (Dagner) ha sido plenamente identificado, él sabe dónde está mi hermano”.
“No me importa morir, pero quiero que mi hermano aparezca vivo o muerto. Nos contaron que lo tenían amarrado, lo sentaban, lo paraban y se reían de él”, sostuvo entre sollozos.
Un menomita declaró que otro le informó que vio a Rosales enmanillado. La Policía hace un rastrillaje.
Solicitan Informes a Interpol
El director de la FELCC, coronel Miguel Gonzales, informó que se solicitó a la Policía Internacional (Interpol) informes sobre los tres serbios asesinados. Los extranjeros habrían sido contratados como guardaespaldas de William Rosales. “Es irregular este tipo de trabajos”, afirmó.
Las llamadas de celular darán más pistas
Las llamadas de celular que hicieron los involucrados en el caso William Rosales Suárez se constituirán en uno de los elementos que permitirán establecer los nexos y conexiones de este clan delictivo, informó una fuente de la investigación.
“Se comunicaban, principalmente por teléfono. Pediremos informes del flujo de llamadas a las empresas propietarias de las líneas de celular que utilizaban los involucrados”, explicó la fuente.
Esto, precisó, nos permitirá establecer los nexos de los involucrados. Hasta el momento fueron detenidos el colombiano Jahir Repizo y los bolivianos Édgar Suárez Terrazas, Dogoberto Burgos Durán (ex policía), Juan Carlos Maras y el capitán de Policía en servicio activo Bagner Paz.
Mientras que los serbios Sasha Turcinovic, Predag Sertfku y Bojan Bukala, además de los bolivianos Mauricio Méndez Santistevan, Rafael Douglas Cuéllar Loras y el policía Diego Guardia Vía fueron asesinados en el operativo criminal del viernes.
La fuente explicó que existe la orden del más alto nivel para esclarecer este hecho vinculado con pugnas entre narcotraficantes colombianos y paraguayos.
“Las investigaciones están comenzando y el objetivo es encontrar los nexos de este grupo, entre ellos un aparente vínculo con algunos policías. Esto se investigará hasta el final”, insistió la fuente.
Periodistas son objeto de amenaza en cobertura
“Cuidado con esas imágenes, cuidado con lo que publiquen, no quiero ver que saquen mi cara, ¿me escucharon?”. En esos términos amenazó una persona que acompañaba a la familia Rosales a los periodistas de dos medios de comunicación que acudieron a cubrir el curso de la investigación del asesinato de seis personas y del secuestro de William Rosales.
Los periodistas se apostaron en puertas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) en busca de datos sobre las investigaciones para dar con el paradero de la persona plagiada y de los asesinos de seis personas, entre bolivianos y serbios.
La persona que amedrentó a los periodistas era de tez blanca, alto y robusto. Momentos antes estuvo conversando con el abogado de la familia afectada, Denver Pedraza, y fue filmado por las cámaras de varios medios de comunicación.
Esperó que la mayoría de los periodistas abandonara el lugar y cuando sólo quedaban periodistas de dos medios de comunicación, se acercó para increpar el porqué se lo había filmado. “Cuidado”, advirtió en tomo amenazante y luego se alejó del lugar.
Los periodistas estuvieron, prácticamente, todo el día de ayer esperando en puertas de la FELCC información sobre el caso Rosales. En la mañana se presentó a declarar el capitán en servicio activo de la Policía, Dagner Paz, y en la noche se informó de su detención preventiva.
Paz fue identificado como uno de los policías que participó del operativo delictivo del viernes en la población de San Ramón. Fue identificado por los detenidos en este caso y hoy será remitido a medidas cautelares para saber si se lo detiene o deja en libertad.
Un policía activo, detenido por la matanza de San Ramón
Violencia: El agente fue identificado plenamente por uno de los testigos del ataque. Los tres aprehendidos anteriores permanecen por seguridad en la FELCC.
La Prensa. El teniente de la Policía Dagner Paz Mendoza fue aprehendido anoche en celdas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) tras ser reconocido, en un desfile identificativo, por uno de los testigos de la matanza de San Ramón, donde perdieron la vida seis personas y fue secuestrado el presunto narcotraficante boliviano William Rosales Suárez.
Además, peritos policiales tomaron muestras e hicieron pruebas al vehículo en el que fueron ejecutadas cuatro personas. Las evidencias serán enviadas a La Paz y los resultados estarán listos en cinco días, informó el director de la FELCC, Miguel Gonzales.
Sobre el detenido, el fiscal Carlos Rudy Parada informó que Paz se presentó voluntariamente y negó cualquier vinculación con el hecho.
El lunes fueron detenidos preventivamente el colombiano Jair Repizo Rengifo y los bolivianos Dagoberto Burgos Durán y Édgar Suárez Terrazas, supuestos testigos de los hechos, quienes debían ser trasladados al penal de Palmasola, en cumplimiento a la orden del juez Luis Tapia Pachi. Sin embargo, por seguridad, los tres permanecen en celdas de la FELCC.
