Obituario. El docente y humanista, padre del ex presidente Carlos Mesa, falleció ayer a los 85 años. Fue uno de los profesionales más destacados en el estudio de la época precolombina y virreinal de Bolivia.
El historiador. José de Mesa en un retrato familiar de 1978.
La Razón, Liliana Carrillo – La Paz
El arquitecto, historiador de arte, docente y humanista José de Mesa Figueroa, Premio Nacional de Cultura, falleció ayer a los 85 años a causa de una neumonía. El padre del ex presidente Carlos Mesa fue pionero en la investigación del patrimonio boliviano.
“Mi papá falleció, la madrugada de ayer, acompañado por la familia. En los últimos años sufrió la enfermedad de Alzheimer, pero se lo llevó una neumonía”, confirmó Isabel Mesa, hija del reconocido historiador, cuyos restos serán enterrados hoy, a las 16.00, en el Cementerio Jardín.
“Dejó de ser él en realidad hace ya algunos años a causa del Alzheimer. Un hombre que tenía la inteligencia y la cabeza tan clara y tanto conocimiento, que perdiera la memoria realmente ha sido terrible para no-sotros”, aseguró Carlos Mesa Gisbert, ex mandatario de Bolivia y primogénito del historiador. “Pero por otra parte queda el orgullo de toda la familia de haber recibido de él la sabiduría, la enseñanza, el espíritu. El orgullo que haya trabajado con mi madre toda su vida intelectual y que nos ha dejado un legado invaluable”. Al historiador le sobreviven su esposa, la arquitecta Teresa Gisbert, y sus tres hijos: Carlos, literato y comunicador; Isabel, educadora y escritora; y Guiomar, artista plástica.
Nacido el 30 de marzo de 1925, en La Paz, José de Mesa Figueroa se licenció en Arquitectura y Urbanismo en la Universidad Mayor de San Andrés en 1950. Siguió sus estudios de posgrado en arte virreinal en Sevilla y Madrid (España).
De regreso a Bolivia, ganó la prestigiosa Beca Guggenheim con la que pudo realizar un profundo estudio sobre el arte virreinal andino, junto a su esposa Teresa Gisbert. Fruto de aquel trabajo son los libros: Holguín y la pintura virreinal del Alto Perú (1956) e Historia de la pintura cuzqueña (1962). Siguieron decenas de publicaciones producto de sus investigaciones sobre historia precolombina y colonial, realizadas tanto en solitario como en sociedad. Uno de sus libros más famosos es Historia de Bolivia, escrito en colaboración familiar con Teresa Gisbert y Carlos Mesa
En el ámbito académico, el arquitecto José de Mesa formó a decenas de generaciones en la Universidad Mayor de San Andrés y en la Universidad Católica Boliviana de La Paz, entre 1950 y 1998. También impartió cátedra especializada en historia del arte y restauración, invitado por la Unesco en varias universidades de la región.
Jose de Mesa tuvo a su cargo la planificación, catalogación y dirección de algunos de los museos más importantes de Bolivia como el Museo Nacional de Arte y el Museo Catedral de Sucre. Durante años fue director del Instituto Boliviano de Cultura, que a la postre se convirtió en ministerio. Fue curador de numerosas exposiciones artísticas de pintura y escultura dentro y fuera de Bolivia, así como responsable de la restauración de importantes monumentos y complejos arquitectónicos en Bolivia y Perú. Ambos países le han dado sus más altos reconocimientos estatales.
Recibió los más altos galardones del Estado
José de Mesa Figueroa recibió los más importantes reconocimientos del Estado boliviano: el Premio Nacional de Cultura 1995 y la condecoración Cóndor de los Andes. También fue distinguido con la Medalla al Mérito Cultural otorgada por el Gobierno español y la importante distinción de la Orden del Sol del Gobierno del Perú.
El historiador José de Mesa partió, pero su aporte se queda
Patrimonio: Fue uno de los profesionales más destacados en el estudio de la época precolombina y virreinal de Bolivia. Las exequias se cumplen hoy en La Paz.
Velorio: familiares en la capilla ardiente, ayer
La Prensa
El historiador y arquitecto José de Mesa, de 85 años, falleció ayer tras una larga batalla que enfrentó contra el mal de Alzheimer, una enfermedad degenerativa que le obligó a alejarse de toda actividad pública.