Aprovechando esta situación y la presencia del teniente Paz en el lugar, el Ministerio Público determinó que se realice un desfile identificativo. A las 18.15, el agente acusado y otros tres efectivos de uniforme salieron en formación, y Dagner Paz fue identificado plenamente por el colombiano Repizo como la persona que lo enmanilló en la falsa requisa de droga por inmediaciones del río Quiser, entre San Ramón y Ascensión de Guarayos, el día de los asesinatos y el secuestro.
Ante la denuncia, el fiscal Parada ordenó de inmediato la aprehensión del uniformado, que hoy será imputado por asesinato y llevado ante un juez cautelar.
El representante del Ministerio Público dijo que, en principio, Paz negó haber participado en el crimen y argumentó que todo este tiempo estuvo pescando en compañía de amigos y familiares.
“(Dagner Paz) fue reconocido por su forma de andar, sus rasgos físicos, su estatura, su nariz y por sus gestos. Fue la persona que le puso las manillas al colombiano (Repizo)”, informó el abogado Denver Pedraza, portavoz de la familia Rosales.
Por su parte, el abogado de Repizo, Freddy Fernández, dijo que con la detención del policía quedará demostrada la inocencia de su cliente y que el extranjero es una víctima y no un autor del hecho.
Por otro lado, ayer fue intervenido quirúrgicamente Juan Carlos Maraz Gutiérrez, que sobrevivió a la masacre haciéndose el muerto, con tres disparos en el cuerpo. En medio de un gran dispositivo de seguridad, Maraz fue llevado al Centro de Traumatología, donde le reconstruyeron el hombro derecho, tras cuatro horas de operación. El sujeto es considerado un testigo clave del suceso.
Tras la detención del teniente Dagner Paz, Sofía Rosales, hermana del secuestrado William Rosales, pidió a los autores del rapto que devuelvan a su hermano “vivo o muerto”, para tranquilidad de la familia.
“El (policía) que está identificado sabe dónde está mi hermano y tiene que entregarlo. Que, por favor, lo entregue, vivo o muerto, pero que lo entregue”, pidió la mujer, con desesperación. A tiempo de expresar que teme por su vida y por la de sus familiares, Sofía Rosales insistió en que el agente identificado conoce la identidad de las personas que ordenaron el secuestro.
Para destacar
Los serbios llegaron para resguardar a Rosales Suárez y formaban parte de una agencia internacional de seguridad.
Los “narcos” le pusieron precio a la cabeza de Rosales, porque día antes, la FELCN desbarató una megafábrica de cocaína.
La droga atraviesa todo el territorio nacional, con destino a Brasil, Argentina y Chile, rumbo a Europa y África.
Los reportes de la Policía dan cuenta que “narcos” colombianos y paraguayos se disputan el territorio de la droga en Bolivia.
Amenazan con revelar secretos del clan Rosales
Las fuerzas especiales de Lucha Contra el Crimen y Contra el Narcotráfico coordinan acciones para esclarecer el asesinato de seis personas, entre ellas bolivianos y serbios
El sobreviviente. Juan Carlos Maraz, con tres impactos de bala en el cuerpo, es socorrido el sábado. Se espera su recuperación para tomar su declaración.
La Razón. El secuestrado William Rosales Suárez formaba parte del clan “Rosales”, que fue vinculado al narcotráfico desde hace más de 16 años. La hermana del plagiado demandó ayer la libertad de la víctima y amenazó con revelar los secretos del clan.
Una fuente vinculada a la investigación recordó que el clan “Rosales” estuvo relacionado con la actividad ilícita del narcotráfico desde hace más de una década y que, incluso, algunos de sus líderes estuvieron en la cárcel.
Los hermanos Robin, Ruan y Johnny Rosales Ágreda fueron acusados por el delito de narcotráfico en 1994. El 2008, un operativo antidroga logró su detención, pero el juez Roque Leaño los liberó porque el delito por el que se los acusaba había prescrito.
En ese entonces se los buscaba por lavado de dinero. Una indagación de la fuerza antidroga mostró que tenían entre bienes inmuebles y vehículos más de cinco millones de dólares producto del narcotráfico. Se secuestró sus bienes, pero poco después la justicia se los devolvió porque se arguyó que los adquirieron tras el proceso por narcotráfico.
William Rosales también tiene antecedentes penales. Tiene en Cochabamba una sentencia de 10 años de cárcel por narcotráfico y, pese a ser detenido en Santa Cruz, no purgó su condena porque fue puesto en libertad por motivos aún desconocidos.
“Este es un clan familiar que opera desde hace más de 10 años. El secuestrado es uno de los menores del clan. Por lo que se ve hasta ahora, tenía mucho poder”, informó una fuente policial.
Un operativo delictivo ejecutado por colombianos el viernes en San Ramón acabó con el secuestro de Rosales Suárez y la muerte de seis de sus guardaespaldas, entre bolivianos y serbios; estos últimos contratados unos días antes.
Hasta el momento no se conoce el paradero de la víctima, que se presume lideraba una banda de narcotraficantes paraguayos que habría revelado a la Policía la ubicación de un megalaboratorio de cocaína que estaba por operar en San Ignacio de Velasco, bajo órdenes de colombianos.
Los narcos colombianos habrían ofrecido un millón de dólares en Paraguay por la captura y entrega de Rosales Suárez. Aunque tampoco se descartó que gente del mismo clan haya armado el operativo de secuestro y posible asesinato del secuestrado, según otra fuente de la indagación.
Sonia, hermana del narco plagiado, estuvo ayer en las oficinas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de Santa Cruz para exigir que se dé con el paradero de su hermano. En la mañana advirtió que si no se liberaba a su familiar, revelaría datos sobre los vinculados al narcotráfico.
“Yo voy a desenmascarar todo a su debido tiempo. Yo quiero que mi hermano aparezca vivo o muerto, porque yo sé todas las cosas; mi hermano a mí me contó de la gente de su alrededor”, sostuvo, mientras que en la tarde se limitó a señalar que “estaba confundida” cuando se le pidió mayores detalles de su amenaza.
Otra fuente de la pesquisa sostuvo que los grupos que operaron el viernes son “organizaciones criminales que se juegan intereses como el control de espacios de poder en esta actividad”.
“Nosotros no vamos a renunciar a la investigación, llegaremos hasta el fondo, toque a quien toque la investigación.
Lo ocurrido hasta ahora sólo es la punta del ovillo”, anticipó la fuente que participa en la indagación.
Otra fuente policial indicó que se activó contactos con Paraguay y Colombia para tratar de establecer nexos del clan de narcotraficantes que opera en el país.
El testigo clave es boliviano
Juan Carlos Maraz, quien sobrevivió a tres impactos de bala, es boliviano y no colombiano, como se informó inicialmente. Este ciudadano estuvo en la balacera del viernes y llevó el cuerpo de sus seis compañeros muertos hasta un retén policial. Se encuentra internado en el Hospital Japonés y se constituye en el “testigo clave” de la Fiscalía en la investigación.
Bienes por más de $us 5 millones
En junio del 2008, el operativo “Diamante Blanco” detuvo a los hermanos Rosales con un patrimonio en bienes y vehículos superior a los cinco millones de dólares. El operativo fue el resultado de una investigación de más de cinco meses.
La Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) secuestró 12 viviendas de lujo, 12 vehículos, entre ellos dos camiones, nueve armas de fuego de diferente calibre, equipos de comunicación satelital, celulares y equipos de comunicación interdepartamental.
Además, se confiscó dos avionetas monomotor. El conjunto de bienes llegó a superar los cinco millones de dólares, que fueron devueltos a sus dueños por el juez Roque Leaños bajo el argumento de que fueron adquiridos después de una investigación y acusación por narcotráfico que prescribió contra los hermanos Robin, Ruan y Johnny Rosales.
William Rosales, hoy secuestrado, fue detenido el 2008 con un vehículo valuado en más de 95 mil dólares.
Temen por la vida del ex capitán Araujo
La vida del ex capitán de policía Orlando Araujo corre peligro, porque fue uno de los identificados en el operativo criminal y secuestro de William Rosales. De ser detenido, podría constituirse en un testigo clave para esclarecer este caso, afirmó el abogado de la familia Rosales, Denver Pedraza.
“Si ha sido contratado por alguien para cometer ese hecho de sangre, seguro que no quieren que hable y, si no aparece, tememos que vayan a matarlo para que no diga nada”, advirtió el abogado.
El colombiano Jahir Repizo Rengifo identificó a Araujo como a uno de los miembros del grupo que interceptó, mató a seis personas y secuestró a Rosales. Incluso reveló que el plagiado lo reconoció antes de ejecutarse el operativo.
“Araujo corre serio peligro, por la misma gente que lo contrató, o sea pueden intentar acabar con la vida del capitán”, insistió el abogado.
La Policía busca, precisamente, al ex capitán y a otros uniformados involucrados en este caso. Pedraza sostiene que no existe una causal de ajuste de cuentas en el secuestro de Rosales, pero considera que existen otros móviles.
“No creo que hayan mandado a matarlo por ajuste de cuentas. Lo que pasa es que muchas personas, entre ellos colombianos, que estaban tras de él, le tenían miedo, le tenían mucho respeto a William Rosales”, sostiene.
Pedraza, no obstante, reconoce que existió intención de acabar con la vida de Rosales Suárez. No se conoce la situación del secuestrado, aunque el viernes los plagiadores se habrían comunicado con la familia para advertirle que no reclamen por el narcotraficante.
Narcos colombianos habrían ofrecido un millón de dólares por la captura y entrega de Rosales.