De acuerdo con fuentes de la familia, el deceso del intelectual se produjo alrededor de las 4.00 de la madrugada de ayer, precisamente en su residencia, ubicada en el sureño barrio paceño de Calacoto, donde además se instaló el velatorio.
La partida del arquitecto De Mesa fue recibida con serenidad por sus allegados, quienes destacaron su legado en favor de la valorización del patrimonio cultural del país. De hecho, tuvo a su cargo la planificación, catalogación y dirección de algunos de los museos más importantes de Bolivia, como son, entre otros, el Museo Nacional de Arte entre 1960 y 1964 y el Museo Catedral de Sucre.
Por su parte, el ex presidente de la República Carlos Mesa Gisbert resaltó el valioso aporte de su padre a la recuperación del patrimonio histórico boliviano.
José de Mesa nació en 1925 en la ciudad de La Paz. Estudió arquitectura en la Universidad Mayor de San Andrés y se especializó en Historia del Arte en España y Estados Unidos.
Llevó adelante una amplia investigación sobre arte virreinal en Bolivia, Perú, Colombia, Ecuador y Chile, y su obra sobre esta materia es una de las más amplias e importantes realizadas en la región. Como experto en arte precolombino por la OEA y la UNESCO, participó en la restauración de monumentos arqueológicos en Machu Picchu, Cusco y Trujillo.
A la actividad de investigación sumó la docencia, durante más de 30 años, en las universidades Mayor de San Andrés y Católica de La Paz, Bolivia, y de la Uninersidad de Cusco en Perú.
En 1989, el Gobierno le otorgó la condecoración del Cóndor de los Andes y en 1995 se hizo acreedor al Premio Nacional de Cultura. Entre sus numerosos reconocimientos se cuentan también la Orden del Sol de Oro del Gobierno del Perú y el Premio a la Creatividad Humana de la Universidad Católica del Perú; la Medalla al Mérito y la Orden de Isabel la Católica otorgadas por el Gobierno Español y la condecoración del Gobierno de Francia a la Cultura.
Apuntes
Autor de más de 30 libros tanto en forma individual como en coautoría con otros investigadores.
Estuvo casado con Teresa Gisbert y tuvo cuatro hijos: Carlos, que fue Presidente de Bolivia; Andrés, Isabel y Teresa Guiomar.
Recuerdos
“José de Mesa es una de las personalidades intelectuales de Bolivia más significativas de la segunda mitad del siglo XX. Junto con su esposa Teresa ha desempeñado un papel muy importante en la gestión y en la restauración de patrimonio artístico del país. Desde distintos lugares, él ha dirigido el tema de patrimonio y la recuperación de numerosos monumentos. Ha contribuido a la creación de varios museos, como el Museo Nacional de Arte”.
Pedro Querejazu / Historiador de Arte
“Él era uno de los hombres más cultos de Bolivia, y a nivel internacional dio muy buenas clases de Historia de la Arquitectura y, en general, de conocimientos de la arquitectura. Hablaba de la pintura como hablaba de la música, era un hombre moderno. El aporte son sus libros, la enseñanza, era una gran persona. Para mí, lo más destacado de Mesa fue el haber dado el aporte de la pintura boliviana; por ejemplo, estudio a varios pintores del siglo pasado”.
Ricardo Pérez Alcala / Pintor
“En relación a la arquitectura, jugó un papel importante a nivel docente, ha sido orientador de la facultad por mucho tiempo. Él ha sido el que ha creado el modelo de facultad que hemos tenido. Muy dedicado al tema de las artes, él ha sido creador del Instituto de Investigación de la Facultad de Arquitectura y también fue creador de la Carrera de Artes de la misma facultad. Toda su vida estuvo dedicada a la docencia y a trabajos de restauración”.
Gastón Gallardo / Director del Instituto de Investigaciones de Arquitectura de la UMSA.
“La labor que ha cumplido el arquitecto Mesa como director de los Museos Municipales por más de 15 años fue muy importante porque no sólo se preocupó por la museografía, sino que al mismo tiempo logró una serie de proyectos museográficos, sobre todo en torno al arte virreinal. Organizó exposiciones internacionales sustanciosas, como el Retorno de los Ángeles. Dentro de los museos municipales, promovió la exposición de arte virreinal”.
Fátima Olivares / Curadora del Museo Nacional de Arte